Un niño de 6 años disparó a su hermana menor de 5 mientras la madre tomaba una siesta, ocasionándole la muerte. Ambos padres fueron arrestados y podrían enfrentar hasta 40 años de prisión.
Alrededor de las 2:25 p.m. del martes, el Departamento de Policía de Muncie (MPD) fue alertada por un tiroteo en el 2800 de South Monroe, en Muncie, Indiana. Al llegar, los oficiales descubrieron que alguien había disparado un arma dentro de la casa y un niña de 5 años era la víctima.
La niña fue llevada de urgencia «con una grave herida de bala en la cabeza» al Hospital IU Health Ball Memorial, donde las autoridades dijeron que fue declarada muerta, según informa The Star Press.
El padre, Jacob Curtis Grayson, de 28 años, explicó a las autoridades que su hijo de 6 años sacó una pistola cargada de una caja fuerte en la habitación de sus padres y «le disparó a su hermana».
El niño también dijo a los agentes que había sacado el arma mientras su madre dormía y que había «disparado accidentalmente a su hermana mientras jugaba con la pistola», según un informe policial citado por el mismo medio.
La madre de los niños, Kimberly Danielle Grayson, de 27 años, dijo que su siesta vespertina de ese martes fue de cinco minutos.
Ambos padres explicaron que no era la primera vez que su hijo abría la caja fuerte que contenía dos pistolas cargadas, pero su respuesta solo fue cambiarla de lugar. También dijeron que habían ido a un campo de tiro y trataron de enseñar a su hijo cómo disparar un arma de fuego.
Después del fatal accidente, investigadores del MPD trabajaron durante toda la toda la tarde y noche en la casa de los Grayson, y no se permitió la entrada a la zona a ningún vehículo, de acuerdo a CBS4.
Melissa Criswell, subdirectora del MPD, dijo que la investigación del caso «determinó que un hermano varón de 6 años había sacado un arma de una caja fuerte en la residencia y le había disparado accidentalmente a su hermana».
Los dos padres están acusados de abandono de un dependiente que resultó en la muerte de su hijo de 5 años, un delito de nivel 1 que conlleva hasta 40 años de prisión, y tres cargos adicionales de negligencia.
«Todo lo que pude haber hecho, y lo que hice, es orar por la familia», compartió una vecina que no quiso ser identificada. «Tengo tres nietos de la edad de esa niña. No sé cómo me sentiría o cómo me iría, pero mi corazón está con la familia».
El doctor Tyler Stepsis, jefe de medicina de emergencia de Eskenazi Health, quien conoce de cerca las consecuencias de estos eventos, compartió que para un niño es especialmente difícil pasar por ellos, y que «las vidas inocentes son inocentes por una razón».
«Incluso para aquellos que sobreviven, ese miedo, ese dolor, tiende a estar con ellos por mucho, mucho tiempo», dijo, y agregó que lo mejor es prestar especial atención a la seguridad y educación sobre armas.
«Mantenerlas bajo llave es lo más importante», dijo Stepsis. «No todo el mundo puede permitirse una caja fuerte, pero casi todo el mundo puede permitirse un cerrojo».
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