Un legislador republicano investigado por el extinto Comité 6 de Enero dijo el 8 de enero que estaba interesado en unirse a una propuesta de investigación sobre esos mismos investigadores.
El Comité del 6 de Enero, creado en 2021 bajo el liderazgo de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, estuvo formado casi en su totalidad por demócratas. Solo dos republicanos, Liz Cheney (R-Wyo.) y Adam Kinzinger (R-Ill.)—ambos críticos del presidente Donald Trump y del movimiento populista que él creó—formaban parte del comité.
En el transcurso de apenas una docena de audiencias, el comité intentó probar su caso de que la alteración del orden en la manifestación «Stop the Steal» del 6 de enero de 2021 fue la culminación de un complot de meses de duración de Trump y sus aliados para derrocar al gobierno de Estados Unidos.
El comité, que dejó de existir al final del Congreso anterior, dejó sin respuesta y sin abordar varias preguntas cruciales sobre los eventos de ese día—preguntas que los republicanos han prometido investigar.
Ahora, el representante Scott Perry (R-Pa.) ha dicho que está interesado en ser parte de estas investigaciones a pesar de que está siendo investigado por eventos relacionados, dijo el republicano de Pensilvania al programa «This Week» de ABC.
El año pasado, el Departamento de Justicia (DOJ) incautó el teléfono celular de Perry como parte de su investigación sobre los eventos del 6 de enero de 2021. Los abogados de Perry demandaron al DOJ y al FBI la devolución de los datos incautados, pero luego retiraron la demanda. Los cargos contra Perry continúan mientras el Departamento de Justicia y el FBI enfrentan cargos de “instrumentalización” por parte de la nueva mayoría de la Cámara de Representantes.
En su comparecencia en ABC, Perry dijo que no considera que haya ningún conflicto de intereses en su participación en las investigaciones de los republicanos el 6 de enero.
“¿Por qué debería estar limitado solo porque alguien ha hecho una acusación? Todo el mundo en Estados Unidos es inocente hasta que se demuestre lo contrario», dijo Perry.
Presionado aún más por el presentador George Stephanopoulos sobre si esto implicaría un conflicto de intereses, Perry replicó: «Entonces, ¿debería prohibirse a todos los congresistas que no estén de acuerdo con alguien que ejerzan los poderes de supervisión e investigación que tiene el Congreso? Ese es nuestro cargo».
Agregó:»Y de nuevo, eso es apropiado para todos y cada uno de los miembros, independientemente de las acusaciones que se hagan».
“Me acusan de todo tipo de cosas todos los días, como a todos los miembros de la opinión pública. Pero eso no les impide hacer su trabajo. Es nuestro deber y es mi deber».
Los republicanos tienen varias posibles líneas de investigación para explorar ahora que han tomado el mazo.
Por ejemplo, el recién elegido presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.), y otros líderes republicanos de la Cámara de Representantes prometieron una investigación sobre el papel desempeñado por Pelosi y sus designados en dejar al Capitolio sin preparación antes de la manifestación del 6 de enero de 2021. Las pruebas demuestran que, en varias ocasiones antes de la manifestación, el entonces jefe de la policía del Capitolio, Steven Sund, solicitó la ayuda de la Guardia Nacional; en todas las ocasiones, el sargento de armas de la Cámara de Representantes—una persona nombrada por Pelosi—incumplió o rechazó las peticiones.
Durante la primera ronda de audiencias del 6 de enero, el presidente del comité Bennie Thompson (D-Miss.) dejó en claro que Pelosi estaba fuera de los límites de la investigación; sin embargo, los republicanos han dejado en claro que no tienen reparos en investigar el papel de Pelosi.
También podría investigarse la gestión del FBI y del Departamento de Justicia en la investigación del atacante desconocido que colocó bombas caseras frente a las sedes del Comité Nacional Republicano (RNC) y del Comité Nacional Demócrata (DNC) el 5 de enero de 2021.
En un momento dado, la entonces vicepresidenta electa Kamala Harris incluso estuvo en el edificio del DNC, situándose a metros de los explosivos no detonados.
A pesar de la aparente gravedad de la amenaza, los denunciantes del FBI dijeron a los republicanos de la Cámara de Representantes que el FBI esperó más de un año para iniciar una investigación a gran escala.
Los republicanos también podrían investigar qué papel desempeñó el FBI, si es que desempeñó alguno, en los acontecimientos de aquel día.
Las sospechas sobre el FBI aumentaron entre los republicanos luego de que Jill Sanborn, la subdirectora ejecutiva de la Subdivisión de Seguridad Nacional del FBI, se negara a desmentir la participación de la agencia en la manifestación.
Durante una audiencia en el Senado el 11 de enero de 2022, el senador Ted Cruz (R-Texas) cuestionó a Sanborn sobre la posible participación del FBI. Sanborn respondió con evasivas, evitando dar una respuesta definitiva a las preguntas de sí o no formuladas por Cruz.
En diciembre de 2021, Perry se convirtió en uno de los pocos legisladores del Partido Republicano que recibieron una solicitud de documentos y testimonios por parte del grupo, en el que casi no había representantes republicanos. Otros llamados por el grupo fueron el representante Jim Jordan ( R-Ohio) y el entonces líder de la minoría en la Cámara McCarthy.
En ese momento, Perry rechazó la solicitud y dijo que no ayudaría a un comité “ilegítimo”.
“Tengo un inmenso respeto por nuestra Constitución, el Estado de derecho y los estadounidenses a los que represento que saben que esta entidad es ilegítima y no está debidamente constituida según las reglas de la Cámara de Representantes de Estados Unidos”, dijo Perry en un hilo de Twitter en aquel momento.
Posteriormente, el Departamento de Justicia también abrió una investigación sobre Perry.
La investigación de Perry se centra en si Perry cometió actos delictivos al ayudar a Trump en sus esfuerzos por anular ciertas listas electorales ante acusaciones de fraude electoral.
En última instancia, la asignación de comisiones a Perry dependerá de McCarthy, el nuevo presidente de la Cámara. Queda por ver si McCarthy aprobará la aspiración de Perry de unirse a las próximas investigaciones del Partido Republicano del 6 de enero.
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