El uso por parte de Kiev de sistemas de misiles tácticos del ejército (ATACMS) suministrados por Estados Unidos no será suficiente para cambiar el rumbo del conflicto a favor de Ucrania, dijo el presidente ruso Vladimir Putin.
El uso del sistema de misiles de largo alcance por parte de Ucrania “no tiene ninguna posibilidad de cambiar radicalmente la situación a lo largo de la línea de contacto”, dijo Putin en una conferencia de prensa el 18 de octubre.
Un día antes, las fuerzas ucranianas utilizaron el avanzado sistema de misiles, por primera vez, para atacar posiciones rusas en las regiones del sur de Kherson y Zaporizhzhia.
Según el Ministerio de Defensa de Ucrania, los ataques lograron destruir aviones, vehículos y equipos militares, dos aeródromos y un depósito de municiones.
«Ahora es posible alcanzar objetivos de manera impecable, con gran precisión, sin darle ninguna posibilidad al enemigo», dijo un portavoz de la Fuerza Aérea de Ucrania en comentarios televisados.
Posteriormente, Moscú confirmó los ataques en las ciudades portuarias de Skadovsk y Berdyansk (ubicadas en Kherson y Zaporizhzhia, respectivamente), ambas situadas a varias docenas de millas detrás de las líneas de defensa rusas.
Según funcionarios rusos, ninguno de los ataques causó daños significativos.
The Epoch Times no pudo verificar de forma independiente las afirmaciones hechas por ninguna de las partes.
Inmediatamente después de los ataques, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski agradeció a Estados Unidos por proporcionar los sistemas de misiles, algunas versiones de los cuales pueden usarse para alcanzar objetivos a distancias de hasta 190 millas.
“Mi agradecimiento especial hoy va a Estados Unidos”, dijo Zelenski en una publicación en las redes sociales el 17 de octubre.
Los sistemas de misiles de largo alcance, añadió, «han demostrado su eficacia».
El mismo día, Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, confirmó que los sistemas de misiles habían sido entregados a Kiev.
«Creemos que esto proporcionará un impulso significativo a las capacidades de Ucrania en el campo de batalla sin poner en riesgo nuestra preparación militar», dijo la Sra. Watson.
Aún no está claro cuántos misiles ATACMS le ha entregado Estados Unidos hasta ahora a Ucrania.
Pero un artículo reciente del New York Times, que citaba a funcionarios occidentales, cifraba la cantidad en aproximadamente 20.
Al igual que otras armas ofensivas suministradas por Estados Unidos, Kiev se ha comprometido a no utilizar el ATACMS para llevar a cabo ataques dentro del territorio ruso.
En septiembre del año pasado, Rusia anexó efectivamente a Kherson y Zaporizhzhia, junto con otras dos regiones del este de Ucrania.
Con el apoyo de sus aliados occidentales, Kiev ha prometido recuperar todo el territorio perdido por la fuerza de las armas.
Entregas encubiertas
El 19 de octubre, Dmytro Kuleba, ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, dijo que Kiev iba a recibir más entregas de misiles estadounidenses (que normalmente llevan municiones de racimo) de forma regular y en mayores cantidades.
“Este es un resultado directo del acuerdo entre el presidente Zelenski y el presidente [Joe] Biden, alcanzado en Washington durante una reunión personal a finales de septiembre”, dijo Kuleba en comentarios televisados.
Durante meses, Kiev había presionado a sus aliados occidentales para obtener sistemas de misiles de mayor alcance, incluidos los misiles ATACMS y Taurus de fabricación alemana.
La Casa Blanca, sin embargo, se había contenido, temiendo que la medida intensificara el conflicto de meses con Rusia.
Durante una visita a Washington el 21 de septiembre, Zelenski supuestamente repitió la solicitud a Biden.
En ese momento, el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, dijo que Biden había considerado la solicitud, pero finalmente había decidido no hacerlo.
Pero poco después, NBC, citando a funcionarios estadounidenses anónimos, informó que, de hecho, Biden ya había dado luz verde a la medida.
El 18 de octubre, CNN informó que Washington había decidido entregar el sistema de misiles de largo alcance (de forma encubierta) para “tomar a los rusos por sorpresa”.
Ese mismo día, Putin admitió que la inclusión del sistema de misiles en el arsenal ucraniano supondría «una amenaza adicional» para Rusia.
Pero continuó afirmando que el ejército ruso “ciertamente es capaz de repeler estos ataques [con misiles de largo alcance]”.
Putin se burló de la decisión de Estados Unidos de suministrar a Kiev el avanzado sistema de misiles que, según afirmó, “sólo prolongaría la agonía [de Ucrania]”.
También dijo que la medida era una prueba más de que Estados Unidos se estaba involucrando «cada vez más en el conflicto».
El 19 de octubre, Reuters informó que Estados Unidos probablemente comenzaría a suministrar a Ucrania múltiples versiones del sistema de misiles de largo alcance.
Para apoyar sus afirmaciones, la agencia de noticias citó «presentaciones del ejército estadounidense y datos presupuestarios”.
Con información de Reuters.
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