Un agente especial del Servicio Secreto de EE. UU. fue retirado de sus funciones tras mostrar un comportamiento «preocupante» que, al parecer, terminó en un altercado físico con otros agentes del equipo de protección mientras acompañaban a la vicepresidenta Kamala Harris en su salida de la Base Conjunta Andrews el lunes.
El agente, cuya identidad no fue revelada, sufrió un «incidente médico» y fue inmediatamente «retirado de su asignación», dijo Anthony Guglielmi, jefe de comunicaciones del Servicio Secreto, en un comunicado a The Epoch Times.
Alrededor de las 9 de la mañana, aproximadamente una hora antes de que la vicepresidenta llegara al lugar, el agente «que prestaba apoyo en la salida de la vicepresidenta de la Base Conjunta Andrews empezó a mostrar un comportamiento que sus colegas consideraron preocupante», según Guglielmi.
El Sr. Guglielmi dijo que se llamó a personal médico al lugar de los hechos. Señaló que el altercado no retrasó la salida de la Sra. Harris.
El portavoz del Servicio Secreto declaró que, al tratarse de un «asunto médico», no se revelaría más información.
El agente «armado» mostró un comportamiento agresivo hacia sus compañeros. Cuando el agente especial al mando y el supervisor del turno de servicio intentaron calmar la situación, se produjo un altercado físico, según el Washington Examiner.
RealClearPolitics reportó, citando fuentes anónimas, que el agente llegó al lugar y actuó «erráticamente», incluyendo, según CBS News, hablando incoherencias. La fuente afirmó que el agente supuestamente se puso encima del agente especial a cargo del destacamento y empezó a darle puñetazos.
Posteriormente, el agente fue esposado y retirado del servicio para una evaluación médica. Al parecer, el arma del agente permaneció en su funda hasta que «otros agentes sujetaron físicamente al agente y le quitaron el arma», según RealClearPolitics.
RealClearPolitics reportó que «fuentes de la comunidad del Servicio Secreto» han planteado preguntas sobre el proceso de contratación del agente, que supuestamente ha mostrado «otros comportamientos extraños antes de este incidente».
The Epoch Times se puso en contacto con la oficina de la vicepresidenta para recabar sus comentarios.
La vicepresidenta se encontraba en el Observatorio Naval en el momento del incidente, y su salida de la Base Conjunta Andrews no se vio afectada, según el Sr. Guglielmi.
No se revelaron más detalles sobre la naturaleza del comportamiento del agente, ya que se clasificó como un asunto médico. El portavoz del Servicio Secreto aseguró que se tomaron las medidas adecuadas y reiteró su dedicación al bienestar de sus empleados.
«El Servicio Secreto de Estados Unidos se toma muy en serio la seguridad y la salud de nuestros empleados. Como se trataba de un asunto médico, no revelaremos más detalles», dijo el Sr. Guglielmi.
El Servicio Secreto es responsable de garantizar la seguridad de altos funcionarios como el presidente, el vicepresidente y sus familias, así como de expresidentes, dignatarios extranjeros, candidatos importantes próximos a las elecciones y personas sujetas a órdenes ejecutivas o durante acontecimientos importantes en materia de seguridad. También protegen la infraestructura financiera y los sistemas de pago de Estados Unidos.
Los agentes suelen recibir una formación exhaustiva que hace hincapié en el desarrollo de habilidades y el éxito de la misión, según su sitio web. Los nuevos agentes reciben una rigurosa formación en el Centro de Formación de las Fuerzas de Seguridad Federales de Georgia, seguida de un curso de formación de agentes especiales de 18 semanas cerca de Washington.
El Servicio Secreto afirma en un folleto que está «plenamente comprometido con los principios de igualdad de oportunidades de empleo (EEO) y diversidad inclusiva».
Los agentes asignados a los detalles de protección se someten a simulacros de entrenamiento para prepararse para emergencias del mundo real. Entre las asignaciones que puede obtener un agente, la División de Protección del Vicepresidente (VPD) está considerada una de las más prestigiosas del Servicio Secreto, solo superada por la División de Protección Presidencial.
Los futuros agentes, que reciben una oferta condicional de empleo, rellenan formularios de seguridad, como el Formulario Estándar 86, y se someten a una investigación de antecedentes de seguridad personal por parte del Servicio Secreto, según su página web. Esto incluye comprobaciones preliminares, escaneado de antecedentes nacionales y huellas dactilares, y una revisión de seguridad. Este proceso implica indagar en el pasado de la persona y ponerse en contacto con referencias, empleadores y organismos encargados de hacer cumplir la ley.
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