Estados Unidos está «profundamente preocupado» por el arresto del destacado fundador de medios de comunicación de Hong Kong, Jimmy Lai, dijo el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Richard O’Brien, en un comunicado del 10 de agosto.
La policía de Hong Kong arrestó el lunes a Lai, un estridente crítico del régimen comunista chino, junto a dos de sus hijos —Lai Gin-yan y Chow Tat-kuen— y varios ejecutivos de su empresa de medios Next Digital.
Lai, de 71 años, fue arrestado bajo la nueva Ley de Seguridad Nacional del régimen chino por colusión con «fuerzas extranjeras o elementos externos». Más tarde ese día, más de 200 policías asaltaron la sala de redacción del periódico de Lai, el Apple Daily, el mayor medio prodemocracia de la ciudad.
O’Brien dijo el lunes que Lai y sus colegas habían defendido «los derechos y libertades fundamentales que Beijing garantizó al pueblo de Hong Kong pero que ahora ataca sistemáticamente».
Varios otros medios de comunicación y figuras prodemocracia también fueron arrestados el lunes, incluyendo a la prominente activista Agnes Chow. La policía dijo más tarde que fueron arrestadas 10 personas que no fueron nombradas, pero se sabe que son nueve hombres y una mujer.
Los arrestos fueron, según O’Brien, «un claro esfuerzo para intimidar a las figuras prodemocráticas y de la oposición política y suprimir los medios de comunicación libres e independientes de Hong Kong que desempeñaron un papel clave en el carácter y el éxito de la ciudad».
Las autoridades de Hong Kong tomaron medidas enérgicas contra los elementos prodemocracia de la ciudad desde que la Ley de Seguridad Nacional entró en vigor el mes pasado. La ley castiga, con hasta cadena perpetua, cualquier acción que Beijing considere «subversión, secesión, terrorismo y colusión con fuerzas extranjeras» .
Antes de la aplicación de la ley, Beijing y el gobierno de Hong Kong dijeron que la nueva ley solo se usaría contra una pequeña minoría de criminales, y no afectaría a las libertades de la ciudad.
Desde julio, los lemas de protesta popular han sido prohibidos y los candidatos prodemocracia fueron descalificados para presentarse a las elecciones legislativas. Más tarde, el gobierno dijo que las elecciones se pospondrían un año, citando la pandemia como la razón del retraso. Antes del lunes, 15 personas, incluyendo adolescentes, fueron arrestadas bajo la nueva ley.
La Ley de Seguridad Nacional de Beijing niega al pueblo de Hong Kong sus derechos y libertades fundamentales y aumenta el control del régimen chino sobre los asuntos internos de Hong Kong, dijo O’Brien en su declaración.
«Estas detenciones denunciadas, tras la reciente acción del gobierno de Hong Kong para descalificar injustamente a los candidatos y aplazar las elecciones al Consejo Legislativo, son las últimas violaciones de los compromisos de Beijing con el pueblo de Hong Kong y el mundo», dijo.
El Partido Comunista Chino (PCCh) aplaudió el arresto de Lai.
Un portavoz de la Oficina de Asuntos de Hong Kong y Macao de China, dijo al medio estatal chino Xinhua que Lai era representante de personas «contra-China, contra-Hong Kong» y que planeaba e instigaba protestas «ilegales», financiaba fuerzas proindependencia y utilizaba su grupo de medios para difundir rumores. El régimen chino impulsó la narración que el movimiento de protesta masiva se encendió el año pasado solo porque fue fomentado por países extranjeros para incitar al caos.
I’m deeply troubled by reports of the arrest of @JimmyLaiApple under Hong Kong’s draconian National Security Law. Further proof that the CCP has eviscerated Hong Kong’s freedoms and eroded the rights of its people.
— Secretary Pompeo (@SecPompeo) August 10, 2020
El secretario de Estado, Mike Pompeo, se hizo eco de los comentarios de O’Brien diciendo que estaba «profundamente preocupado» por los informes del arresto de Lai «bajo la frenética Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong».
«Es una prueba más de que el PCCh evisceró las libertades de Hong Kong y erosionado los derechos de su pueblo», escribió Pompeo en un posteo de Twitter el lunes.
La semana pasada, Estados Unidos impuso sanciones a la líder de Hong Kong, Carrie Lam, y a otros 10 funcionarios chinos y de Hong Kong por su papel en la subversión de las libertades de la ciudad a través de la aplicación de la nueva ley. Beijing tomó represalias el lunes sancionando a 11 ciudadanos estadounidenses, incluyendo legisladores federales y jefes de organizaciones sin fines de lucro y grupos de derechos con sede en Estados Unidos.
La Comisión Ejecutiva del Congreso sobre China pidió a los aliados y socios de Estados Unidos que respondan a los arrestos con sus «propias sanciones y condenas», calificando la redada y los arrestos como «graves violaciones de los derechos humanos» e instó a las Naciones Unidas a tomar medidas.
En tanto, el medio Apple Daily siguió adelante con la publicación del periódico del martes con la promesa a Hong Kong de «seguir luchando» en un titular de primera plana sobre una imagen de Lai esposado.
Más de 500,000 copias del tabloide prodemocracia se imprimieron el martes, por encima de los 100,000 habituales, comunicó el periódico en su sitio web.
«Nos unimos a Jimmy Lai y a sus hijos y colegas, y pedimos a Beijing que revoque la ley de seguridad nacional y restablezca el estado de derecho en Hong Kong inmediatamente», dijo O’Brien.
Cathy He y Reuters contribuyeron a este informe.
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