La escasez de medicamentos contra el cáncer asola los Estados Unidos, afectando al tratamiento de los pacientes e impidiendo el progreso de nuevas terapias, según una encuesta reciente de la National Comprehensive Cancer Network (NCCN).
Según un comunicado de prensa de la NCCN del 26 de junio, de los 28 centros oncológicos que participaron en la encuesta, el 89% seguía informando de la escasez de al menos un tipo de medicamento oncológico.
Esta cifra es superior al 86% de centros que informaron de escasez en octubre. En la encuesta actual, el 75% experimentó escasez de dos o más medicamentos.
«La escasez de medicamentos críticos no era un problema nuevo el año pasado y sigue siéndolo ahora», dijo Crystal S. Denlinger, directora ejecutiva de la NCCN.
«Estos desabastecimientos no sólo suponen una carga para pacientes, cuidadores y proveedores, sino que también podrían retrasar ensayos clínicos vitales y ralentizar el ritmo de progreso de nuevas terapias contra el cáncer».
Entre los encuestados, el 57% informó de la escasez de vinblastina, que se utiliza para tratar el cáncer de mama, el cáncer testicular y el linfoma de Hodgkin.
El etoposide, un fármaco utilizado para tratar tumores testiculares, escaseaba en el 46% de los centros. El fármaco topotecán contra el cáncer de ovario escaseaba en el 43% de los centros.
Otros medicamentos, como el metotrexato y la dacarbazina, también resultaron escasos. Muchos de estos fármacos constituyen la «columna vertebral de regímenes multiagentes eficaces» en los tratamientos contra el cáncer, señaló la NCCN.
Según el grupo sin ánimo de lucro breastcancer.org, la escasez de medicamentos contra el cáncer es el resultado combinado del brote de COVID-19, los continuos problemas de la cadena de suministro y los retos financieros que implica la fabricación de medicamentos genéricos de bajo costo.
Dos medicamentos contra el cáncer, el cisplatino y el carboplatino, se enfrentaron a una escasez extrema tras el cierre en 2022 de una de las principales plantas de producción de medicamentos genéricos en la India por problemas de calidad. Dado que el margen de beneficio de estos dos fármacos es bajo, resulta más difícil para los productores fabricarlos en Estados Unidos, señaló el grupo.
La NCCN señaló que hasta el 93% de los centros encuestados experimentaron escasez de carboplatino hace un año, y que el cisplatino escaseó en el 70% de las instalaciones.
En la última encuesta de junio de 2024, esta escasez se redujo al 11% en el caso del carboplatino y al 7% en el del cisplatino. Sin embargo, el suministro de otros medicamentos oncológicos clave sigue planteando un reto.
«La situación actual subraya la necesidad de soluciones sostenibles a largo plazo que garanticen un suministro estable de medicamentos contra el cáncer de alta calidad», dijo Alyssa Schatz, directora sénior de política y defensa de la NCCN.
«El gobierno federal tiene un papel clave que desempeñar para abordar esta cuestión. El establecimiento de incentivos económicos, tales como exenciones fiscales o subvenciones a la fabricación para los fabricantes de medicamentos genéricos, ayudará a apoyar una cadena de suministro robusta y resistente».
Racionamiento de medicamentos contra el cáncer
Según un informe de marzo de 2023 del Comité de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales del Senado de EE.UU., la escasez de medicamentos, incluidos los oncológicos, aumentó casi un 30% entre 2021 y 2022. A finales de 2022, la escasez activa de medicamentos había alcanzado su nivel más alto en cinco años.
En una entrevista con la Escuela de Salud Pública Bloomberg de Johns Hopkins en julio del año pasado, la oncóloga ginecológica Amanda Nickles Fader dijo que la escasez de medicamentos contra el cáncer podría obligar a las instituciones a comenzar a racionarlos.
«Tenemos que ser responsables en cuanto al uso que hacemos del suministro de fármacos que tenemos», afirmó. «A veces eso significa utilizar prácticas a nivel de farmacia, para preservar hasta la última gota de quimioterapia y asegurarnos de que no se desperdicia ninguna».
«A veces hemos tenido que hacer algunos ajustes en cuanto a la dosificación o el intervalo de los fármacos, o puede que cambiemos a un paciente a un medicamento que pertenece a la misma clase y que funciona igual de bien que el fármaco que escasea, pero que tal vez tiene un perfil de efectos secundarios más elevado, o tarda más en administrarse».
En septiembre, la Casa Blanca anunció que en Estados Unidos había escasez de 15 medicamentos contra el cáncer. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) colaboró con los fabricantes de fármacos para aumentar la capacidad de fabricación de carboplatino y cisplatino genéricos.
Además, la agencia ejerció la «discrecionalidad coercitiva» para que un fabricante pudiera importar 14 lotes de cisplatino de una instalación registrada por la FDA fuera del país. Estas acciones minimizaron la escasez de suministro de cisplatino y carboplatino, declaró la Casa Blanca.
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