La fecha del juicio del expresidente Donald Trump, el 4 de marzo, fue ahora eliminada del calendario judicial. Esta había sido objeto de gran atención, ya que ponía al exmandatario a prueba en relación a sus últimos días en el cargo, justo un día antes de que más de una docena de estados celebren sus primarias republicanas, también conocidas como el Supermartes.
La fecha había sido fijada originalmente por la jueza federal de distrito Tanya Chutkan, que se aferró al 4 de marzo en medio de varios intentos de los abogados de Trump de retrasar el calendario judicial y, en última instancia, el juicio. La jueza Chutkan había concedido varios retrasos modestos para los plazos previos al juicio, sin mover la fecha del juicio, ajustando así el calendario del caso. La eliminación de la fecha del calendario del juicio fue reportada por primera vez por Washington Post.
Este retraso en el juicio era esperable, ya que el caso ahora está estancado en la corte de distrito, mientras el presidente Trump presenta una defensa de inmunidad presidencial para desestimarlo en una corte de apelaciones. Tanto los fiscales como la jueza Chutkan sugirieron que un juicio el 4 de marzo era imposible en presentaciones judiciales recientes. Los fiscales habían presionado para juzgar el caso en el período actual, argumentando que un juicio rápido era de interés público.
El calendario judicial se estanca a medida que avanzan las elecciones
El proceso judicial en espera, en el que el presidente Trump se declaró inocente de cuatro cargos de obstrucción y conspiración relacionados con sus acciones del 6 de enero, lleva casi dos meses en pausa. También otros calendarios de los juicios están cambiando.
El año pasado, el presidente Trump fue acusado de cuatro imputaciones penales en jurisdicciones distintas, lo que prevé una apretada agenda judicial para el año 2024 mientras vuelve a hacer campaña para la presidencia. En enero concluyeron dos juicios civiles contra el expresidente y aún queda que se emita un veredicto por conocer.
Anteriormente, en marzo, el Sr. Trump se enfrentó a otro juicio iniciado por el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, quien acusó al presidente Trump de falsificar datos comerciales, pero el juicio se retrasó a la luz de otras fechas de audiencia en el calendario. El presidente Trump se declaró inocente de 34 cargos.
En mayo, originalmente estaba previsto que el presidente Trump fuera a juicio en el Distrito Sur de Florida, pero este juicio también se retrasó y el juez dictaminó que el proceso de presentación de pruebas y evidencias del caso había sido más complicado y había llevado más tiempo de lo esperado originalmente. Este proceso surgió después de una redada del FBI en Mar-a-Lago, y el presidente Trump se declaró inocente de 40 cargos relacionados con el mal manejo de documentos clasificados. Aún no se ha fijado una nueva fecha para el juicio.
Los fiscales del condado de Fulton, Georgia, solicitaron una fecha de juicio en agosto en un caso de crimen organizado a gran escala en el que se acusa al presidente Trump y a otras 14 personas. Ellos creen que necesitarán de tres a cinco meses para presentar su caso. La imputación enumera 41 cargos, incluidos 13 contra el presidente Trump, de los que se declaró inocente.
La fecha del juicio aún no ha sido fijada por un juez, y los abogados del xpresidente Trump han argumentado que un juicio que se lleve a cabo durante las elecciones generales de noviembre solo podría verse como una interferencia electoral, lo que complica las cosas para los jurados a quienes se les puede exigir que juzguen el caso, mientras sopesan si votarán o no por él.
Los abogados del presidente Trump y varios otros expertos legales han predicho que si los casos no llegan a juicio antes de las elecciones generales, es posible que no vayan a juicio en absoluto si él gana la reelección.
Inmunidad presidencial
El presidente Trump presentó cuatro mociones para desestimar su caso en Washington, una de las cuales argumenta que tenía inmunidad presidencial que lo protegía de tal procesamiento. Después de que la moción fuera denegada en la corte de distrito, el presidente Trump la llevó a la corte de apelaciones.
Debido a que la apelación trata sobre si el caso puede continuar, la corte de distrito ordenó suspender todos los procedimientos durante el proceso de apelación.
Desde el 13 de diciembre, el caso está en pausa. La corte de apelaciones atendió los argumentos orales a principios de enero, pero no está claro cuándo se tomará una decisión.
Si la corte de apelaciones no desestima el caso, se espera que los abogados del presidente Trump busquen demoras adicionales, incluso apelando las otras tres mociones para desestimar el caso. La defensa argumentó que el caso debería desestimarse por motivos legales, constitucionales y debido a un proceso judicial selectivo y vengativo.
Varios otros factores están complicando el cronograma, ya que la defensa puede aún apelar las decisiones que emita la corte de apelaciones si las considera desfavorables, incluso ante la Corte Suprema de Estados Unidos, que de ser aceptada suspendería nuevamente el caso.
La defensa también ha argumentado que el proceso probatorio requiere más tiempo y acusa a los fiscales de no entregar los materiales requeridos, pero el juez de la corte de distrito ya ha rechazado múltiples solicitudes para retrasar los plazos de presentación de pruebas.
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