Los médicos dicen que están preocupados por la guía actualizada de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) sobre la terapéutica para los pacientes de COVID-19.
La guía, que se actualizó silenciosamente el 9 de octubre, recomienda no dar ningún tipo de tratamiento a los pacientes con síntomas leves o moderados de COVID-19 que no requieran oxígeno suplementario.
«No se recomienda ninguna terapia antiviral o inmunomoduladora específica» para los pacientes con COVID-19 que no estén hospitalizados o que estén hospitalizados sin necesidad de oxígeno suplementario, según la guía.
«Sin una cura a la vista, las medidas tomadas por los NIH y otros funcionarios federales de salud para restringir el acceso a un tratamiento temprano es una sentencia de muerte para cientos de miles de estadounidenses», dijo la Dra. Simone Gold, M.D., J.D., y fundadora de AmericasFrontlineDoctors.com a The Epoch Times en un correo electrónico.
La recomendación de los NIH de esperar el tratamiento hasta que se desarrolle una enfermedad grave va en contra del Juramento Hipocrático que los médicos prometen «no hacer daño ni injusticia» y, según la versión moderna, «prevenir la enfermedad siempre que pueda, ya que la prevención es preferible a la cura».
«Los médicos preocupados en la primera línea de la pandemia están obligados por su Juramento Hipocrático a proteger a los pacientes, pero la medida radical del NIH criminalizará la ética médica si se le permite mantenerse en pie», dice Gold.
El NIH no respondió a una solicitud de comentarios de The Epoch Times.
El Dr. Scott Jensen, un médico de familia y senador estatal republicano en Minnesota, dijo en un post de Facebook que a los pacientes se les debería permitir discutir y explorar posibles tratamientos con sus médicos en lugar de esperar a que sus síntomas empeoren.
«Mis pacientes me dicen que les gustaría probar algo», dice Jensen. «No quieren que les digan que tienen que mejorar por su cuenta o que están lo suficientemente mal como para ir al hospital y luego potencialmente tener que elegir entre un respirador o un cuidado de hospicio o lo que sea».
Jensen dice que los pacientes le preguntan qué pueden tomar como medida preventiva o poco después de dar positivo en la prueba de COVID-19, la enfermedad que causa el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
«Si en los primeros días del diagnóstico de COVID-19, no estamos mejorando, creo que es razonable, digo a los pacientes que creo que el zinc, la vitamina C y la vitamina D son buenas, si se quiere, medidas preventivas a tomar».
Aprueban el remdesivir para casos severos de COVID-19
El primer y único medicamento aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), el remdesivir, se recomienda a los pacientes hospitalizados que requieren oxígeno o ventilación suplementaria, junto con dexametasona o sin ella, según la guía.
Remdesivir, un medicamento antiviral de Gilead Sciences fue aprobado por la FDA el jueves. También se le concedió autorización de uso de emergencia para tratar a los niños hospitalizados con COVID-19 que son menores de 12 años y pesan al menos 7.7 libras.
Al presidente Donald Trump se le prescribió remdesivir junto con otros medicamentos al principio, después de que diera positivo en la prueba de COVID-19.
Contrariamente a la recomendación de los NIH de que el remdesivir se administre solo a pacientes hospitalizados que requieran oxígeno suplementario, los investigadores de un estudio doble ciego y aleatorio sobre el remdesivir dijeron que el beneficio del medicamento era «mayor cuando se administraba antes de la enfermedad».
«Si esta guía hubiera estado en vigor hace un mes, al presidente Trump se le habría negado el tratamiento en el Centro Médico Walter Reed», dijo Gold.
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