Las nóminas de las empresas se han ampliado en los últimos meses, pero el número de estadounidenses empleados ha disminuido. Los resultados paradójicos provienen de los resultados de dos encuestas gubernamentales diferentes y podrían indicar que el crecimiento del empleo en EE. UU. ha sido un poco más débil de lo que parecía.
Las empresas no agrícolas incorporaron más de 1.1 millones de empleados en abril, mayo y junio, según la encuesta de empresas de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por sus siglas en inglés). En el mismo período, el nivel total de empleos en el país se redujo en casi 350,000, según la encuesta de hogares de la Oficina del Censo.
La discrepancia de cifras podría indicar que el mercado laboral no ha estado tan activo como indica la encuesta de empresas. Eso podría tener consecuencias significativas porque el estado del mercado laboral sirve a empresas, comerciantes, inversores y legisladores para calibrar sus decisiones. La Reserva Federal utiliza las estadísticas de empleo como un elemento crucial para ampliar o restringir la oferta monetaria, lo que ha tendido a causar que los mercados bursátiles suban o bajen. En los últimos meses, la Fed ha estado endureciendo gradualmente la política monetaria, actuando bajo el supuesto de que hay demasiadas ofertas de trabajo.
La razón por la que las dos encuestas de empleo no se corresponden perfectamente es porque miden cosas algo diferentes.
La encuesta de hogares consulta a las personas si están trabajando actualmente. BLS usa el resultado para obtener la tasa de desempleo mensual. El problema es que la encuesta solo mide el empleo con un margen de error de alrededor de medio millón de trabajadores.
La encuesta de empresas consulta a las empresas sobre cuántas personas emplean. A diferencia de la encuesta de hogares, excluye a los trabajadores agrícolas, los trabajadores por cuenta propia no incorporados, a los trabajadores del hogar y a los trabajadores domésticos no remunerados. Sus resultados tienen un margen de error de unos 120,000 empleados.
El margen de error en sí mismo puede explicar por qué los números no siempre suben y bajan al mismo tiempo, pero en este caso, la discrepancia es de casi 1.5 millones de trabajadores. Pocas veces ha alcanzado esta magnitud en el último medio siglo.
Otra causa podría residir en los grupos excluidos de la encuesta de establecimientos. Si el número de estos trabajadores aumenta o disminuye, solo afecta a los resultados de la encuesta de la Oficina del Censo, pero no a la encuesta del BLS.
Por lo general—con el paso del tiempo—los resultados de las dos encuestas vuelven a coincidir.
Algunos economistas han señalado que la situación actual del empleo no se debe tanto a un exceso de ofertas de trabajo como de personas que abandonan el mercado laboral.
En mayo, hubo un estimado de 11.2 millones de ofertas de trabajo y menos de 6 millones de personas clasificadas como desempleadas. Pero la cifra de desempleo excluye a las personas que no estaban buscando trabajo en las cuatro semanas anteriores.
Si la economía anterior a la pandemia de COVID-19 solo lograra mantenerse al día con el crecimiento de la población, agregando aproximadamente 74,000 empleos por mes en promedio, Estados Unidos debería haber tenido alrededor de 2.8 millones de personas más empleadas en mayo.
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