Las sanciones del régimen chino contra exfuncionarios de la administración Trump es un recrudecimiento que debe cumplirse con una respuesta recíproca, dijo el domingo el senador Tom Cotton (R-Ark.).
«Estas sanciones contra exfuncionarios de la administración Trump son un recrudecimiento peligroso e insidioso del esfuerzo de China para influir en la política estadounidense», dijo Cotton en «Sunday Morning Futures» de Fox News.
El mismo día que asumió Joe Biden como presidente, el Partido Comunista Chino sancionó a 28 funcionarios de la administración Trump, incluido el exsecretario de Estado Mike Pompeo y el exasesor de seguridad nacional Robert O’Brien.
El expresidente Donald Trump y su administración fueron notablemente duros con China, y los funcionarios de inteligencia de Estados Unidos y los medios estatales chinos dijeron que preferían que Biden ganara las elecciones de 2020 sobre Trump.
Cotton, quien fue sancionado el año pasado, dijo que inicialmente se rió de las nuevas sanciones.
“Pero estas sanciones se aplican no solo a estos individuos, se aplican a cualquier empresa o institución que se asocie con ellos. Ahora, esto no está diseñado tanto para castigar a los funcionarios de la administración Trump por adoptar una línea dura con China, sino para enviar una advertencia a los funcionarios de la administración Biden”, dijo.
A muchos exfuncionarios del gobierno les gusta escribir memorias. China amenazó a las editoriales las cuales otorgan contratos a los funcionarios que ellos sancionaron con cortar el acceso a su mercado para todos sus libros.
Cotton pidió a la administración Biden que anuncie sanciones recíprocas. Los funcionarios de la administración Biden también deben averiguar si el embajador de China estuvo involucrado en ello y, de ser así, expulsarlo del país, dijo el senador, y agregó: “No podemos tolerar que China intente influir en los funcionarios del gobierno en los niveles más altos de Gobierno americano».
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Biden dijo el mismo día que se anunciaron las sanciones que el momento de la imposición «aparentemente es un intento de jugar con las divisiones partidistas».
“Los estadounidenses de ambos partidos deberían criticar este movimiento cínico e improductivo. El presidente Biden espera trabajar con los líderes de ambos partidos en posicionar a Estados Unidos para competir con China”, agregó.
La Casa Blanca no ha realizado comentarios sobre las sanciones desde entonces. La Casa Blanca no respondió a una solicitud de comentarios el domingo.
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