El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo el martes que declaró una “emergencia de desastre por violencia armada” en medio de una serie de homicidios y tiroteos en la ciudad de Nueva York y otras áreas metropolitanas del estado.
Al describir los tiroteos como una «crisis de salud pública», Cuomo dijo que la «declaración nos permitirá darle a esta crisis toda la atención [y] los recursos que se merece».
El estado se enfocará en áreas donde ocurren tiroteos y homicidios frecuentes–a las que los funcionarios demócratas a menudo se refieren como «violencia armada»–utilizando el mismo modelo utilizado para tratar el COVID-19, dijo Cuomo.
Eso implica tratar los tiroteos como una emergencia de salud pública, apuntar a los puntos críticos del crimen, frenar la venta de armas de fuego ilegales, reconstruir la confianza entre las comunidades y las fuerzas del orden locales, y otras iniciativas. El estado requerirá que los grandes departamentos de policía, como el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD), presenten “datos a nivel de incidente” sobre tiroteos para poder rastrear los puntos críticos.
«Si puedes vencer a COVID, puedes vencer a la violencia armada», comentó el gobernador demócrata. «Estamos en una nueva epidemia, y es la violencia armada, y también es una cuestión de vida o muerte».
La iniciativa también creará una nueva agencia estatal, el Consejo del Gobernador para la Reducción de la Violencia Armada, que facilitará la coordinación entre los gobiernos estatales y locales en respuesta a tiroteos y crímenes.
La orden de Cuomo también crea un programa de trabajos de verano para jóvenes en riesgo en puntos de acceso designados. En la ciudad de Nueva York, alrededor del 0.7 por ciento de los jóvenes en riesgo han llevado a cabo el 36 por ciento de los tiroteos, agregó el gobernador.
“Tenemos que crear empleos para mantener a estos niños fuera de las calles. El estado de Nueva York pagará el 100 por ciento del salario. Solo queremos que reciban capacitación y un lugar adonde ir”, dijo el martes. «Para que puedan ver un futuro».
El estado de Nueva York ya tiene algunas de las leyes de control de armas más estrictas de Estados Unidos. Si bien no se requiere un permiso para la compra de una escopeta o un rifle, los residentes necesitan uno para comprar y portar una pistola. También se prohibe en el estado la compra o posesión de cargadores que contengan más de 10 rondas.
Se espera que a fines de año, la Corte Suprema de EE. UU. escuche los argumentos sobre una importante demanda respaldada por la Asociación Nacional del Rifle (NRA) que desafía las leyes del estado de Nueva York sobre restringir a que las personas porten armas ocultas en público.
Mientras tanto, la ciudad de Nueva York tiene una de las leyes de armas más estrictas del país. Para poseer una escopeta o un rifle, un residente de la ciudad de Nueva York necesita un permiso emitido por la ciudad.
Pero a pesar de las estrictas leyes de armas, al menos 26 personas recibieron disparos en toda la ciudad de Nueva York durante el fin de semana del 4 de julio, dijo el Departamento de Policía de Nueva York en informes publicados por los medios locales.
Mientras tanto, cinco personas recibieron disparos en tres tiroteos separados en Syracuse, una ciudad ubicada en el norte del estado de Nueva York, en el mismo período de tiempo, dijeron las autoridades.
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