La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, advirtió que se prevé que Estados Unidos alcance su límite de endeudamiento de 31.4 billones de dólares la próxima semana, de acuerdo con una carta que envió el viernes a los líderes del Congreso.
En una carta (pdf) dirigida al presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R- Calif.), Yellen escribió que, según las proyecciones, el país alcanzará el límite de endeudamiento el 19 de enero. Si en ese plazo el Congreso no actúa para elevar el límite de endeudamiento, el Tesoro tendría que tomar «ciertas medidas extraordinarias» para evitar el incumplimiento de sus obligaciones.
Entre las medidas que podría aplicar el Departamento del Tesoro figuran el rescate temporal y la suspensión de nuevas inversiones del Fondo de Prestaciones Sanitarias para Jubilados del Servicio Postal, así como del Fondo de Administración Pública, Jubilación e Invalidez. El Departamento también suspendería las inversiones del Plan de Ahorro Thrift del Fondo de Inversión en Valores Gubernamentales del Sistema de Retiro de Empleados Federales (Government Securities Investment Fund del Federal Employees Retirement System Thrift Savings).
«El incumplimiento de las obligaciones del Gobierno causaría un daño irreparable a la economía estadounidense, a los medios de subsistencia de todos los estadounidenses y a la estabilidad financiera mundial», escribió Yellen en la misiva, que se estima desencadenará debates y nuevas propuestas en el Congreso sobre la conveniencia de aprobar un aumento del límite de la deuda. Algunos congresistas republicanos indicaron que aceptarían un proyecto de ley para elevar el límite de la deuda a fin de aprobar recortes adicionales del gasto.
Yellen señaló que el Tesoro no puede estimar durante cuánto tiempo las medidas extraordinarias permitirán al gobierno federal pagar sus obligaciones, pero afirmó que «es poco probable que el efectivo y las medidas extraordinarias se agoten antes de principios de junio».
Hasta el miércoles, los datos del Tesoro mostraban que la deuda federal de EE. UU. se situaba USD 78,000 millones por debajo del límite, con un saldo de caja del Tesoro de USD 346,400 millones. El jueves, el Departamento informó de un déficit de USD 85.000 millones en diciembre, debido a la disminución de los ingresos y el aumento de los desembolsos, en particular por los costos de los intereses de la deuda.
«Por lo tanto, es fundamental que el Congreso actúe de manera oportuna para aumentar o suspender el límite de la deuda. El incumplimiento de las obligaciones del Gobierno causaría un daño irreparable a la economía estadounidense, a los medios de subsistencia de todos los estadounidenses y a la estabilidad financiera mundial», escribió también Yellen a McCarthy. Cartas similares fueron enviadas a los principales líderes del Senado y de la Cámara de Representantes.
Qué significa
McCarthy y otros altos cargos republicanos de la Cámara de Representantes dijeron que vincularían las medidas para hacer frente al techo de la deuda a recortes del gasto, aunque es posible que tales medidas no se aprueben en el Senado, donde los demócratas tienen la mayoría.
«Si usted va a pedir un aumento del límite, en algún momento usted tiene que sentarse y preguntarse ¿por qué estamos llegando al límite? ¿Por qué estamos llegando al límite de la tarjeta de crédito?», dijo a la prensa esta semana el líder de la mayoría en la Cámara de Representantes, el republicano Steve Scalise.
A mediados de año, Washington podría tener que dejar de pedir prestado y depender únicamente de los ingresos fiscales para pagar sus facturas. Dado que el Tesoro toma prestado cerca de 20 céntimos por cada dólar que gasta, en ese momento Washington podría empezar a incumplir los pagos adeudados a los prestamistas, a los ciudadanos o a ambos.
Yellen y otros expertos en política económica han pedido a Washington que elimine el límite de la deuda porque equivale a un sello burocrático sobre decisiones ya tomadas. De otra parte, el techo de deuda cuenta con el apoyo de legisladores demócratas y republicanos por igual, y ambos lo han utilizado como palanca cuando su partido no controla la Casa Blanca, por lo que es poco probable que se elimine.
«LOS REPUBLICANOS PUEDEN RECUPERAR CASI TODO (…) SIMPLEMENTE JUGANDO DURO EN LAS PRÓXIMAS NEGOCIACIONES SOBRE EL TECHO DE LA DEUDA», escribió el expresidente Donald Trump en Truth Social a principios de esta semana.
Tras hacerse pública la carta de Yellen, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo a los periodistas que el límite de deuda debería elevarse sin condiciones.
«Debería hacerse de forma bipartidista y debe hacerse sin condiciones. Eso es importante aquí», dijo Jean-Pierre el viernes.
Algunos analistas proponen que el Tesoro eluda la crisis acuñando una moneda de platino multimillonaria e ingresándola en la cuenta del Gobierno, una idea que se considera un truco descabellado. Otros argumentan que el propio techo de la deuda viola la Constitución estadounidense. Si el gobierno de Biden invocara ese argumento, se produciría un desafío legal.
Los representantes republicanos de la Cámara utilizaron con éxito el techo de la deuda en un enfrentamiento en 2011, logrando imponer al entonces presidente Barack Obama fuertes límites al gasto discrecional. Los topes de gasto se mantuvieron durante la mayor parte del resto de la década.
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