El Departamento del Sheriff del condado de Merced, en California, descubrió el 26 de julio a decenas de inmigrantes que vivían en condiciones «horribles» y trabajaban como aparentes empleados contratados en un cultivo ilegal de marihuana.
Los investigadores del sheriff determinaron que aproximadamente 60 personas encontradas en el lugar eran víctimas de la trata de seres humanos, pero no se les permitió detenerlas debido a las políticas de estado santuario del estado.
«Esta gente está bajo contrato», dijo el sheriff del condado de Merced, Vernon Warnke, en un vídeo publicado en las redes sociales el jueves. «Ellos deben dinero, y, sin embargo, aquí tenemos un centro de procesamiento ilegal, y ellos están muertos de miedo».
El equipo del sheriff visitó el lugar del bloque 900 de Vassar Avenue en Merced, a unos 110 kilómetros al sureste de San Francisco, el miércoles por la tarde.
Durante el allanamiento, los agentes descubrieron a unas 60 personas trabajando en el lugar, procesando varios cientos de kilos de producto acabado de marihuana, según el departamento del sheriff. Las autoridades confiscaron además varios cientos de kilos de marihuana ilegal en el mismo lugar.
Los migrantes pagaron miles de dólares para ser transportados a través de la frontera, dijo el sheriff, y se les prometió empleos bien remunerados y un lugar para quedarse. Sin embargo, una vez que llegaron al lugar de Merced, se vieron obligados a procesar marihuana mientras permanecían en «condiciones de vida horribles» para pagar a las personas que los trajeron a través de la frontera, según la oficina del sheriff.
«Esta es una parodia –una tragedia. Todas las cosas que usted puede pensar porque tenemos 60 vidas que han quedado destrozadas a causa de esto», dijo el Sr. Warnke. «El aspecto de la trata de seres humanos es tan flagrante. Es desgarrador».
El grupo, que incluía hombres, mujeres y un adolescente, fue abandonado apenas unos días antes de que los investigadores los encontraran. Dormían en coches, algunos en remolques cerrados -como los U-Haul- y otros sobre una manta en el suelo, entre la maleza, y solo disponían de dos letrinas portátiles, explicó el sheriff a las emisoras de noticias locales.
La mayoría de los inmigrantes, cuyas edades oscilaban entre los 16 y los 60 años o más, se marcharon del lugar por su propio pie tras rechazar los servicios que les ofrecieron, según una portavoz del sheriff.
«Nosotros les ofrecimos a todos recursos en el lugar, y todos los rechazaron», dijo la portavoz Alexandra Britton a The Epoch Times. «Todos se fueron por su propia voluntad».
Nadie fue arrestado en la escena, según la Sra. Britton.
El supervisor del condado de Merced, Josh Pedrozo, dijo que se sintió disgustado cuando se enteró de la noticia.
«Es muy preocupante ver este tipo de comportamiento, y ver a la gente tratar a las personas de esta manera, especialmente en el año 2023», dijo el Sr. Pedrozo a The Epoch Times. «No es algo que quiera ver en mi país (…) Esto es esclavitud. No sé de qué otra forma decirlo».
El departamento del sheriff ha hecho un buen trabajo patrullando el condado en busca de operaciones de cultivo ilegales y el condado ha limpiado algunas de ellas, pero esto todavía va a suceder, indicó el supervisor.
«Es una comunidad muy agrícola, así que la gente viene aquí a trabajar en los campos. No puedo asegurar que no vengan a hacer otras cosas», añadió Pedrozo.
Los investigadores del sheriff siguen indagando en el caso para determinar quién estaba a cargo de la operación.
Las operaciones ilegales de cultivo de marihuana en California se han expandido en los últimos años y se han vuelto peligrosas para los residentes, según algunos funcionarios electos del estado, que instaron al Departamento de Justicia de EE. UU. a abordar el problema en mayo de 2021.
En una carta al fiscal general Merrick Garland, una docena de representantes de California dijeron que los sitios de cultivo ilegal de marihuana habían sido escenario de múltiples homicidios.
Los representantes instaron al Sr. Garland a hacer más para abordar el problema.
Los lugares de cultivo ilegal habían aumentado hasta un 300 % en algunas zonas en 2020, según los legisladores.
Hace cuatro años, también en el condado de Merced, el sheriff Warnke formó un grupo de trabajo para hacer frente a las operaciones ilegales de cultivo en el mercado negro.
El equipo ha incautado miles de plantas en los últimos años.
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