El 1 de junio, el ayuntamiento de Arcadia aplazó por segunda vez su decisión sobre una propuesta de «refugio reducido» destinada a reubicar a las personas sin hogar de la ciudad, mientras el suburbio de Los Ángeles se esfuerza por hacer frente a un problema creciente de indigencia.
En 2015, había 22 personas sin hogar registradas viviendo en Arcadia, 13 de las cuales estaban refugiadas en viviendas de transición. La cifra se mantuvo relativamente sin cambios en 2016. Pero en 2020, la población sin hogar había alcanzado las 117 personas, un aumento de más del 500 por ciento. De ellos, 106 se contabilizaron en la Arcadia incorporada y 11 en la Arcadia no incorporada.
El ayuntamiento de Arcadia votó este mes de febrero la presentación de una carta de intenciones en la que se examina el uso de pequeños refugios en el emplazamiento de la carretera de acceso a Peck Park en busca de soluciones para la creciente población de personas sin hogar.
El proyecto pretende ser un programa piloto con un mínimo de 15 refugios, comida, baños, duchas, gestión de casos, seguridad y otros servicios, que servirían a la población sin hogar de Arcadia. Se espera que la financiación inicial provenga de subvenciones, y los funcionarios de la ciudad han comunicado que no se utilizarían fondos municipales para el proyecto. Se aseguró a los residentes que «si el dinero de la subvención se acaba, aseguraríamos un alojamiento de emergencia para los que están en los pequeños refugios, y luego cerraríamos las instalaciones».
En la reunión del ayuntamiento, casi 200 residentes locales celebraron una concentración en oposición a la propuesta. Los residentes exigieron que el ayuntamiento abandone el plan o lo suspenda indefinidamente. Temen que estas «casas diminutas» atraigan a personas sin hogar de las regiones vecinas. La preocupación es que esto aumentaría la población de personas sin hogar de la ciudad, conduciría a barrios inseguros y se sumaría al deterioro ya existente de la economía de la ciudad. Los residentes esperan que esto tenga un efecto devastador en los valores de las propiedades a largo plazo.
Arcadia es un rico suburbio de mayoría asiática situado a unos 13 kilómetros al noreste del centro de Los Ángeles, en el valle de San Gabriel. Según los datos del censo de Estados Unidos, cuenta con más de 58,000 residentes, de los cuales más del 60 por ciento son asiáticos.
La ley federal no permite perseguir a las personas por dormir a la intemperie cuando no se dispone de un refugio. Esto pone a las ciudades en una posición en la que tienen que proporcionar refugio a las personas sin hogar para hacer cumplir la práctica de mantener a las personas sin hogar fuera de las calles y de la propiedad pública. Como remedio, Arcadia ha dicho en su página web que el ayuntamiento propone los «refugios reducidos» como parte de un enfoque más amplio para reducir el número de personas sin hogar en la ciudad. La comunidad de casas reducidas, que se asemejan a pequeños cobertizos, serviría de alojamiento temporal para los sin techo hasta que tengan una vivienda permanente.
En la manifestación, la residente local Joyce Lin dijo: «Muchas personas sin hogar sufren graves enfermedades mentales y problemas de abuso de drogas de larga duración. Lo que necesitan es una asistencia gubernamental adecuada, no la tirita de un refugio temporal». Lin dice que ha trabajado en el centro de la ciudad de Los Ángeles desde 2005, donde ha sido testigo del aumento exponencial de la población sin hogar. Ella y otros residentes quieren evitar que esto se repita en Arcadia.
Varios residentes locales temen que el rápido aumento de los sin techo se apodere de su comunidad, lo que provocaría resultados similares a los de la cercana Venice Beach. Venice Beach, una antigua atracción turística de Los Ángeles, está ahora inundada con más de 200 tiendas de campaña y campamentos de indigentes instalados a lo largo del paseo marítimo. Las estadísticas de la policía de Los Ángeles informan de que los robos violentos han aumentado un 117 por ciento y la violencia con armas de fuego ha subido un 162 por ciento en la zona. Los residentes de Los Ángeles han propuesto reubicar a estas personas del paseo marítimo en viviendas que no oculten el pintoresco litoral.
Algunos residentes locales han pedido un estudio para determinar la causa del aumento de los sin techo. En la manifestación, Angie Gren dijo que pide al ayuntamiento que investigue la causa del aumento de la población sin hogar.
«Estamos pidiendo al ayuntamiento que investigue otras opciones antes de aprobar viviendas para estas personas», dijo Gren a The Epoch Times. «Pedimos a la ciudad que sea transparente con la comunidad en cuanto a los verdaderos motivos de este proyecto y con quiénes están colaborando (…) que sea transparente con nosotros e investigue por qué el número de nuestros sin techo ha aumentado de forma tan espectacular».
Gren aclaró además: «Nunca he dicho, ni indicado, que nos opongamos a ayudar a las personas sin hogar. Creemos que ese argumento ha sido creado deliberadamente para enfrentar a dos bandos. Lo que decimos es que tenemos que entender por qué estas personas están aquí, de dónde vienen y cuál es la proyección de futuro».
Antes de la reunión del consejo del martes, el alcalde Sho Tay dijo que todavía no había recibido el informe y que no podría responder a la pregunta de qué estaba causando el aumento de los sin techo en Arcadia.
El 6 de mayo, más de 500 residentes locales participaron en un foro comunitario virtual sobre la crisis de los sin techo en Arcadia y se opusieron a la creación de un centro de recursos para los sin techo. Los días 15 y 16 de mayo, los manifestantes se alinearon en las calles de Arcadia, instando a los miembros del consejo a erradicar el plan. En la reunión del consejo de la ciudad del 18 de mayo, más de 200 residentes se reunieron fuera gritando: «No a los centros de recursos para personas sin hogar que ponen en peligro la seguridad de nuestros residentes» y «Necesitamos un entorno de vida seguro, no más refugios para personas sin hogar».
Más de 60 personas aprovecharon el foro abierto de la reunión del consejo para dirigirse a los miembros del consejo y explicar su oposición a la propuesta. Otros residentes inundaron las líneas telefónicas de los legisladores, superando con creces las voces de apoyo al plan.
April Verlato, miembro del consejo de la ciudad, cree que el consejo debe tomar una decisión inmediata sobre la cuestión de los sin techo. Cuanto más se retrase el consejo, más seguirá creciendo la oposición pública.
Muchos creen que esta situación es mucho más complicada y excede los poderes legislativos del ayuntamiento. Las cuestiones subyacentes del empleo, el alcoholismo, la drogadicción y la delincuencia están fuera del alcance del ayuntamiento.
Al visitar el lugar de los campamentos de los sin techo, la residente Michelle Wu dijo que «las tiendas están muy cerca de los barrios residenciales, lo que ha entristecido a los residentes locales. Los vecinos y yo esperamos sinceramente que el ayuntamiento escuche y responda a nuestras voces, retirando la propuesta lo antes posible».
Ante la creciente crisis de los sin techo, el ayuntamiento tiene previsto crear un comité ad hoc para debatir la propuesta en los próximos 120 días.
Vivian La Farge y Anna Shea contribuyeron a la elaboración de este artículo.
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