La secretaria de Energía de EE. UU., Jennifer Granholm, envió una carta al panel de energía de la Cámara de Representantes en la que advierte que la presión del Partido Republicano para añadir estipulaciones a la retirada de petróleo de las reservas estratégicas perjudicará a los estadounidenses y contribuirá a un aumento del precio de la gasolina.
A principios de este mes, la representante Cathy McMorris Rodgers (R-Wash.) presentó la Ley de Respuesta a la Producción Estratégica, que condicionará la autoridad del presidente Joe Biden para retirar petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR, por sus siglos en inglés) a que el presidente abra más tierras federales a la perforación de petróleo y gas. Los republicanos de la Cámara de Representantes votarán en breve. Rodgers preside el Comité de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes.
«Este proyecto de ley debilitaría significativamente esta herramienta fundamental para la seguridad energética, lo que provocaría más escasez de suministro de petróleo en tiempos de crisis y un aumento de los precios de la gasolina para los estadounidenses», dijo Granholm en la carta al comité, según Reuters. En un correo electrónico enviado al medio, Rodgers dijo que el comité está revisando la carta.
Granholm también citó estimaciones del Departamento del Tesoro que afirman que el uso de la Reserva Estratégica de Petróleo por parte de la Administración Biden supuso una reducción del precio de la gasolina en EE. UU. de entre 0.17 y 0.42 dólares por galón.
Los precios al público de la gasolina en Estados Unidos pasaron de 3.701 dólares por galón en la semana que terminó el 28 de febrero de 2022 a un máximo de 5.107 dólares por galón en la semana que terminó el 13 de junio. La liberación de Biden de 180 millones de barriles de la SPR comenzó en marzo. El 9 de enero de 2023, el precio promedio de la gasolina era de 3.366 dólares por galón.
Aunque los precios de la gasolina han caído desde el pico de junio, todavía están por encima de un 35% en comparación con el precio de 2.478 dólares por galón a finales de enero de 2021.
Se ha culpado a las políticas de la Administración de los elevados precios de la gasolina. Por ejemplo, Biden canceló el proyecto del oleoducto Keystone, reactivado por el expresidente Donald Trump. Se esperaba que el proyecto transportara 800,000 barriles de petróleo al día a Estados Unidos.
Biden ha concedido el menor número de acres de tierra para el arrendamiento federal de petróleo y gas desde finales de la década de 1940. En junio del año pasado, el Departamento de Interior anunció un plan que daba a la agencia la opción de no conceder nuevos arrendamientos hasta finales de 2028.
Y en abril de 2022, la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA, por sus siglas en inglés) decidió rescindir las exenciones que permitían a más de 30 refinerías evitar la mezcla de biocombustibles renovables en la gasolina y el diésel. Se dice que esto ha contribuido a un aumento de los costes para las refinerías y a una reducción de la producción.
Bajas reservas de la SPR, bloqueo de las ventas de la SPR a China
La liberación de reservas de la SPR por parte de Biden ha sido muy criticada por los republicanos, que argumentan que es necesario hacer más para impulsar la perforación nacional. La Administración Biden insiste en que su política de arrendamiento de petróleo y gas es una cuestión a largo plazo, mientras que la interrupción del suministro requiere una solución a corto plazo.
Desde 2000, la Reserva Estratégica de Petróleo se ha mantenido normalmente por encima de los 600 millones de barriles. Sin embargo, la liberación de la SPR de la Administración Biden lo ha agotado hasta situarla por debajo de los 400 millones de barriles a finales del año pasado, lo que supone el nivel más bajo desde la década de 1980.
Para proteger la reserva de la SPR, Rodgers también presentó la «Ley para proteger la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos (SPR) frente a China». Fue aprobada por la Cámara de Representantes por un margen de 331-97 el 12 de enero.
El proyecto de ley prohíbe la venta de petróleo de la reserva a cualquier entidad que esté bajo el control, la influencia o la propiedad del Partido Comunista Chino.
«No hace falta decirlo: sencillamente, no debemos permitir que nuestro petróleo se exporte al Partido Comunista Chino. Un sector energético fuerte es una defensa nacional fuerte, y no podemos permitir que esta administración agote nuestra SPR hasta mínimos históricos vendiendo barriles a uno de los adversarios de nuestra nación», declaró en un comunicado de prensa el 12 de enero el representante Dan Newhouse (R-Wash.), copatrocinador del proyecto de ley en la Cámara de Representantes.
Oposición gubernamental
La «Ley para proteger la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos (SPR) frente a China» había recibido un gran apoyo de los demócratas, con más de la mitad de la Cámara de Representantes votando a favor.
Sin embargo, el gobierno de Biden se ha opuesto, y el portavoz de la Casa Blanca, Andrew Bates, la ha calificado de medida «retrógrada» y de intento del Partido Republicano de subir los precios de la gasolina para hacer quedar mal al presidente.
En una entrevista con NTD, el representante Gary Palmer (R-Ala.) rechazó tales acusaciones.
«Es otro ejemplo de lo poco que sabe [Biden] de economía y principios de mercado», dijo Palmer. «Cuando estás enviando tu crudo a otro país donde va a ser refinado y consumido allí y no vuelve aquí, se reduce la oferta del mercado, lo que aumenta el precio».
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