La Fiscalía del régimen de Nicaragua ha ordenado capturar al exministro de Educación Humberto Belli por no comparecer ante el Ministerio Público como parte de un caso que se ha abierto contra políticos opositores de la dictadura.
La Policía del régimen–dirigida por consuegro de Ortega, Francisco Díaz–también busca al empresario Gerardo José Baltodano Cantarero por también faltar a la cita ante el Ministerio Público.
El ministerio dijo en un comunicado del jueves que ambos funcionarios se encuentran en el país pero que «sin justificación alguna, faltaron a la cita ante el Ministerio Público», por lo que ahora «se encuentran en búsqueda y captura por la Policía Nacional».
Humberto Belli, quien fue ministro de Educación nicaragüense en la administración de Violeta Chamorro (1990-1997) y es también hermano de la poeta y escritora nicaragüense Gioconda Belli, es buscado por la Policía Nacional por no comparecer ante el Ministerio Público que lo investiga por supuestos «actos ilícitos».
Belli, autora de la novela «El país de las mujeres», confirmó el jueves por la noche a través de un tuit que habían allanado el domicilio de su hermano.
Están allanando la casa de mi hermano Humberto Belli. @ReporteNi
— Gioconda Belli (@GiocondaBelliP) June 18, 2021
Momentos después, la escritora agregó: «No sabemos nada de mi cuñada, Rosario Arguello, que estaba sola» en la vivienda.
Por su parte, Baltodano Cantarero es hermano del general en retiro Álvaro Baltodano, delegado presidencial para fomento de las inversiones, a quien el Ministerio Público había amenazado con usar la fuerza pública si no asistía a declarar en una segunda cita.
La Fiscalía del régimen de Ortega abrió una investigación en contra de las juntas directivas de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (FUNIDES)–un centro de pensamiento independiente, ligada al precandidato presidencial opositor Juan Sebastián Chamorro que se encuentra encarcelado–y de la que el hermano de la escritora y el empresario son miembros.
La investigación contra el Funides y sus juntas directivas es por presuntamente haber «recibido recursos económicos financiados por fuentes extranjeras» y por «tener indicios de que han atentado contra la sociedad nicaragüense».
Por ese caso, una jueza del régimen ordenó levantar el secreto bancario, inmovilizar las cuentas, y prohibir la salida de Nicaragua a 13 empresarios–incluyendo a Belli y Baltodano.
Actualmente, el régimen de Ortega mantiene bajo arresto a cuatro aspirantes presidenciales de la oposición Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro, a quienes los acusa de «traición a la patria» y les ha allanado sus domicilios.
Además, a dos exvicecancilleres, dos históricos exguerrilleros sandinistas disidentes, un exdirigente empresarial, un banquero, cuatro activistas, y dos excolaboradores de una ONG que han sido detenidos en las últimas dos semanas bajo la acusación de diversos delitos.
Las detenciones de opositores se dan a falta de cinco meses para las elecciones generales de Nicaragua, que se celebrarán el próximo 7 de noviembre, en las que Ortega busca una nueva reelección.
Esta represión contra los opositores del régimen de Ortega continúa en el país a pesar del firme rechazo por parte de la comunidad internacional.
Una reciente resolución aprobada por el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) este martes condenó la situación en Nicaragua y exigió la liberación “inmediata” de los opositores presidenciales detenidos y de todos los presos políticos.
Con información de EFE.
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