Si alguna vez ha echado un vistazo al programa de estudios estándar que deben cumplir los alumnos de hoy en día, podría suponer que el conjunto de asignaturas, el orden en que se imparten y los recursos utilizados para enseñarlas son el resultado de grandes estudios e investigaciones por parte de los mejores expertos en educación del país. También podría suponer que el objetivo de la estrategia educativa actual es proporcionar a los estudiantes las herramientas, las habilidades y los conocimientos necesarios para alcanzar su máximo potencial.
Pero, ¿en realidad es así?
Hoy en día, los estudiantes, durante toda su carrera académica, cursan asignaturas como “Inglés”, “Estudios Sociales”, “Ciencias de la Tierra” y “Pre-Álgebra”. Cada vez más disminuye la importancia del estudio de las grandes obras de la literatura, la música, el arte e incluso la gramática. En demasiados casos, los niños reciben un diploma de bachillerato sin un conocimiento fundamental de la historia, la comunicación básica o cualquier idea sobre lo que las mayores culturas, pensadores y artistas de la humanidad han ofrecido al mundo. Además, están empapados de cierta ética de carácter que, a menos que sea anulada por la influencia de su familia, podría obstaculizar su capacidad de desarrollarse a largo plazo.
Entonces, ¿qué deberían aprender los niños?
Comunicación
Lo primero y más importante es enseñar a un niño a leer de forma competente, a hablar con claridad y a escribir con destreza. En los años de primaria, esto puede lograrse ofreciéndoles los mejores libros y explorando, a medida que crecen, los detalles de la fonética y la gramática. Hay que animarlos a escribir con frecuencia: en un diario, en cartas a la familia, en historias que inventan, o con tiza en la acera.
También hay que enseñarles a escribir correctamente, tanto en letra de imprenta como en cursiva. Poner el bolígrafo sobre el papel evoca una profundidad de pensamiento diferente a la de teclear o enviar mensajes de texto. Además, muchos documentos históricos se escribieron en cursiva. No deberíamos perder la capacidad de leerlos.
A medida que los niños avanzan académicamente, pueden abordar proyectos de escritura más avanzados, aprender a presentar ideas verbalmente y comprender textos cada vez más difíciles. Las personas con sólidas habilidades comunicativas tienen todo lo que necesitan para aprender cualquier cosa que deseen.
Lógica
Uno de los mayores beneficios de estudiar matemáticas —además de la aplicación práctica que ofrece para una futura carrera de ingeniería o para el presupuesto del hogar— es que enseña a pensar con lógica. Hay que animar a los estudiantes que pueden destacarse en matemáticas a que lo hagan. La tendencia a eliminar los programas de clasificación de nivel avanzado en algunas escuelas ahoga en gran medida a esos estudiantes.
Más allá de las matemáticas, por supuesto, está el estudio formal de la lógica. Si no está familiarizado con el estudio de la lógica, vale la pena señalar que un plan de estudios estándar escolar carece casi por completo de esta parte tan importante de la educación. La lógica es el estudio de la razón y enseña a considerar los argumentos y las ideas de forma racional. Un estudiante del área de la lógica aprende a identificar cualquier falacia o premisa falsa que exista.
Si algo hemos aprendido en estos últimos años es que la capacidad de pensar de forma lógica y crítica es esencial. Hoy en día en el mercado hay una serie de programas de lógica formal dirigidos a los educadores en casa, pero son apropiados para cualquiera que desee llenar este vacío.
Historia
La forma en que se aborda la historia en la escuela es aburrida y desarticulada. Fundamentalmente, la historia es un relato. Comienza tan atrás como hemos podido ver y continúa hasta hoy. Es emocionante y entretenida, llena de hazañas humanas, creaciones, descubrimientos y lecciones. La enseñanza de la historia debe ser sencilla y divertida. La mejor manera es enseñarla en orden, como se haría con cualquier historia, empezando desde el principio.
Si quiere saber cómo le ha ido a la mayoría de las escuelas en su estrategia de enseñanza de la historia, hable con algunos adolescentes sobre, por ejemplo, qué dice la Declaración de Independencia, quién luchó en una u otra guerra mundial o qué impacto ha tenido el comunismo en el mundo. Las consecuencias de una sociedad ignorante de la historia no son pequeñas.
Artes
El hecho de que las artes tiendan a ser las primeras asignaturas en ser eliminadas cuando se imponen cambios en los planes de estudio de las escuelas es desgarrador. En todo el mundo, las diferentes culturas han aportado extraordinarios logros artísticos, regalos que la humanidad debería atesorar. Ya sea en el campo de la pintura, la escultura, la arquitectura, la música, el teatro, la danza, la literatura, la poesía o cualquier otra forma de expresión artística, la belleza, la bondad y las lecciones inherentes al estudio de las artes son inconmensurables. Los niños deberían estar rodeados de las mejores creaciones de la humanidad. Con la tecnología actual, está fácilmente al alcance de la mano.
Desarrollo de talentos
Cada alumno está dotado de sus propios puntos fuertes y talentos individuales. El paradigma escolar deja poco espacio para el reconocimiento o el desarrollo de cualquier tipo de habilidad individual.
Sin embargo, para que los alumnos alcancen su mayor potencial, es precisamente a estas bendiciones a las que hay que dar el espacio y los recursos para que se desarrollen. Ya sea un escritor en potencia, un científico, un artista, un abogado, un profesor, un director general, un artesano o un fontanero, hay que maximizar las fortalezas individuales y permitir que florezcan.
Carácter moral
El aspecto más crucial y fundamental de una buena educación es la inculcación de buenos valores morales. Los alumnos deben poder distinguir el bien del mal. Deben defender la verdad, diferenciar la verdad y ser sinceros en su vida. Deben trabajar con diligencia, asumir responsabilidades y estar dispuestos a sacrificarse por lo que es correcto. Deben cuidar a sus familias, amigos, vecinos y comunidades. Deben tener compasión por los demás. Deben respetar a sus mayores. Deben aspirar a ser tan buenos como sea posible.
Un niño debe aprender a ser una persona educada y de alto carácter moral. Qué bendecida sería la sociedad con estudiantes así.
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