El Departamento de Estado de Pensilvania cuenta desde mayo de 2022 con 4 millones de votantes demócratas y 3.5 millones de republicanos registrados en el estado. Sin embargo, incluso con 550,000 demócratas más que republicanos, Pensilvania no es del todo un estado azul, es más bien púrpura, con 1.3 millones de votantes registrados que se autodenominan libertarios, verdes u «otros». Estos son los votantes menos predecibles, los que hacen que Pensilvania sea un estado oscilante, capaz de inclinarse hacia los demócratas o los republicanos.
Con 19 votos electorales, es un estado imprescindible para los aspirantes a la presidencia.
Muchos, aunque no todos los republicanos de Pensilvania, creen que Donald Trump sigue siendo la persona indicada para el puesto. Ellos opinan que Trump es vital para recuperar el poder del Despacho Oval.
«Es realmente fundamental para nuestra supervivencia», dijo a The Epoch Times el autor Russell S. Hepler, del condado de Schuylkill. «Y también para 2022. No quiero restar importancia a estas próximas elecciones, porque van a sentar las bases para 2024, para bien o para mal».
Hepler, un pastor, habló a modo individual, no de parte de su congregación. Él es el autor del libro «Yes! We Can Turn This Nation Around! A Practical Guide for Christian Political Involvement» (¡Sí! ¡Nosotros podemos darle la vuelta a esta nación!: Guía práctica para la participación política cristiana.
Hepler dice que Estados Unidos va en la dirección equivocada.
«Si ellos siguen impulsando esta agenda económica, ambiental y cultural de la izquierda radical no va a quedar mucho para Estados Unidos. Cuando uno tiene un candidato a la Corte Suprema que ni siquiera puede definir a una mujer, sabemos que esta nación está en serios problemas», dijo Hepler. «No se puede sobrevivir si se niega la realidad. Esa ha sido la base del marxismo desde sus inicios. Siempre se basa en la mentira. Se basa en ‘lo que sea que yo diga, como gobierno, como partido, como el gran hermano, eso es la verdad».
Rick Rathfon, presidente del partido republicano del condado de Clarion, coincide en que ganar es fundamental para los republicanos.
«Mire el lío en el que nos ha metido Biden en solo 18 meses. Es decir, tenemos que recuperar tanto la Cámara como el Senado en noviembre y tratar de restablecer la cordura y la dignidad en Washington», dijo Rathfon a The Epoch Times, añadiendo que si el expresidente Donald Trump se presenta, lo apoyará.
Pero será problemático.
Un partido, dos puntos de vista
Los demócratas intentarán destruir a Trump desde el primer día, dijo Rathfon. «Nunca han dejado de intentar destruirlo. Trump hizo muchas cosas buenas para nuestro país. Lo hizo absolutamente. Pero creo que sería un error que se postule, solo por el odio que los demócratas y los principales medios de comunicación tienen hacia él».
«Me encanta el gobernador Ron DeSantis de Florida. Yo lo escucho en mis viajes y de parte de mucha gente del comité estatal».
El Partido Republicano de Pensilvania no respondió a las solicitudes de comentarios para esta historia.
Sam Faddis, un oficial de operaciones de la CIA retirado y autor de «Beyond Repair: The Decline and Fall of the CIA» y «Willful Neglect: The Dangerous Illusion of Homeland Security» (Más allá de la reparación: El declive y la caída de la CIA y Negligencia intencional: La peligrosa ilusión de la seguridad nacional) ha hablado con muchos republicanos como organizador de una coalición de más de 75 grupos patriotas en toda Pensilvania que están trabajando juntos en la reforma electoral y otros temas.
La mayoría de los votantes republicanos de Pensilvania se consideran parte del equipo «Make America Great Again/America first» (Hagamos a Estados Unidos grande de nuevo/ Estados Unidos Primero), dijo Faddis, y apoyan al 100 por ciento a Donald Trump en los temas, aunque a veces tengan dudas sobre sus tácticas.
Los temas son el centro de gravedad de manera abrumadora para el Partido Republicano en Pensilvania, indicó a continuación.
«Hay una brecha del tamaño del Gran Cañón entre esas personas [MAGA] y un número muy grande de políticos republicanos establecidos en Harrisburg», dijo Faddis a The Epoch Times.
