Las autoridades han advertido que es probable que en Italia se produzca un aumento de los casos del nuevo coronavirus (también conocido como la enfermedad COVID-19) en los próximos días, ya que el 23 de febrero se confirmó la tercera muerte por coronavirus en el país.
Italia está luchando para contener el mayor brote de coronavirus en Europa, cerrando las ciudades más afectadas y prohibiendo los eventos públicos en gran parte del norte en medio de un aumento en el número de muertes con más de 130 casos reportados desde el viernes.
Las autoridades de las regiones ricas de Lombardía y Véneto, que son el centro del brote, ordenaron a las escuelas y universidades que cerraran por lo menos una semana. También ordenaron que se cerraran los museos y los cines, y se suspendieron los dos últimos días del Carnaval de Venecia.
La unidad de protección civil dijo que el número de casos del virus altamente contagioso ascendía a 152, de los cuales 149 salieron a la luz el viernes.
El Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) dijo en un comunicado el domingo que está monitoreando de cerca la situación y trabajando con las autoridades italianas para limitar la transmisión local sostenida.
La agencia advirtió de un aumento de los casos de coronavirus en el país, y potencialmente dentro de la UE, en los próximos días.
«Como la situación está evolucionando rápidamente, se esperan más casos en Italia, y posiblemente en la UE, en los próximos días», dijo el ECDC en un comunicado.
El ECDC agregó que publicará una evaluación de riesgo actualizada el lunes después de evaluar el impacto que los grupos afectados en el norte de Italia tendrán en el riesgo general para la UE y el Espacio Económico Europeo (EEE).
El riesgo asociado con el virus para las personas del Reino Unido y la UE/EEE se considera actualmente de bajo a moderado.
Se produjo una tercera muerte en Italia el domingo, una anciana de la ciudad de Crema, al este de Milán, que también sufría de cáncer. Las otras dos muertes por coronavirus fueron pacientes ancianos del norte de Italia.
El primer ministro Giuseppe Conte dijo a la emisora estatal RAI que estaba sorprendido por esta «explosión de casos» y advirtió que las cifras probablemente aumentarían en los próximos días. «Haremos todo lo que podamos para contener el contagio», dijo.
Casi una docena de ciudades de las regiones septentrionales de Lombardía y Véneto (con una población combinada de unos 50,000 habitantes) han sido puestas en cuarentena, instando a la población local a permanecer en sus casas. Se requiere a los habitantes de estas localidades un permiso especial para entrar o salir de las áreas designadas.
«Estas medidas extraordinarias en el norte de Italia son esenciales para limitar el brote y tal vez sea necesario reproducirlas en otras comunidades en los próximos días», dijo la CEPD.
Reuters contribuyó a la elaboración de este artículo.
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