PORTLAND, Maine— La costa este de Estados Unidos inició el miércoles una racha de condiciones meteorológicas que provocarían latigazos cervicales, con lluvia helada, viento y posibles peligros, en parte debido a un río atmosférico y al desarrollo de un ciclón bomba.
Lugares como el oeste de Maine podrían sufrir lluvias heladas, aguaceros, temperaturas inusualmente altas y vientos dañinos, todo en el lapso de un día, dijo Derek Schroeter, un pronosticador del Servicio Meteorológico Nacional.
Las fuertes lluvias y los vientos feroces permanecerán hasta la noche del miércoles en muchas áreas y es posible que se produzcan inundaciones en algunos lugares, dijeron los meteorólogos. Las empresas de servicios públicos también se vienen preparando para posibles cortes de energía debido a los daños causados por vientos que podrían superar los 60 mph en algunas áreas.
Uno de los factores clave que impulsa el clima, es un río atmosférico, que es una larga franja de vapor de agua, que tiene su base en Gray, Maine y que puede transportar humedad desde los trópicos a áreas ubicadas más hacia el norte, afirmó Schroeter.
La tormenta tiene la capacidad de golpear con fuerza a Nueva Inglaterra porque podría aprovechar la humedad del Océano Atlántico frente a la costa del sudeste de EE. UU. y transportarla a lugares como Maine. El estado se prepara para una «tormenta multifacética» que podría traer de dos a tres pulgadas de lluvia en algunas áreas, dijo Schroeter.
La región vio una combinación de niebla y lluvia helada ligera el martes por la noche hasta las primeras horas del miércoles.
Schroeter dijo: «Estaremos atentos a la posibilidad de inundaciones repentinas y fuertes crecidas de los arroyos a medida que las temperaturas suban a los 50 grados (10-15 grados Celsius)».
Los meteorólogos también dijeron que la tormenta tenía el potencial de incluir un proceso que los meteorólogos llaman bombogénesis o «ciclón bomba». Es decir, la rápida intensificación de un ciclón en un corto período de tiempo y tiene la capacidad de provocar lluvias intensas.
Algunas partes del noreste ya se estaban preparando para el mal tiempo.
En New Hampshire, el Centro de Avalanchas del Monte Washington emitió un boletín especial el miércoles para la cordillera Presidential, que recibió una importante nevada durante las últimas dos semanas.
«Las fuertes lluvias podrían crear condiciones de avalancha peligrosas e impredecibles en pendientes empinadas cubiertas de nieve», advirtió, lo que generaría condiciones inseguras en los cruces de arroyos, senderos para esquiar y hacer caminatas y puentes.
En Maine, algunas escuelas tuvieron que suspender sus actividades el martes, que comenzó con unos cuantos centímetros de nieve. En Vermont, se emitió un aviso de inundación desde el miércoles por la tarde hasta el jueves por la mañana.
La ciudad de Montpelier, Vermont, aconsejó a los residentes que se preparen para inundaciones leves en la zona y que eleven los objetos que guardan en los sótanos y en las zonas bajas que son propensas a inundarse. La ciudad dijo el martes que está en contacto con el Servicio Meteorológico Nacional y con Vermont Dam Safety y que » los niveles del río serán activamente monitoreados a medida que pase esta tormenta».
Las estaciones de esquí del noreste estaban preparando a los visitantes para un día potencialmente complicado el miércoles. Stratton Mountain Resort, en el sur de Vermont, publicó en su sitio web que los clientes «se aseguren bien de llevar su equipo de Gore-Tex porque va a ser un día lluvioso».
Por Patrick Whittle.
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