Un abogado del sospechoso del asalto al Capitolio conocido como el «chamán de QAnon» dijo que está trabajando «en serio» en un acuerdo con los fiscales dada la frágil salud mental de su cliente.
El residente de Arizona y veterano de la Marina Jacob Chansley, de 33 años, alias Jake Angeli, fue diagnosticado recientemente por psicólogos de la Oficina Federal de Prisiones con esquizofrenia, trastorno bipolar y otras enfermedades mentales.
«Las negociaciones con respecto a [Chansley] se están llevando a cabo con seriedad, pero hay muchas partes en movimiento, problemas de salud, logística y engorrosos protocolos COVID involucrados», dijo el abogado Albert Watkins, con sede en San Luis, en un correo electrónico el lunes.
«Los problemas de salud que está experimentando el Sr. Chansley también juegan un papel en las iniciativas en este sentido», añadió Watkins.
«Se ha producido un cambio significativo en el diálogo, de forma que el gobierno reconoce ahora que el señor Chansley no fue un líder o planificador de ningún aspecto del 6 de enero y que no fue violento o destructivo en ningún aspecto. En conjunto, estos hechos han alterado la mezcla».
Al parecer, Chansley ha pasado casi seis meses en régimen de aislamiento en una prisión federal de Virginia después de entregarse a las autoridades tres días después de la protesta de Washington.
El 8 de enero, un gran jurado federal presentó cargos contra Chansley por desorden civil, obstrucción de un procedimiento oficial, entrada y permanencia en un edificio restringido, conducta disruptiva y desordenada en un edificio restringido, entrada violenta y conducta desordenada en un edificio del Capitolio, y desfile, manifestación o piquete en un edificio del Capitolio.
La denuncia penal alega que Chansley «entró o permaneció voluntariamente y a sabiendas en el piso de una Cámara del Congreso o en un guardarropa o vestíbulo adyacente a ese piso, sin autorización para hacerlo».
Chansley, que llevaba un tocado con cuernos y pieles de coyote con el torso desnudo cubierto de tatuajes, fue fotografiado dentro de las cámaras del Senado dirigiendo a un grupo de manifestantes en una oración. Su autodenominado título de «chamán de QAnon» se debe a su creencia personal de que los pedófilos satánicos dirigen una red de tráfico sexual de niños y conspiraron contra el presidente Donald Trump mientras estuvo en el cargo.
Más de 500 manifestantes han sido acusados en relación con el asalto al Capitolio, muchos de los cuales han permanecido bajo custodia sin fianza.
En una entrevista anterior, Watkins dijo a The Epoch Times que las condiciones a las que se enfrenta Chansley en prisión son un «tratamiento similar al de un gulag».
«Su salud mental y su bienestar emocional están significativamente amenazados», dijo Watkins. «No era violento ni destructivo de ninguna manera. No estaba armado. No amenazó. No hay un final a la vista. Su único contacto fiable y no supervisado con el mundo exterior es su abogado: yo. Está solo».
El 15 de julio, la organización sin ánimo de lucro Look Ahead America (LAA) y su rama local, Look Ahead Arizona, celebraron una concentración en Scottsdale (Arizona) a la que asistieron más de 250 conservadores pidiendo la liberación de Chansley y otros «presos políticos».
El 17 de julio se celebró una segunda concentración de LAA frente al Departamento de Justicia de EE. UU. en Washington, D.C.
Oradores como el representante Paul Gosar (R-Ariz.), el abogado John Pierce, la líder activista Cara Castronuova y el padre de uno de los detenidos se unieron al director general de LAA, Matt Braynard, para dirigirse a la multitud.
«Si para el 17 de julio los presos siguen detenidos en condiciones deplorables y abusivas, sin cargos o sin acceso a una fianza razonable, nos concentraremos en esa prisión y alzaremos nuestras voces con cantos patrióticos para que sepan que estamos con ellos», dijo Braynard en una declaración (pdf) en la que anunciaba la concentración.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
