WASHINGTON—Un nuevo informe advierte que China ha cambiado el nombre de sus Institutos Confucio (IC) en las universidades estadounidenses. De los 118 IC en Estados Unidos, alrededor de 105 cerraron o anunciaron cierres. Sin embargo, al menos 38 universidades han reemplazado sus programas cerrados de IC con alternativas similares, según el informe de la Asociación Nacional de Académicos (NAS), una organización conservadora de investigación y defensa.
Los IC están financiados por el Partido Comunista Chino (PCCh), que elige y paga los libros de texto y selecciona y les paga a los ciudadanos chinos que vienen a Estados Unidos para enseñar el idioma, la cultura y la historia china.
Li Changchun, miembro permanente del Politburó del PCCh, dijo en abril de 2007 que las IC eran “una parte importante de la configuración de la propaganda en el extranjero de China”. Un informe de 2018 de la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad de EE.UU. y China dijo que las IC tenían “vínculos formales y de larga data” con el Departamento de Trabajo del Frente Unido del PCCh, una agencia responsable de coordinar las operaciones de influencia del PCCh.
En febrero de 2019, el Subcomité Permanente de Investigaciones del Senado descubrió que desde el 2006 el PCCh había invertido más de USD 158 millones en los IC con sede en EE.UU.
En agosto de 2020, el Departamento de Estado de EE.UU. designó al Centro de EE.UU. del Instituto Confucio (CIUS) como una misión extranjera china. El entonces secretario de Estado Mike Pompeo dijo que CIUS es “una entidad que promueve la propaganda global de Beijing y su campaña de influencia maligna en los campus de EE.UU. y en las aulas K-12”.
Historia de “Éxito” y “Advertencia”
La historia del IC fue una «historia de éxito» y una «historia de advertencia», dijo Rachelle Peterson, investigadora principal de NAS, en el evento de lanzamiento del informe en la Fundación Heritage el martes. Peterson fue el autor del informe nuevo y del de 2017 que facilitó el cambio de política de EE.UU.
En el nuevo informe titulado “Después de los Institutos Confucio: La influencia perdurable de China en la educación superior estadounidense”, comparó los IC con andamios que ya no le servirían al PCCh después de que se construyera el edificio, las operaciones de influencia.
Cuando estos institutos de educación superior estadounidenses decidieron cerrar sus IC, la razón más común que dieron fue que reemplazarían sus IC con un nuevo programa, según el informe. En otras palabras, estaban abandonando el nombre de IC pero reteniendo las inversiones. Y solo cinco de ellos dijeron que estaban preocupados por la influencia del régimen chino en otras universidades, pero aseguraron que sus campus habían sido perfectamente seguros.
Según el informe, la respuesta del PCCh a los cierres de los IC en Estados Unidos pasó de la conmoción y la ira al “arrepentimiento”, y eventualmente hizo ofertas para apoyar programas alternativos. Al cerrar su IC, algunas universidades tuvieron que pagarle multas al PCCh. Por ejemplo, la Universidad Estatal de Kennesaw en Georgia devolvió al menos USD 31,000, y la Universidad de Maryland le reembolsó a China USD 900,000, una cantidad que China proporcionó inicialmente para una renovación al IC.
El informe también revela que algunas organizaciones estadounidenses sin fines de lucro han actuado como intermediarios en el cambio de marca a los IC, por lo que han desempeñado un papel clave para mantener vivas a las IC.
Las recomendaciones de la NAS al gobierno federal incluyen limitar los fondos federales a las universidades que mantienen un IC o un programa similar y encargar un estudio sobre las Aulas Confucio, el equivalente K-12 a los IC en las universidades. El informe también abogó por requisitos de transparencia más estrictos en la Ley de Educación Superior para que las universidades estadounidenses den a conocer las inversiones que reciban del extranjero.
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