MINNEAPOLIS— Una pareja de Connecticut fue acusada en Minnesota de formar parte de una banda de ladrones sospechosa de haber robado en todo el país alrededor de un millón de dólares en artículos de la tienda de ropa deportiva de lujo Lululemon.
Jadion Anthony Richards, de 44 años, y Akwele Nickeisha Lawes-Richards, de 45, ambos de Danbury, Connecticut, fueron acusados este mes de un delito grave de robo organizado en comercios. Los dos quedaron en libertad la semana pasada después de pagar fianzas de 100,000 dólares para él y 30,000 dólares para ella, según los registros judiciales. Paul el 16 de diciembre.
Según las denuncias penales, un investigador de Lululemon estuvo siguiendo a la pareja incluso antes de que la policía se enfrentara a ellos por primera vez el 14 de noviembre en una tienda de los suburbios de Roseville. El investigador dijo a la policía que la pareja era responsable de cientos de miles de dólares en pérdidas en todo el país, según las denuncias. Robaban artículos y hacían devoluciones fraudulentas.
La policía encontró unas maletas con ropa de Lululemon con un valor de más de 50,000 dólares cuando registró la habitación de hotel de la pareja en Bloomington, según la denuncia.
Según el investigador, también eran sospechosos de robos en tiendas Lululemon de Colorado, Utah, Nueva York y Connecticut, según la denuncia. En Minnesota, también fueron acusados de robos en tiendas de Minneapolis y los suburbios de Woodbury, Edina y Minnetonka.
Según el investigador, ambos formaban parte de un grupo que solía viajar a una ciudad y asaltar las tiendas Lululemon de la misma durante dos días, regresar a la costa este para cambiar los artículos sin los recibos por otros nuevos, llevarse los artículos nuevos con los recibos de devolución para que se los reembolsaran a la tarjeta de crédito y, a continuación, volver a salir para cometer más robos, según la denuncia.
En al menos alguno de los robos, Richards entraba primero en la tienda y compraba uno o dos artículos baratos. Después volvía a la sala de ventas donde, con ayuda de Lawes-Richards quitaba un sensor de seguridad de otro artículo y lo ponía en uno de los que acababa de comprar. A continuación, Lawes-Richards y otra mujer ocultarían unos leggings bajo su ropa.
A continuación, se marchaban juntas. Cuando los sensores de seguridad de la puerta se activaban, él ofrecía al personal la bolsa con los artículos que había comprado, mientras las mujeres seguían saliendo, engañando al personal para que pensara que era su sensor el que había hecho saltar la alarma, según la denuncia.
El abogado de Richards se negó a hacer comentarios. El abogado de oficio de Lawes-Richards no devolvió inmediatamente una llamada en busca de comentarios.
«Este resultado continúa subrayando nuestra continua colaboración con las autoridades policiales y nuestras inversiones en tecnología avanzada, formación de equipos y capacidades de investigación para combatir la delincuencia minorista y responsabilizar a los delincuentes», dijo Tristen Shields, vicepresidente de protección de activos de Lululemon, en un comunicado. «Seguimos dedicados a continuar estos esfuerzos para abordar y prevenir este problema en toda la industria».
Los dos están siendo procesados en virtud de una ley estatal promulgada el año pasado que busca tomar medidas enérgicas contra el robo organizado al por menor. Uno de sus principales autores, el senador Ron Latz, de St. Louis Park, declaró que 34 estados ya contaban con leyes contra la delincuencia organizada en el comercio minorista.
«Me alegra ver que está funcionando como se pretendía, para acabar con las operaciones delictivas», declaró Latz en un comunicado. «Este tipo de robos perjudica a los minoristas de múltiples maneras, como la pérdida de actividad económica y de puestos de trabajo y las amenazas a la seguridad de los trabajadores cuando no se aborda la delincuencia. También perjudica a los consumidores por el aumento de los precios y los productos comprometidos que se revenden en línea».
Dos mujeres de Minnesota también fueron acusadas en agosto en virtud de la nueva ley. Fueron acusadas de asaltar una tienda Lululemon en Minneapolis.
Por Steve Karnowski
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