Un nuevo informe advierte al gobierno holandés que debe estar atento a la influencia del régimen comunista chino en los Países Bajos a través de la infiltración en la cultura y la educación.
El informe de investigación, publicado a finales de marzo, es obra del profesor Frank Pieke, del Centro de Asia de la Universidad de Leiden, Holanda. El informe fue financiado por la Red de Conocimiento Chino del gobierno holandés.
Según el informe, «se han sentado las bases para influir en los holandeses chinos y existe la posibilidad de interferir». Pieke instó al gobierno holandés a estar atento y ser proactivo para evitar que el régimen chino afecte negativamente a la comunidad de expatriados chinos en Holanda.
El informe analizó los vínculos directos de Beijing con ocho organizaciones locales chino-holandesas y seis importantes medios de comunicación en lengua china en Holanda.
Después de que el Parlamento holandés aprobara una moción no vinculante a finales de febrero para condenar el genocidio del Partido Comunista Chino (PCCh) contra los uigures en Xinjiang, el medio de comunicación holandés en lengua china Shunhe publicó el 8 de marzo una declaración conjunta con 55 asociaciones de expatriados chinos, en la que arremetía contra el Parlamento holandés por haber aprobado la moción. La declaración repetía el mismo mensaje que la Embajada de China en Holanda había publicado anteriormente en respuesta a la moción.
El Consejo Chino para la Promoción de la Reunificación Nacional Pacífica en Holanda, otra organización de expatriados chinos en el país, emitió una declaración similar.
Para contrarrestar la promoción del PCCh de sus ideologías socialistas y comunistas a través de los medios de comunicación locales en lengua china, el informe decía que el gobierno holandés debería establecer servicios de medios de comunicación en lengua china para las comunidades chino-holandesas.
El informe aborda cuestiones relacionadas con la enseñanza de la lengua china en las escuelas y propone que los contenidos respondan a las exigencias y necesidades del pueblo holandés, y no cedan a las demandas de China.
Mientras tanto, la Universidad de Groningen, en Holanda, también ha anunciado que no renovará su contrato con el Instituto Confucio debido a la preocupación por sus vínculos con el régimen chino. Los Institutos Confucio dependen de la agencia gubernamental china Hanban, dependiente de su Ministerio de Educación. Promueven la ideología comunista y la agenda del PCCh, incluyendo la censura de temas que el régimen considera sensibles, como la persecución de los practicantes de Falun Gong y los uigures.
El informe también afirma que el diálogo entre el gobierno holandés y los representantes de las comunidades chinas en Holanda es esencial para contrarrestar la influencia del régimen chino sobre las comunidades de expatriados, ya que «promoverá la integración, la participación, la diversidad y la apertura, además de enviar una señal a la propia China».
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