El senador Ted Cruz (R-Texas) propuso el 25 de enero una legislación que busca impedir que Estados Unidos venda petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR) a China y empresas propiedad del Partido Comunista Chino (PCCh).
El proyecto de ley “Protección de la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos de la Ley de China” (pdf) fue copatrocinado por otros 15 senadores republicanos.
“La Reserva Estratégica de Petróleo fue concebida para garantizar que Estados Unidos tuviera suficientes reservas de petróleo en caso de una emergencia”, dijo Cruz en un comunicado.
El legislador de Texas citó el informe según el cual la administración Biden vendió el año pasado casi 6 millones de barriles de petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos a la petrolera estatal china Sinopec.
«Joe Biden vendió una parte de este activo crítico para la seguridad nacional al Partido Comunista Chino cuando el PCCh estaba almacenando petróleo para su propio uso estratégico, y mientras los estadounidenses están pagando precios cada vez más altos por el combustible debido a las desastrosas políticas energéticas de la administración Biden», declaró.
“Necesitamos actuar de inmediato para impedir que esto ocurra en el futuro y liberar la energía estadounidense”, agregó Cruz.
El proyecto de ley de Cruz se parece mucho al proyecto de ley que el Partido Republicano aprobó el 12 de enero con una abrumadora votación bipartidista de 331-97, con el respaldo de 113 demócratas de la Cámara de Representantes.
La propuesta prohibiría que “el Departamento de Energía (DOE) venda productos derivados del petróleo (por ejemplo, petróleo crudo) de la SPR a cualquier entidad que esté bajo la propiedad, el control o la influencia del Partido Comunista Chino”, según un resumen del Servicio de Investigación del Congreso. “Además, el DOE debe exigir como condición para cualquier venta de petróleo crudo de SPR que el petróleo no se exporte a China”.
Proyecto de ley del GOP para restringir la SPR
Tras la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022, la administración Biden, que ha culpado sistemáticamente del alza de los precios de la energía a la «escalada de precios de Putin» mientras no respalda políticas de apoyo a una mayor producción nacional de petróleo, anunció una liberación de 30 millones de barriles y otra de 180 millones de barriles en marzo de 2022.
Los niveles de SPR han caído a poco más de 400 millones de barriles bajo el mandato de Biden, un 40 por ciento menos que sus niveles de reserva habituales y los más bajos desde 1984.
Los republicanos han criticado durante mucho tiempo al presidente demócrata Joe Biden por liberar las reservas de SPR en un momento en que las facturas de energía se disparan y los suministros son más bajos.
Los republicanos de la Cámara de Representantes, liderados por la representante Cathy McMorris Rodgers (R-Wash.), dieron un paso más al presentar a principios de este mes la legislación que exigiría a la administración Biden desarrollar un plan para aumentar el porcentaje de tierras federales arrendadas para la producción de petróleo y gas si quiere liberar petróleo de la SPR.
La “Ley de Respuesta a la Producción Estratégica” o HR 21 incluye una excepción en el caso de interrupciones “graves del suministro energético».
Biden vetará el proyecto de ley republicano
Sin embargo, el 23 de enero, la secretaria de Energía, Jennifer Granholm, dijo que Biden vetará el proyecto de ley republicano de la Cámara si es aprobado en el Congreso.
“Si el Congreso aprobara la HR 21, el presidente la vetaría. No permitirá que el pueblo estadounidense sufra debido a la agenda retrógrada que están promoviendo los republicanos de la Cámara”, dijo Granholm a los periodistas durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
Granholm advirtió a los republicanos que limitar la autoridad del presidente demócrata para aprovechar las reservas de petróleo del país socavaría la seguridad nacional, provocaría escasez de crudo y elevaría los precios de la gasolina.
Granholm sostuvo que el proyecto de ley “no ofrecería ningún beneficio tangible al pueblo estadounidense”.
«En su lugar, interferiría con nuestra capacidad de respuesta para liberar petróleo durante una emergencia internacional, ayudando a los objetivos bélicos de Putin. Posiblemente retrasaría la liberación de petróleo para emergencias internas después de un desastre natural o una interrupción del oleoducto en el país, dejando, nuevamente, los precios en riesgo de aumento a raíz de un shock del mercado debido a emergencias por fenómenos meteorológicos extremos”, dijo Granholm durante la rueda de prensa del 23 de enero.
En respuesta, un asesor republicano del Comité de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes dijo a los periodistas que buscan “reducir el uso del SPR solo para aquellas situaciones en las que haya una interrupción grave del suministro”.
El Departamento de Energía rechazó este mes el primer lote de ofertas de las compañías petroleras para reabastecer una pequeña cantidad de crudo a la SPR.
A pesar de ese rechazo, Granholm dijo que confía en que Estados Unidos podrá reabastecer la SPR y que podrá hacerlo con un ahorro para los contribuyentes.
“Las ofertas que recibimos no cumplían con las especificaciones o el precio”, dijo la secretaria. Añadió que la Administración anunciará en breve cómo recomprará parte del petróleo de reposición inicial para la reserva.
Se espera que la votación de la ley H.R. 21 tenga lugar esta misma semana. Sin embargo, aún está por ver si el proyecto de ley será aprobado por el Congreso, dado que el Senado está controlado por los demócratas.
Katabella Roberts, Nathan Worcester y Reuters contribuyeron a este artículo.
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