Los estadounidenses están pagando más por los pavos de Acción de Gracias este año, ya que una nueva encuesta de NielsenIQ indica que los precios del pavo han subido casi un 16 por ciento en comparación con hace un año.
Según los datos de NielsenIQ, el precio de los pavos enteros sin cocinar en las cuatro semanas anteriores al 6 de noviembre aumentó un 15.6 por ciento con respecto al mismo periodo de 2020.
Los datos de Nielsen coinciden en gran medida con las cifras recientes publicadas por la American Farm Bureau Federation (AFBF), que abarcaron el período del 26 de octubre al 8 de noviembre y estimaron que la cena de Acción de Gracias de este año costará alrededor de un 14 por ciento más, impulsada principalmente por los precios más altos del pavo.
La AFBF dijo en un comunicado que el precio medio durante el periodo estudiado fue de 23.99 dólares por un ave de 16 libras, lo que supone aproximadamente 1.50 dólares por libra, un 24 por ciento más que el año pasado.
«Varios factores contribuyeron al aumento del costo promedio de la cena de Acción de Gracias de este año», dijo la economista principal de la AFBF, Veronica Nigh, en un comunicado. «Entre ellos se encuentran las dramáticas interrupciones de la economía estadounidense y de las cadenas de suministro durante los últimos 20 meses; la presión inflacionista en toda la economía; la dificultad para predecir la demanda durante la pandemia de COVID-19 y la elevada demanda mundial de alimentos, en particular de carne».
Uno de los factores que ha hecho subir los precios del pavo es que se han producido menos pavos, ya que algunas empresas alimentarias y agricultores prevén que muchos consumidores reducirán el número de días de Acción de Gracias debido a la pandemia, informa Reuters.
El Rancho de la Familia Diestel, que produce pavos en Sonora, California, crió aves de aproximadamente el mismo tamaño para 2021 que para 2020, dijo a Reuters la granjera Heidi Diestel, evitando hacer conjeturas sobre cómo la pandemia cambiaría la demanda. El rancho añadió algunas aves pequeñas adicionales que pesan entre 2.5 y 3.5 kilos, dijo, porque pueden ser consumidas durante todo el año si no se venden para las fiestas.
«Tratar de predecir este mundo loco nos pareció que debíamos dejar eso a otros», dijo Diestel. «Realmente no queríamos ir allí».
El director general de Butterball, Jay Jandrain, dijo en una entrevista reciente a Fox News que es probable que las familias estadounidenses vean los pavos de Acción de Gracias más caros este año y que los más pequeños sean más difíciles de encontrar, ya que la inflación sigue siendo obstinadamente alta y la crisis de la cadena de suministro continúa.
Jandrain dijo al medio de comunicación el 2 de noviembre que, aunque no espera una escasez general de pavos, «sí vemos que habrá menos pavos pequeños este año», y aconsejó a los compradores que «vayan a las tiendas y los compren lo antes posible».
Al mismo tiempo, Jandrain dijo que los minoristas han estado pidiendo más pavos ante el aumento de la demanda y es «razonable esperar» precios más altos.
«Hemos visto aumentar los precios de los alimentos en general. Es algo que todos hemos experimentado recientemente. Aunque nosotros no fijamos los precios para nuestros minoristas, es razonable esperar que haya algún aumento de los costos este año», dijo Jandrain.
Los inventarios de pavos congelados, aves hembras que normalmente son de menor tamaño, y de pechugas de pavo cayeron a mínimos históricos este año y se redujeron un 19 por ciento y un 51 por ciento con respecto al año pasado a finales de septiembre, respectivamente, según el Departamento de Agricultura de EE.UU.
Con información de Reuters.
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