Marcar la diferencia, con un animal a la vez, es un tema al que Alison Sawyer Current vuelve una y otra vez en su conmovedora, aleccionadora y, en última instancia, edificante novela autobiográfica, «La dama de los perros de México». Basada en las experiencias reales de Current, esta obra de 2018 merece un primer o segundo vistazo, ya que muestra lo mucho que puede cambiar una persona.
Para Rose, todo comienza cuando ella y su esposo Brad se embarcan en una luna de miel/vacaciones de trabajo de un mes en México, en la isla Mujeres. Un día, mientras Brad está fuera, Kat, una compañera estadounidense del condominio donde se aloja la pareja, le pide a Rose que la ayude con una gatita perdida y embarazada. Poco después, Kat vuelve a solicitar la ayuda de Rose, esta vez para rescatar a un grupo de cachorros. No pasa mucho tiempo antes de que Rose se sienta consternada por el gran número de perros salvajes que vagan por la isla. A menudo abandonados por sus dueños y reproduciéndose indiscriminadamente, estos animales se ven obligados a buscar cualquier alimento que puedan encontrar.
Avergonzada al principio por ser una de las muchas personas que se limitan en hacer la vista gorda ante la situación de los perros, y sacando fuerzas de una antigua leyenda maya, que se convierte en su talismán en momentos de estrés, Rose pronto se involucra de lleno en los esfuerzos de rescate de animales.
Cuando Rose y Brad se mudan definitivamente a la isla, sus intentos de rescate aumentan considerablemente. Recibe una ayuda inestimable de un chico local llamado Rudi, así como de otros estadounidenses que viven en Isla Mujeres. Todas estas personas comparten la pasión de Rose por los perros, aunque no siempre su determinación casi absoluta.
Sin embargo, Rose pronto se da cuenta de que salvar a los perros es mucho más que proporcionarles atención médica y encontrarles un hogar decente. También tiene que luchar contra una mentalidad cultural muy arraigada entre los isleños. Muchos de ellos —especialmente los propietarios de restaurantes y hoteles— consideran que los perros no son más que una molestia que hay que erradicar.
Esta actitud hace que Rose estalle más de una vez de enojo y frustración contra quienes la consideran una excéntrica extranjera o una entrometida. En un momento dado, los lugareños enfadados le dicen a Rose que «salga de nuestra isla». Esta actitud también hace que cualquier lector amante de los animales quiera hacer entrar en razón a quienes no entienden cómo sus acciones (o inacciones) empeoran las cosas.
El libro también ilustra el daño emocional que supone intentar abarcar más de lo que se puede manejar. Rose acaba viéndose abrumada por sus responsabilidades de rescate y tiene que ser convencida casi a la fuerza de elaborar un plan cohesivo para seguir adelante. Tiene que aceptar la importancia de delegar tareas en aquellos a los que quizá no les importe tanto como a ella (como un veterinario que se une a Rose y sus amigos en una clínica de esterilización), pero que son igual de importantes a su manera.
«La Dama de los Perros de México» no es en absoluto una historia para sentirse bien. El destino de algunos animales no termina bien, ya sea por negligencia, crueldad o simplemente porque Rose o su equipo no pueden llegar a todos los que quieren ayudar. Uno de estos casos se produce tras un huracán que devasta la isla y sus alrededores. Tanto Rose como el lector aprenden la amarga realidad: no se puede salvar a todos los animales del mundo, ni siquiera a todos los de Isla Mujeres. Todo lo que se puede hacer es ayudar al mayor número posible y eso tiene que ser suficiente.
Afortunadamente, los éxitos de Rose (y se supone que los de Current) superan con creces sus fracasos, como muestran las numerosas fotos del «antes» y el «después» de algunos de los perros descritos.
Aunque la idea central de esta novela autopublicada por Current es bastante eficaz, habría sido bueno ver que se diera más información sobre los que ayudan a Rose en su trabajo. Por su apoyo silencioso y constante, Brad sale bien parado, sobre todo por algunos de los ejemplos que se dan, como el de alimentar en secreto a los gatitos que se acercan al restaurante donde trabaja. Pero otros muchos nunca salen a relucir, a pesar de que sabemos que todos sienten un profundo amor por los animales.
Aun así, no se puede negar la fuerza emocional del relato al detallar los esfuerzos de alguien que solo quería marcar la diferencia y que acabó haciendo mucho más de lo que pretendía o creía posible en un principio.
«La dama de los perros de México»
Alison Sawyer Current
2018
398 páginas, papel
Para saber más sobre los esfuerzos de Alison Sawyer Current, visite IslaAnimals.org
Judd Hollander es crítico de stagebuzz.com y miembro del Drama Desk y del Outer Critics Circle.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí.
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
