La vacuna contra COVID-19 de Pfizer y BioNTech infringe una patente de su rival Moderna, según dictaminó la Corte Superior de Londres (Inglaterra) en una sentencia hecha pública el 2 de julio.
Las vacunas contra COVID-19 de Pfizer-BioNTech y Moderna utilizan la tecnología del ácido ribonucleico mensajero (ARNm).
Moderna patentó procesos de ARNm que sustituyen el nucleósido uridina por N1-metilpseudouridina, un ARN modificado. La patente se titula «ácidos ribonucleicos que contienen n1-metil-pseudouracilos y usos de los mismos».
La patente «es válida», declaró la corte, añadiendo que se infringió «dado que Pfizer/BioNTech admitió que se infringiría si fuera válida».
La corte rechazó los argumentos de Pfizer y BioNTech, incluido el de que la patente de Moderna no era novedosa. Dijo que partes de la patente eran novedosas, a partir de un método desarrollado por la Universidad de Pensilvania.
La corte de Distrito de La Haya de 2023 consideró que la patente era inválida por falta de novedad respecto al método, pero la corte londinense dijo que sopesó otras pruebas y encontró persuasivos algunos factores que La Haya no consideró.
En 2020, Moderna declaró que no haría valer las patentes relacionadas con COVID-19 frente a fabricantes rivales. Sin embargo, en 2022, revocó la declaración, lo que significa que Pfizer y BioNTech entraron en violación de la patente, dijo el alto tribunal en una decisión relacionada.
El juez Jonathan Richards escribió en la sentencia que «incluso si la promesa era una renuncia expresa de derechos, fue válidamente revocada por la declaración de marzo de 2022, ya que Pfizer/BioNTech no había cambiado materialmente para esa fecha su posición en relación con la promesa».
La corte también dictaminó que una segunda patente de la que era titular Moderna era inválida.
Posibles apelaciones
Las tres empresas manifestaron su desacuerdo con las partes de la decisión de la corte en las que perdieron, y se espera que todas las partes soliciten permiso para apelar.
Pfizer y BioNTech afirmaron en un comunicado: Estos procedimientos no afectan al perfil de seguridad y eficacia de nuestra vacuna, establecido por los organismos reguladores de todo el mundo».
«Independientemente del resultado de este asunto legal, seguiremos fabricando y suministrando la vacuna COVID-19 de Pfizer-BioNTech conforme a nuestros acuerdos y calendarios de suministro establecidos».
Un portavoz de Moderna dijo que la empresa estaba satisfecha de que la corte «reconociera la innovación de los científicos de Moderna al confirmar la validez y la infracción» de una de sus patentes.
Pfizer, BioNTech y Moderna también están implicados en procedimientos paralelos en Alemania, Países Bajos, Bélgica y Estados Unidos, muchos de los cuales han quedado en suspenso, así como en la Oficina Europea de Patentes.
La sentencia de Londres llega en un momento de tensión financiera para Moderna, cuyas acciones se han desplomado más de un 70% desde el punto álgido de la pandemia, al caer la demanda y las ventas de Spikevax. Las acciones de Pfizer, por su parte, han caído un 29% desde mediados de 2021.
Con información de Reuters.
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