Un gran número de chinos ha estado en los últimos días posteando y divulgando en las plataformas de redes sociales que han sufrido una reinfección de COVID-19. Frente a esto, el medio de comunicación del régimen chino se ha apresurado a publicar un artículo que desmiente que el país esté sufriendo una nueva oleada del virus.
Personas de todo China afirmaron que se habían vuelto a infectar con COVID-19 y publicaron los resultados positivos de sus pruebas de antígenos en las redes sociales. Desde el 20 de abril, «positivo de nuevo» se convirtió en la frase más buscada en Internet en China.
Wei Min (seudónimo), residente en Nanjing, declaró a The Epoch Times el 23 de abril que empezó a presentar síntomas el 21 de abril. Compró un kit de reactivos de antígeno de COVID-19 para hacerse la prueba en casa y el resultado fue positivo.
«De hecho, el virus está en todas partes», dijo Wei, quien viajó a otra región de China el 21 de abril, y es posible que se infectara allí. Es la segunda vez que se infecta de COVID-19.
Han pasado más de cinco meses desde que se produjo el punto álgido de la infección masiva por COVID-19 en China continental a finales del año pasado. Los casos de reinfección han atraído cada vez más la atención pública.
El principal virólogo de China sugirió a la población que se preparara para otra oleada de brotes.
Zhang Wenhong, director del Centro Nacional de Enfermedades Infecciosas de China y director del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital Huashan, afiliado a la Universidad de Fudan, declaró en una «Cumbre sobre Infección e Inmunidad» celebrada el 20 de abril que, a medida que el virus mute, se producirán reinfecciones por COVID-19 al cabo de 6 meses. Si la mutación del nuevo virus consigue atravesar la barrera inmunitaria formada por el cuerpo humano en respuesta a la oleada anterior de virus, se producirá un nuevo máximo de infecciones en la siguiente oleada del brote.
Zhang pidió que se almacenaran moléculas pequeñas antivirales para el COVID-19 y recomendó que los grupos vulnerables se vacunen de nuevo al cabo de 6 meses.
XBB.1.16 «Arcturus»
La opinión pública china está preocupada por la propagación de nuevas cepas del virus en el país, como la XBB.1.16.
La XBB.1.16 es una cepa recombinante de la variante Omicron de COVID-19, que pertenece a la familia XBB y se conoce comúnmente como «Arcturus». Ya ha causado víctimas mortales. Tailandia informó de una muerte por XBB.1.16 a principios de este mes.
Según los datos publicados por los CDC de China el 22 de abril, del 14 al 20 de abril, 275 pacientes se infectaron con cepas mutantes clave recién descubiertas, incluidas 42 infecciones por XBB.1.16. También se detectaron 12 cepas mutantes clave locales. El 15 de abril, los CDC de China informaron los primeros 15 casos de infecciones por XBB.1.16 en el país, lo que significa que aumentó en 27 casos en una semana.
Las cifras podrían no reflejar la verdadera magnitud de las infecciones, ya que el PCCh ha ocultado la verdad del brote de COVID-19 en el país desde el comienzo de la pandemia, y es difícil para el mundo exterior obtener datos precisos.
Según los medios de comunicación chinos, el director del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital Run Run Shaw, afiliado a la Facultad de Medicina de la Universidad de Zhejiang, admitió que, desde que se ha detectado la cepa mutante XBB en el país, los pacientes que anteriormente habían dado positivo en las pruebas de COVID-19 pueden volver a infectarse con la cepa mutada. Li Tong, médico jefe del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital You’an de Beijing, afirmó que la XBB.1.16 es más contagiosa, pero que su patogenicidad no ha cambiado significativamente.
Entretanto, el medio de comunicación en inglés del régimen chino, Global Times, publicó un artículo el 23 de abril negando que China estuviera experimentando otra oleada de brotes de COVID-19. En el artículo se restó importancia a la posible magnitud de la próxima oleada, citando a virólogos chinos que afirmaban que «los casos de reinfección son raros» y «la magnitud de la próxima oleada no será enorme».
Con la contribución de Xiao Lusheng y Hong Ning.
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