El representante texano demócrata Eddie Morales presentó una propuesta para dar empleo y procesar a los miles de inmigrantes que entran cada día por la frontera de Texas, la cual se discutirá el día de hoy ante la legislatura del estado.
La propuesta pretende expulsar a los cárteles del lucrativo negocio de la trata de personas, invertir los puertos de entrada estatales, mejorar la infraestructura para la seguridad fronteriza y recaudar miles de millones en ingresos estatales. También ofrecería a los solicitantes de asilo calificados una forma de trabajar y contribuir a la economía de Texas.
Según el plan, Texas cobraría a los inmigrantes una tarifa de entrada de 2,000 dólares para poder trabajar dentro del estado por tres años. Después de este período tendrían que pagar una tarifa anual para continuar trabajando.
Morales prevé que su plan dejará unos 3,000 millones de dólares anuales en ingresos al estado, de los cuales una cuarta parte se invertiría en el combate al fentanilo y otras drogas ilegales. Otro tanto igual se destinaría para infraestructura de los puntos fronterizos.
También propone un impuesto especial para los inmigrates que obtengan un empleo. Además, los inmigrantes tendrían que demostrar que cuentan con un empleo remunerado y no podrían obtener beneficios de programas federales si quieren permanecer en el estado.
Los inmigrantes que apliquen estarían sujetos a deportación incluso por delitos menores —con la posibilidad de que se les niegue el reingreso al estado— o por incumplir las condiciones para su estancia.
Morales le pidió el mes pasado al gobernador Greg Abbot tomar en consideración su plan en la sesión especial de la legislatura, luego de que Eagle Pass se declarara en estado de emergencia tras el aumento en los cruces de inmigrantes ilegales en la zona.
El representante le agradeció a Abbot por tomar seriamente la severidad de la crisis migratoria y el impacto en las comunidades de la frontera sur y señaló la inacción del Congreso durante más de 30 años con respecto a la seguridad en la frontera.
Sin embargo, aún hay que ver si la propuesta es viable.
Morales dijo a The Texan que está trabajando para determinar si la Constitución de Texas permitiría al estado imponer un impuesto sobre la renta a los ciudadanos extranjeros.
Por otra parte, existe un precedente en la Corte Suprema en un caso de Arizona contra el gobierno de Estados Unidos en el que se determinó que las leyes federales impiden a los estados regular la inmigración.
El fiscal del condado de Kinney, Brent Smith, dijo que para que el plan funcione primero se debe asegurar la frontera, según informó The Texan.
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