La organización de periodismo de investigación sin fines de lucro, Project Veritas, dice que la razón de Twitter para suspender su cuenta es falsa.
Twitter suspendió las cuentas de Veritas y de su fundador James O’Keefe alrededor del 11 de febrero, después de que el grupo de tendencia derecha publicara un vídeo de uno de sus reporteros pidiendo un comentario al vicepresidente de integridad de Facebook, Guy Rosen, un comentario frente a su residencia.
«La cuenta, @Project_Veritas, fue suspendida permanentemente por repetidas violaciones de la política de información privada de Twitter», dijo un portavoz de Twitter a The Epoch Times por correo electrónico. «La cuenta, @JamesOKeefeIII, fue bloqueada temporalmente por violar nuestra política de información privada. El propietario de la cuenta debe eliminar el tuit infractor para recuperar el acceso a su cuenta».
El portavoz no quiso dar más información.
El vídeo de Veritas, que todavía está disponible en YouTube, muestra a Rosen siendo interrogado por O’Keefe sobre lo que dijo Rosen durante una reunión interna de Facebook el 7 de enero. Veritas obtuvo una grabación de la reunión que muestra a Rosen diciendo lo siguiente:
«Tenemos un sistema que es capaz de congelar los comentarios en los mensajes en los casos en que nuestros sistemas están detectando que puede haber un comentario que tiene el discurso de odio o violencia (…) estas son todas las cosas que hemos construido en los últimos tres o cuatro años como parte de nuestras inversiones en el espacio de la integridad de nuestros esfuerzos para proteger las elecciones».
Cuando O’Keefe le pregunta qué quiere decir con «congelar los comentarios que contienen discurso de odio», Rosen se da la vuelta, no responde y sigue caminando hacia su casa.
«¿Cómo define usted el discurso de odio? ¿Es solo el discurso que usted odia? ¿Congela usted sus propios comentarios?», pregunta O’Keefe al ver a Rosen entrar en su casa.
«Twitter afirmó que el vídeo publicaba información privada, lo cual es falso», dijo O’Keefe en un comunicado enviado por correo electrónico a The Epoch Times.
«Twitter invitó a Project Veritas a apelar y así lo hicimos, esa decisión con Twitter. En un aparente acto de represalia por atrevernos a cuestionar su autoridad, Twitter respondió a nuestra apelación suspendiendo nuestra cuenta y continuó diciéndonos que Project Veritas podía borrar el tuit y nuestra cuenta se restablecería».
El vídeo muestra brevemente el número de la calle de la casa de Rosen y un poste de luz frente a ella. No muestra el nombre de la calle ni ninguna otra información sobre la dirección de la casa de Rosen. Veritas difuminó los números de las matrículas de los coches que aparecen en el vídeo.
O’Keefe dijo a The Epoch Times en una llamada telefónica que Veritas difuminará el número de la calle en el vídeo, pero cuestionó cómo esto podría ser motivo de suspensión de la cuenta, ya que pedir a las figuras públicas un comentario frente a sus residencias ha sido una práctica periodística estándar.
En el vídeo de respuesta de Veritas a la suspensión, los números de las calles ya aparecen borrosos.
«Esto no es nada nuevo por parte de Twitter: el pasado otoño, el CEO de Twitter, Jack Dorsey, admitió en el Congreso que la decisión de su compañía de bloquear al New York Post era errónea, mientras seguía exigiendo al Post que se arrodillara ante ellos borrando el tuit», dijo O’Keefe en el comunicado. «Aquí vamos de nuevo —Twitter opta por borrar noticias y exige fidelidad cuando su decisión se atreve a ser cuestionada».
O’Keefe se refirió a la supresión por parte de Twitter de una serie de denuncias previas a las elecciones realizadas por el New York Post sobre los negocios de Hunter Biden, hijo del entonces candidato Joe Biden. La empresa de redes sociales no solo bloqueó a los usuarios para que no enlazaran la historia, sino que también bloqueó otras cuentas que intentaban hacerlo. Entre ellas estaba la de la entonces secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, la cuenta oficial de la campaña de Trump y la cuenta de New York Post.
Twitter afirmó que su control de contenidos es políticamente neutral, pero las evidencias indican lo contrario.
O’Keefe se mantuvo desafiante, pidiendo que los informantes de Twitter se presenten con más información.
«No me arrodillaré. Twitter se equivoca. Déjenlos que se arrodillen. Sean valientes. Hagan algo», dijo.
Actualización: El artículo fue actualizado con la respuesta de un portavoz de Twitter.
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