Tom Homan, zar fronterizo elegido por Trump reiteró el compromiso de la nueva administración con la deportación de inmigrantes ilegales asegurando que tanto él como el presidente electo se enfocarán desde el primer día en la deportación de inmigrantes que representen “amenazas de seguridad pública y nacional”, sin embargo, enfatizó la importancia de la colaboración de ciudades santuario para lograrlo.
Durante una entrevista con CBS News en el programa Face the Nation, Homan dio un repaso de las cifras de deportación tanto en la administración Biden como en la primera administración Trump, subrayando que las altas tasas de deportación de la administración actual se corresponden con la entrada sin precedentes de inmigrantes ilegales al país, mientras que en la administración Trump se registró un ingreso bajo de inmigrantes ilegales, por lo que las deportaciones de igual manera fueron bajas durante su mandato.
Además, Homan destacó que Estados Unidos está atravesando por un “enorme problema de seguridad nacional”, señalando a la frontera sur del país como “la mayor vulnerabilidad de seguridad nacional que hemos visto en esta nación».
Sobre cómo trabajarán para la detención y deportación de inmigrantes ilegales, Homan detalló que desde el día uno se enfocarán en los inmigrantes que representan una amenaza para la seguridad publica, asegurando que el ICE sabe dónde se encuentran algunos de esos criminales. Sin embargo la limitación de la agencia, debido a las prioridades del secretario Mayorca, los ha limitado para poder arrestarlos, y enfatizó que eso también cambiará desde el primer día de la nueva administración.
Homan detalló que el trabajo con cárceles y prisiones sería de gran ayuda, no obstante dijo que “las ciudades santuario no nos permiten ingresar a esas instalaciones. Es mucho más fácil arrestar a una amenaza para la seguridad pública dentro de la seguridad de una cárcel pública que en la calle”, agregando que trabajar en esas prisiones daría mayor seguridad a los oficiales de policía, a la comunidad e incluso a los inmigrantes.
“Sin embargo, las ciudades santuario que continúan liberando amenazas para la seguridad pública en la comunidad inmigrante están poniendo a esa comunidad en mayor riesgo de criminalidad”.
El zar de la frontera detalló que cuando se sale a las comunidades para intentar atrapar a los inmigrantes criminales, implica un escenario más complejo e inseguro.
“Ese inmigrante criminal, probablemente estará acompañado por otros, a quienes también tendremos que arrestar”.
“Déjennos arrestar al delincuente en la celda donde ustedes mismos decidieron ponerlo, porque obviamente es una amenaza para la seguridad pública”, agregó.
Homan subrayó que ICE está preparado y cuenta con la información suficiente sobre los arrestos que realizará, pero cuando eso suceda es probable que la persona se encuentre en compañía de otras personas que también puedan estar ilegalmente en el país, pero dijo que independientemente de eso, cada caso será tratado por separado.
“Quiero dejar claro que el enfoque está en las amenazas a la seguridad pública”.
El zar dijo que al tener acceso y trabajar en conjunto con las cárceles en las ciudades santuario, habrá más agentes en las cárceles y menos en los vecindarios.
“Por eso estoy pidiendo a las ciudades santuario que nos dejen entrar a las cárceles para arrestar a los delincuentes. Así no se nos obliga a operar en la comunidad. Si vas a una comunidad inmigrante y les preguntas: «¿Prefieren que ICE opere en las cárceles locales o en la comunidad?» ¿Qué crees que van a responder? Ellos tampoco quieren a criminales en sus vecindarios”.
“Déjennos trabajar en las cárceles. Déjenos colaborar con las fuerzas del orden. Las ciudades santuario no son seguras para la comunidad inmigrante ni para nuestros oficiales”, declaró el agente..
Homan compartió que el Chris Wray, director del FBI, está de acuerdo con él sobre la presencia de inmigrantes ilegales en Estados Unidos que representan una amenaza para la seguridad nacional, detallando que se “ha arrestado un número récord de personas incluidas en listas de vigilancia de terroristas, con un aumento del 3500 % en estas detenciones en la frontera”.
“Tenemos más de 2 millones de conocidos como ‘gotaways’, personas que cruzaron la frontera, no fueron arrestadas, no fueron investigadas ni registradas”.
El exagente de la policía y ahora Zar fronterizo dijo que “no permitiremos que se detenga la remoción de amenazas a la seguridad pública en este país. Tenemos que poner la seguridad del pueblo estadounidense primero”.
Tan solo en 2024 más de 17,000 inmigrantes con antecedentes penales fueron detenidos por la patrulla fronteriza, mientras que cerca de 2000 inmigrantes con antecedentes penales han sido detenidos en lo que va del año, según datos de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP).
Siga a Estela Hernández en X: @HGLauraEstela
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