Número récord de inmigrantes ilegales esperando en México el «día mágico»: Experto en inmigración

Ante la estimación de los funcionarios de inteligencia de EE. UU. de un aumento masivo en el número de inmigrantes ilegales que inundan los puntos de entrada ilegal en la frontera sur, el investigador principal de seguridad nacional del Centro de Estudios de Inmigración (CIS, en inglés) Todd Bensman dijo que muchos de los que han sido retenidos temporalmente en México inundarán la frontera después de que el Título 42 termine.

«Ahora tienes a la gente del Título 42 entrando, que solo están diciendo, vengo a esperar el día mágico», dijo Bensman al programa «Facts Matter» de EpochTV durante una entrevista reciente.El Título 42 es un estatuto sanitario federal que permite al gobierno imponer medidas de control sanitario para limitar la entrada de personas que solicitan asilo en el país durante una emergencia sanitaria. Está previsto que finalice el 23 de mayo.

Durante la presidencia de Trump, «todos [los que] son atrapados cruzando la frontera regresan inmediatamente a México. Eso hizo que las cifras bajaran a una especie de niveles históricos», dijo Bensman.

Añadió que, aunque Biden se vio obligado a mantener el Título 42, talló «enormes exenciones en él para los grupos familiares y los menores no acompañados, que … crearon la crisis de migración masiva que tenemos hoy».

Con las exenciones de Biden, un número récord de inmigrantes ilegales está entrando en Estados Unidos, pero los funcionarios de inteligencia están prediciendo que después de que se levante el Título 42, entre 12,000 y 18,000 inmigrantes ilegales inundarán la frontera sur cada día.

«Eso está más allá de las estimaciones, [que] provienen de la comunidad de inteligencia estadounidense… esto es lo que esperan. Pero dicen que podrían ser hasta 12,000 al día. Pero para darles un poco de contexto, ahora mismo estamos en 6 y 7000 al día, lo que es demasiado grande para manejar con el personal y las instalaciones actuales».

El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, ordenó en marzo a la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) que apoyara a los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) durante los tres meses siguientes para ayudar a procesar más rápidamente a las familias y los niños que entran ilegalmente.

«Están trayendo flotas de aviones para poder trasladar rápidamente a la gente de las orillas a otros lugares, otras ciudades, otros pueblos. Están haciendo ampliaciones de las instalaciones existentes, como una especie de instalaciones de carpas blandas. Probablemente van a traer al ejército para ayudar con el control de la multitud. Y están trabajando estrechamente con los mexicanos para ver si éstos pueden controlar las cosas por su parte», dijo Bensman.

Explicó cómo funciona actualmente el sistema de asilo impulsado por los defensores de los migrantes en el país: «todo lo que tienes que hacer es cruzar, decir ‘declaro asilo’, y tienes esta rampa de salida hacia el interior de Estados Unidos, prácticamente para siempre. … [El sector de la defensa de los inmigrantes] quiere que esto esté disponible para todos».

El CIS calcula que el gobierno de Biden ha ayudado a 1.3 millones de inmigrantes ilegales a reasentarse en Estados Unidos durante su mandato con un sistema de honor o avisos para que comparezcan más tarde para que se adjudiquen sus casos de asilo.

Bensman dijo que Biden prácticamente ha abolido el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y casi no se realizan deportaciones, lo que no cambiará hasta que entre otra administración. Añadiendo que incluso si alguien es un terrorista o un asesino, todavía tomaría un largo proceso para que esa persona sea deportada.

«El número de deportaciones está en el punto más bajo que se recuerda, y quizás en la historia. El número de deportaciones de extranjeros criminales con antecedentes está en su punto más bajo».

Muchos inmigrantes están llegando a México y están esperando el «día mágico», cuando el Título 42 termina para hacer su camino a través de la frontera hacia el lado de Estados Unidos.

«El estado de Texas tiene esta autoridad que nunca han usado, que no creo que nadie haya pensado en usar antes, que es poner sus oficiales de inspección de vehículos en los puentes —más de ellos— e ‘inspeccionar’ cada uno de los camiones que salen de estos puentes con carga».

Bensman dijo que esta acción obligó a los gobernadores mexicanos a realizar un control de la inmigración. Cuatro gobernadores firmaron acuerdos de inmigración con Texas para retener a los inmigrantes mientras los camiones puedan pasar por los puntos de entrada de manera eficiente. El gobernador Greg Abbott ha dicho que si los acuerdos migratorios no se cumplen volverá a poner las patrullas de «inspección».

«Estos causan una gran cantidad de dolor en ambos lados en realidad, una gran cantidad de tejanos están sintiendo ese dolor, las empresas, una gran cantidad de electores de Abbott. Es políticamente arriesgado, pero muestra la desesperación de Texas, sobre el Título 42 y lo que está a punto de suceder, para hacer lo que sea, sacar lo que sea que lo detenga».

Bensman dijo que este tipo de diplomacia en torno a la inmigración es realmente el trabajo del gobierno federal, pero al ver que no pasaba nada Abbott pasó por alto a la Administración de Biden.

«Esto es algo que el gobierno de Biden debería haber hecho, Trump hizo este tipo de cosas. Amenazó con el dolor económico si los mexicanos no seguían su plan. Y funcionó cuando lo hizo».

Bensman dijo que si lo pusieran a cargo de la crisis en la frontera sur, revisaría la ley de asilo: «Simplemente, retírala de la mesa e inventa otra cosa. Se necesitará un apoyo bipartidista. Y mientras tanto, tenemos que aprovechar a Costa Rica, Colombia y Panamá para que cierren sus fronteras».

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