Anthony Fauci, miembro del Grupo de Trabajo de la Casa Blanca contra la Pandemia, dijo el domingo que es poco probable que haya un cierre nacional para frenar la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), que causa la enfermedad COVID-19.
En una entrevista con Jake Tapper de CNN, Fauci recomendó que los estadounidenses deberían seguir usando mascarillas, lavándose las manos y practicando el distanciamiento social mientras se espera una vacuna contra el COVID-19, pero no deben esperar un cierre nacional o una orden de permanecer en casa.
“No vamos a tener un cierre nacional. Creo que eso está muy claro”, dijo Fauci. “Pero creo que lo que vamos a empezar a ver a nivel local, ya sean gobernadores o alcaldes o personas a nivel local, hará, como usted dijo, restricciones de tipo muy quirúrgico, que son el equivalente funcional de un bloqueo local».
Según Fauci, la nación podría comenzar a regresar a la normalidad prepandémica en abril o julio de 2021, con la esperanza de tener una vacuna eficaz disponible en cantidades masivas en ese momento.
“Si conseguimos que la abrumadora mayoría de las personas se vacunen y tienes, por un lado, una vacuna eficaz; por otro lado, un alto grado de uso de la vacuna, podríamos empezar a hacer que las cosas vuelvan a la normalidad relativa conforme avanzamos en el segundo y tercer trimestre del año, donde la gente pueda empezar a pensar en hacer cosas que eran demasiado peligrosas hasta hace apenas unos meses”, dijo.
Los comentarios de Fauci ocurren luego de que Michael Osterholm, epidemiólogo de la Universidad de Minnesota y miembro del grupo de trabajo contra la pandemia del candidato demócrata Joe Biden, recomendara cerrar la economía durante cuatro a seis semanas para reducir la cantidad de infecciones por el virus del PCCh mientras el gobierno paga a los trabajadores y las empresas que están sin trabajo.
“Podríamos pagar un paquete ahora mismo para cubrir todos los salarios perdidos de trabajadores individuales, por pérdidas de pequeñas empresas, empresas medianas o gobiernos de ciudades, estados y condados. Podríamos hacer todo eso”, dijo Osterholm a Yahoo Finance Live la semana pasada. «Si hiciéramos eso, entonces podríamos cerrar de cuatro a seis semanas y si hiciéramos eso, podríamos reducir las cifras».
Biden, quien se autoproclamó ganador de las elecciones presidenciales rodeado de acusaciones de fraude electoral generalizado, dijo que estaría a favor de un cierre en todo el país si es lo que los científicos consideran necesario.
Mientras tanto, el presidente Donald Trump ha prometido que su administración «no irá a un cierre».
“Con suerte —pase lo que pase en el futuro— ¿quién sabe qué administración será? Supongo que el tiempo lo dirá”, dijo Trump durante una conferencia de prensa desde el Jardín de las Rosas la semana pasada. “Pero les puedo decir, esta administración no irá a un cierre. No habrá necesidad. Los cierres cuestan vidas y muchos problemas».
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