Opinión
Estados Unidos se está quedando sin varios productos, incluidos productos lácteos, gasolina, motocicletas, jarabe de arce, alimentos para mascotas y papas. Ahora es el momento de agregar fuegos artificiales a esta lista en constante crecimiento. Todo estadounidense de sangre pura sabe que una celebración del 4 de julio simplemente no es posible sin fuegos artificiales.
Como informó recientemente Bloomberg, “los cielos de algunas ciudades del oeste de EE. UU. permanecerán oscuras por tercer 4 de julio consecutivo”.
¿Por qué?
A diferencia de las celebraciones (o la falta de ellas) de 2020 y 2021, que se vieron afectadas directamente por el COVID-19, las celebraciones de 2022 se verán afectadas por la escasez de fuegos artificiales.
El cuatro de julio es cuando la familia y los amigos se reúnen para celebrar la independencia del país. Se reúnen en torno a la barbacoa, disfrutan de una buena comida y terminan la velada con un espectáculo de fuegos artificiales.
En Phoenix, sin embargo, según las autoridades locales, “el Fabulous Phoenix Fourth, Light Up the Sky en American Family Fields y After Dark in the Park se cancelarán este año debido a problemas en la cadena de suministro que afectan el acceso a los fuegos artificiales”. Phoenix no está solo. Las ciudades arizonenses de Tempe y Chandler tampoco tendrán exhibiciones de fuegos artificiales.
Mientras tanto, en College Park, Maryland, las autoridades municipales anunciaron recientemente que “no pueden garantizar el espectáculo habitual del 4 de julio” debido a la falta de suministros. Uno de esos suministros son los fuegos artificiales.
Profundizando en el tema
Los estadounidenses están unidos por su amor por los fuegos artificiales. En 2019, por ejemplo, los estadounidenses gastaron un total de 1000 millones de dólares en estos explosivos menores. ¿De dónde vienen los fuegos artificiales? Pues como tantos otros productos, vienen de China. El competidor número uno de Estados Unidos produce el 90 por ciento de los fuegos artificiales del mundo.
Para ser aún más específicos, como Julie Heckman, directora ejecutiva de la Asociación Estadounidense de Pirotecnia, dijo a NPR: «El noventa y nueve por ciento de los fuegos artificiales de consumo doméstico provienen directamente de China» y «el 70 por ciento de los fuegos artificiales de exhibición profesional» se fabrican en ciudades importantes como en Beijing, Shanghái y Shenzhen.
Hubo un tiempo, como señaló el artículo de NPR, en que la mayoría de los fuegos artificiales utilizados por los estadounidenses eran fabricados por empresas estadounidenses. Lamentablemente, esos días se han ido, han desaparecido. La escasez de fuegos artificiales es un síntoma de un problema mucho más profundo y grave.
Walter Block, un economista estadounidense muy respetado, señaló recientemente que además de la escasez de fuegos artificiales, Estados Unidos también se está quedando sin aluminio, aguacates, bicicletas, verduras enlatadas, cloro, árboles de Navidad, chips de computadora, fórmula infantil, mantequilla de maní, y papel higiénico. Y podría seguir. No, de verdad, podría. Pero ya se entiende.
Aunque la guerra en Ucrania sin duda juega un papel en la escasez, no es suficiente para explicar por qué Estados Unidos está en una situación tan desesperada. Como señaló Block, los estadounidenses han experimentado la guerra antes. También han experimentado antes «la peste, las enfermedades, el mal tiempo» y las regulaciones gubernamentales.
Sin embargo, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, la escasez masiva no había «interrumpido la economía en algo parecido al grado que estamos experimentando actualmente», escribió. Ucrania es solo una pieza de un rompecabezas más grande y desconcertante.
Tomemos algunos productos de la lista bastante extensa de Block. ¿Qué país produce más bicicletas?
Lo ha adivinado, China.
La nación comunista también produce más chips de computadora (uno de los artículos que escasean) que Estados Unidos. China es también el mayor productor mundial de papel higiénico. Los estadounidenses consumen la mayor cantidad de mantequilla de maní en el mundo—aproximadamente 7 libras de bondad cremosa y crujiente por persona cada año—pero China es el mayor productor mundial de cacahuates. Aunque todavía es posible tener celebraciones del 4 de julio sin fuegos artificiales, es imposible tener mantequilla de maní sin maní.
¿Cuál es mi punto? Estados Unidos solía ser el rey de la autosuficiencia. Hubo un tiempo en que se fabricaban productos importantes en Estados Unidos. Una vez más, sin embargo, esos días se han ido. Con toda probabilidad, nunca volverán. Eso se debe a que, hoy en día, China es la superpotencia manufacturera del mundo y Estados Unidos es su cliente número uno.
De hecho, de los 195 países del mundo, Estados Unidos es ahora el principal importador de bienes. Incluso en tiempos relativamente estables, hay mucho que decir sobre la autosuficiencia. Sin embargo, en tiempos de crisis genuina—con la guerra en curso, los temores de una recesión mundial, etc.—la autosuficiencia es una necesidad absoluta.
La dependencia engendra desesperación y la dependencia de un archirrival engendra temor existencial. China se ha convertido en el supermercado del mundo y Estados Unidos es ahora su principal cliente.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