«Aunque sé que el establishment no quiere reconocer ese hecho —ellos quieren seguir fingiendo que ese problema no existe— en las bases, ese es un poco el problema».
Las bases no sienten que los republicanos del establishment estén representando a la gente ni lo que representan, señaló Faddis.
«Estamos aquí con Donald Trump de nuevo, al menos en todos los temas y ustedes quieren fingir que 2016 nunca sucedió».
Trump es diferente
El problema es que Trump es fundamentalmente diferente a cualquier presidente que haya estado en el cargo en la memoria reciente, republicano o demócrata, dijo Faddis.
«Él está totalmente fuera del sistema. No forma parte del partido único».
El establishment de ambos partidos tiene un consenso general sobre cómo se va a dirigir el gobierno de Estados Unidos, indicó a continuación. Es decir, siempre más grande, siempre más caro.
«Donald Trump es una bola de demolición, así que por supuesto hay que destruirlo en lo que respecta al establishment», declaró Faddis.
Si el republicano que se presenta no es MAGA, su campaña está muerta en Pensilvania, agregó. Además cree que sería una pérdida de tiempo que otro candidato con mentalidad MAGA desafiar a Trump.
«Si Donald Trump se presenta, él será mucho mejor que ellos, sin ninguna duda, será la opción», indicó Faddis. «No hay duda. Yo no puedo imaginar que otra persona con mentalidad MAGA pueda desafiar las primarias de Pensilvania y tener alguna esperanza de ganar. Eso no es posible».
Si Trump decide no presentarse, Faddis cree que DeSantis sería la persona número uno en torno a la cual se aglutinarían instantáneamente más votantes.
«Yo creo que, francamente, sería un movimiento político inteligente, porque en cierto modo, creo que DeSantis es un tipo menos controvertido que Trump, para el promedio», declaró Faddis.
«No puedo concebir a nadie, ni siquiera a un tipo de tez como Ron DeSantis, que le gane a Trump en Pensilvania. Lo que quiero decir, es que DeSantis es muy popular aquí y me encantan sus políticas. Pero es imposible convencer a las bases de que se alejen de Donald Trump tal y como están».
Lucha en las primarias
Varios republicanos indicaron que no quieren ver a DeSantis y a Trump luchar en unas primarias. Para muchos, sería como ver a los padres pelearse cuando los quieres a ambos y no quieren elegir a un favorito.
Toni Shuppe, fundador y CEO de Audit the Vote PA, ha estado investigando las anomalías en las elecciones de 2020 desde justo después de que ocurrieran.
«Personalmente yo creo, basándome en lo que he encontrado a través de Audit the Vote, que Donald Trump ganó en 2020», dijo Shuppe a The Epoch Times. «Yo siento que ganó la primera vez por lo que se merece su segundo mandato. Yo votaría por él si se presenta. Pero a mi también me gusta mucho Ron DeSantis».
Para la mayoría de la gente de esta historia, el boleto soñado sería Trump y DeSantis, aunque no todos están convencidos de que DeSantis estaría dispuesto a tomar un papel de vicepresidente cuando podría gobernar Florida en su lugar.
Para Shuppe, el ticket soñado sería Trump y la gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem. «DeSantis es joven. Él está haciendo un buen trabajo en Florida. Me gustaría ver a Trump y Kristi, y luego, potencialmente, ocho años de DeSantis», dijo Shuppe. «Yo creo que, para volver a encarrilar el país, restaurando nuestra república constitucional, va a llevar mucho tiempo. Además creo que por eso tiene sentido primero una candidatura de Trump y alguien más, seguida de ocho años de alguien como Ron DeSantis. Eso podría realmente hacer que las cosas se muevan en la dirección correcta».
A Kurt Dock, miembro del Comité Republicano del Municipio de Lancaster, le gustaría que Trump se presentara, pero si no lo hace, Dock cree que el partido republicano tiene candidatos fuertes en Noem y DeSantis.
Según Dock, los demócratas se han movido demasiado a la izquierda.
«Cuando el péndulo oscila en un sentido y se va tan al extremo, suele volver con la misma fuerza hacia el otro lado», dijo Dock a acontinuación.
«A mi me gustaría ver a alguien un poco más centrista. No tan a la derecha. En lugar de continuar con el distanciamiento, intentar que algunas de las personas que son muy de centro, o de centro-izquierda, vengan a nuestro lado. No creo que sea tan difícil de hacer».
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