NUEVA YORK – Se necesitaron tres días de preparación y más de 5000 personas para que esto ocurriera, pero el resultado fue un deleite para la vista: un colorido emblema espiritual de 110 metros enmarcado por tres caracteres que representan los principios seguidos por millones de practicantes de Falun Dafa alrededor del mundo.
Los practicantes de la disciplina espiritual Falun Dafa, también conocida como Falun Gong, se vistieron con trajes de diferentes colores y formaron una versión gigante del emblema de la práctica llamado «Falun» o «Rueda de la Ley». Los caracteres chinos de Verdad, Benevolencia y Tolerancia – los principios de la práctica – también se mostraron en color amarillo.
La formación iluminó el campo herboso del Governors Island, ubicado a las afueras de Manhattan, en un soleado día de primavera. El evento realizado el 18 de mayo marcó el cierre de tres jornadas de actividades para celebrar el Día Mundial de Falun Dafa en Nueva York.
Falun Dafa es una práctica espiritual que consiste en cinco ejercicios de meditación y un conjunto de enseñanzas centradas en el mejoramiento de la moral. Fue introducida por primera vez en China en 1992.
Esta práctica que fue difundida de boca en boca y atrajo a decenas de millones de seguidores, se había convertido en una de las comunidades espirituales más grandes en China. Pero el régimen comunista chino lo consideró una amenaza para su control totalitario y prohibió la práctica en 1999.
La persecución a nivel nacional ha llevado a miles de practicantes a ser arrojados a las prisiones, campos de trabajo forzado y centros de lavado de cerebro, donde muchos han experimentado tortura y abuso, e incluso han muerto a causa de sus lesiones.
Honrando una tradición
El espectáculo con la formación del emblema es una tradición de décadas que comenzó en China en los años 90, cuando los practicantes todavía podían realizar libremente los ejercicios en los parques públicos en todo el país.
Desde el inicio de la persecución, los seguidores de Falun Dafa en el extranjero han seguido manteniendo viva la tradición.
Fuera de China, Falun Dafa se practica libremente en más de 70 países.
El primer homenaje en el extranjero fue en Taipei, Taiwán, en el año 2000, con gigantescos caracteres de “Verdad, Benevolencia y Tolerancia” y «Falun Dafa», desplegados en la plaza frente al Teatro Nacional Chiang Kai-shek.
En la ciudad de Nueva York, la formación del emblema se ha convertido en una costumbre anual desde el 2013, y el número de participantes sigue creciendo cada año.
Con motivo del 27º aniversario de la presentación de la práctica al público, la formación de este año fue la puesta en escena más grande en los Estados Unidos.
Los organizadores del evento dijeron que querían usar este mensaje visual para celebrar los beneficios de la práctica e informar sobre la actual persecución, con cada practicante representando una partícula de una comunidad internacional más grande.
El emblema del Falun, el símbolo de Falun Dafa, incorpora el símbolo de la esvástica del budismo y el símbolo taiji de las enseñanzas taoístas. Lleva los cinco colores estándar de la cultura china –azul, negro, blanco, rojo y amarillo– cada uno de los cuales corresponde a los cinco elementos de madera, agua, metal, fuego y tierra.
«Lo significativo de la formación del emblema es que este gran escenario realmente muestra cuán amplio se ha difundido [Falun] Dafa, y también es una oportunidad para formar un sentido de comunidad», dijo Michael Yu, organizador del evento, a La Gran Época.
«La vista aérea de la imagen puede ser muy poderosa, y realmente puede dar un mensaje».
Vivir con Verdad, Benevolencia y Tolerancia
Aunque los practicantes vienen de todas partes del mundo y hablan diferentes idiomas, los que participaron en el evento dijeron que sentían una sensación de unión debido a su aspiración compartida de convertirse en mejores personas.
Fabio Cotroneo de Roma encontró a Falun Dafa en 2012 después de buscar una práctica espiritual durante la mayor parte de su vida.
«Cuando leí ‘Zhuan Falun’ sentí que toda la verdad del universo estaba dentro [del libro]», dijo.
«Por primera vez, sentí paz en mi corazón”.
«Zhuan Falun» es el texto principal de Falun Gong, que contiene enseñanzas para mejorar la moral centradas en los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia.
Fabio dijo que el aplicar benevolencia en su vida lo ayudó en su papel como gerente de personal en un museo.
«Mi trabajo … es más simple ahora, porque no doy órdenes, sino que hablo con las personas con el corazón», dijo.
Dijo que ahora trata de escuchar y entender a las personas que dirige y de hablarles con amabilidad, incluso cuando cometen errores.
«Las personas que trabajan conmigo siempre me dicen que están serenos y tranquilos cuando … [están] en [mi] oficina, y pueden hablar conmigo», dijo Fabio.
Para Joseph Gigliotti, un quiropráctico de Ontario, Canadá, la práctica lo ha ayudado a formar un vínculo más profundo con su familia al enseñarle a dar un paso atrás en los conflictos y ponerse en el lugar de los demás.
«Mi familia siempre tiene que tener la razón, así que para mí, la parte más difícil fue no luchar, tener paciencia y decir: ‘Bueno, quizás ellos también tengan razón'», dijo.
Joseph dijo que solía enfadarse con su hermano mayor, que siempre le señalaba sus faltas. Pero la palabra «Tolerancia» le hizo ver la situación de una manera diferente.
«[Mi hermano] lo hace porque quiere que yo tenga éxito, incluso si no lo dice de una manera agradable. Al final del día, si puedes entender de que la gente se preocupa por ti, eso es lo que importa», agregó.
Myriam Orso, una servidora pública con sede en Ginebra, Suiza, comenzó a practicar Falun Gong hace 16 años. Ella dijo que leer «Zhuan Falun» le reveló el significado de la vida.
«Para todo, trato de pensar primero en estos tres principios antes de hacer algo», dijo.
Myriam explicó que estos valores la ayudan a mantener la calma y la amabilidad incluso cuando la otra persona está enojada o es hostil, y al hacerlo, descubre que la otra persona también se tranquiliza y comienza a trabajar con ella para resolver los problemas.
También se dio cuenta recientemente que la tolerancia significa tener el poder de perdonar a los demás.
«[Hay gente] a la que no he perdonado… por algo que hicieron en el pasado», dijo.
Pero aplicar los tres principios a su vida hizo que Myriam viera que las cosas que le ocurrieron no eran todas malas, y le permitió dejar su ira hacia esas personas.
«Me siento libre. Muy tranquila y libre», dijo.
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