Tanto turistas como viajeros pueden ahora desplazarse por Roma y reciclar botellas de plástico usadas al mismo tiempo para salvar el medio ambiente.
Las personas que viajan por la antigua ciudad a través de su red de trenes subterráneos pueden cambiar plástico por créditos de tránsito en tres de las principales estaciones de metro, gracias a una iniciativa respetuosa con el medio ambiente que se está llevando a cabo en la actualidad.
Se invita a los viajeros a reciclar sus botellas de plástico en «máquinas expendedoras inversas», y los créditos que acumulan pueden utilizarse para la compra de billetes de autobús y metro. Cada botella de plástico PET reciclada vale 5 centavos; un billete estándar de 1,50 euros (USD 1,66) requeriría por lo tanto un depósito de 30 botellas de plástico.
Las máquinas, estacionadas en Cipro en la línea A del metro de Roma, Pirámide en la línea B y San Giovanni en la línea C, aceptan botellas de cualquier tamaño de hasta 2 litros (aproximadamente medio galón). Una vez colocadas a través de las ranuras de apertura de las máquinas expendedoras, las botellas son trituradas, clasificadas y posteriormente recicladas.
Dos aplicaciones para teléfonos móviles, myCicero y Tabnet, convierten los depósitos de plástico en crédito utilizable.
Según Lonely Planet, las máquinas permanecerán en funcionamiento durante una «fase de prueba» de 12 meses. Si son bien recibidas y utilizadas por los usuarios del metro de Roma, las autoridades de la ciudad ampliarán el esquema y harán que las máquinas expendedoras inversas sean un elemento más permanente.
Un video compartido por Euro News en septiembre de 2019 aludía a la magnitud de la crisis plástica de Roma. Mientras que los primeros segundos de filmación muestran un sol brillante sobre el icónico Coliseo, los siguientes muestran una fila de basureros que se desbordan con vidrio reciclable y basura plástica.
Una mujer pasa junto a los montones de basura con su bufanda sobre su nariz para protegerse del hedor. Sostiene una botella de plástico descartable en la mano.
La siguiente toma muestra una máquina expendedora inversa en acción. Según Recycling International, más de 11.000 botellas usadas fueron recicladas en solo las dos primeras semanas de agosto de 2019.
La iniciativa de reciclaje también documentó que los italianos beben más agua embotellada que cualquier otra nación europea. El consumo de agua embotellada en Italia asciende, en promedio, a 188 litros (aproximadamente 50 galones) por persona cada año. Si la iniciativa +Ricicli +Viaggi continúa atrayendo a los viajeros de Roma, podría ayudar a hacer mella en la crisis plástica de la capital italiana.
+Ricicli +Viaggi es un paso en la dirección correcta, pero Roma todavía tiene un camino por recorrer en comparación con las iniciativas de reciclaje de sus vecinos del mundo.
Reciclaje de plástico en todo el mundo
La Estadística del Año 2018 de la Royal Statistical Society reflejaba una realidad aleccionadora para la crisis plástica mundial. De un estudio realizado por la National Geographic Society, es probable que solo se haya reciclado alrededor del 9 por ciento de todo el plástico que se ha fabricado.
Jenna Jambeck, ingeniera ambiental de la Universidad de Georgia, comentó los hallazgos del estudio. «Todos sabíamos que había un aumento rápido y extremo en la producción de plástico desde 1950 hasta ahora», dijo Jambeck, «pero en realidad cuantificar el número acumulativo de todo el plástico que se ha fabricado fue bastante chocante».
Esa impactante cifra acumulada fue de 8300 millones de toneladas métricas de plástico, la mayoría de ellas de un solo uso. Además del escandalosamente bajo porcentaje de reciclaje, solo el 12 por ciento del plástico total ha sido incinerado, y el resto tardará aproximadamente 400 años en degradarse en los vertederos.
«No éramos conscientes de las implicaciones para el plástico que termina en nuestro medio ambiente hasta que ya estaba allí», reflexionó Jambeck. «Ahora tenemos una situación en la que tenemos que venir por detrás para ponernos al día», agregó.
Pero algunos países ya están liderando la lucha contra la contaminación. Según el World Atlas, el 68 por ciento de los residuos municipales de Alemania son reciclados o compostados, y Corea del Sur ha invertido el 2 por ciento de su producto interior bruto en un programa de incentivos para el reciclaje de «Crecimiento Verde».
Noruega también cuenta con un sistema de devolución de depósitos para botellas de plástico y latas, gestionado por una empresa llamada Infinitum; el 97 por ciento de todas las botellas de plástico para bebidas en Noruega se reciclan con éxito.
El reciclaje es un paso necesario en la reconsideración colectiva de nuestras necesidades de plástico de un solo uso.
El autor principal del estudio de la National Geographic Society, Roland Geyer, concluyó: «Nosotros, como sociedad, debemos considerar si vale la pena cambiar alguna conveniencia por un medio ambiente limpio y saludable».
«Para algunos productos que son muy problemáticos en el medio ambiente, tal vez pensemos en utilizar materiales diferentes», añadió. «O eliminarlos gradualmente».
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