El selenio desempeña un factor fundamental en innumerables procesos metabólicos. Este micronutriente protege al cuerpo de los contaminantes ambientales, el estrés oxidativo y los efectos secundarios no deseados de los medicamentos. De hecho, el sistema inmunológico depende del selenio de la dieta para responder adecuadamente a los intrusos externos.
Los niveles bajos de selenio hacen que nuestros sistemas fisiológicos sufran. Los tejidos del cerebro y el sistema endocrino utilizan el mineral para funcionar correctamente. Todos deseamos salud cognitiva y hormonal, reducción del dolor y mejoras físicas —por lo tanto, es importante comprender los efectos que tiene el selenio en nuestro bienestar general.
Beneficios para la salud del selenio
La selenocisteína y las selenoproteínas son formas orgánicas de selenio presentes en nuestro cuerpo. «Las selenoproteínas actúan como protectores antioxidantes para la regulación de la tiroides, la mejora de la fertilidad masculina y las acciones antiinflamatorias», dice una revisión publicada en la revista Inflammopharmacology.
Al regular cantidades excesivas de radicales libres ante la aparición de una lesión, estas proteínas controlan las citoquinas inflamatorias y reducen el estrés oxidativo, lo que las convierte en clave para los procesos de cicatrización de heridas.
Un estudio de cohortes publicado recientemente fue el tema de un artículo escrito por la reportera de salud del Epoch Times Jennifer Sweenie y profundiza en la conexión entre el selenio y la enfermedad de Parkinson. Además, este micronutriente también puede contrarrestar la enfermedad tiroidea, el Alzheimer y el cáncer.
Un estudio de cohortes publicado recientemente fue el tema de un artículo escrito por la reportera de salud del Epoch Times Jennifer Sweenie y en él se profundiza la conexión entre el selenio y la enfermedad de Parkinson. Además, este micronutriente también puede contrarrestar las enfermedades de la tiroides, el Alzheimer y el cáncer.
Glándula Tiroides y Reproducción Humana
Como uno de los oligoelementos esenciales, el selenio estabiliza los desequilibrios hormonales, que a menudo afectan a la fertilidad. Desafortunadamente, el mineral rara vez se estudia en relación con el sistema endocrino y la infertilidad —una opinión que plantean los investigadores en una revisión de 2021. Destacan la importancia de establecer exactamente esa conexión, ya que la deficiencia de selenio puede provocar varios trastornos de la tiroides, incluidos problemas de reproducción.
Según el estudio, los datos sugieren «que la suplementación con Se [selenio] es beneficiosa para restaurar la función ovárica y minimizar las complicaciones relacionadas con el embarazo». Asimismo, según el estudio, la suplementación con selenio mejora la fertilidad del esperma.
Otra revisión de 2021 publicada en la revista Molecules confirma esos hallazgos y llama al oligoelemento «un pilar para el funcionamiento de la tiroides». Los investigadores también señalan el potencial del selenio para tener efectos positivos sobre los trastornos autoinmunes de la tiroides, como la enfermedad de Graves y la tiroiditis de Hashimoto.
Un artículo de 2023 publicado en la revista Frontiers in Endocrinology indica que el tratamiento con selenio aumenta «la calidad de vida» de los pacientes con enfermedad de Graves y retrasa el avance del trastorno.
Las personas que padecen tiroiditis de Hashimoto también deberían beneficiarse de los suplementos de selenio. Según el artículo, el elemento está relacionado con una «mejor estructura ecográfica de la tiroides» y niveles más bajos de peroxidasa tiroidea, un tipo de anticuerpo tiroideo que puede formarse en enfermedades autoinmunes de la tiroides.
Inmunoestimulantes y salud cerebral
Los beneficios del llamado «elemento de la vida» van más allá. Una revisión de 2023 destaca el importante factor del micronutriente en el apoyo a las funciones fisiológicas esenciales.
La revisión señala las capacidades inmunoestimulantes del selenio, pero también destaca sus efectos positivos sobre «la función cerebral, las enfermedades cardiovasculares (ECV), el cáncer y las enfermedades causadas por metales pesados».
Los científicos descubrieron que el selenio muestra sus cualidades antioxidantes específicamente en órganos como el corazón, el hígado y los riñones, así como en la glándula tiroides y el cerebro, al eliminar los radicales libres producidos por las mitocondrias.
Dos pequeños estudios de cohortes citados en otra revisión indicaron que el selenio plasmático «se ha informado que es más bajo en pacientes con EA [enfermedad de Altzheimer] en comparación con ancianos sanos». Esto confirma los hallazgos de un estudio japonés anterior en animales que señaló que una deficiencia de selenio «posiblemente podría promover la aparición y progresión de la demencia de la enfermedad de Alzheimer (EA)».
Sistemas fisiológicos y enfermedades intestinales
La Revista Internacional de Ciencia Molecular publicó un artículo que investiga el impacto del selenio en las enfermedades intestinales. Los investigadores afirman que el elemento alivia la enfermedad inflamatoria intestinal. Además, los organismos pueden absorber fácilmente el micronutriente para su utilización inmediata.
Asimismo, los estudios epidemiológicos, señala el artículo, demostraron que los pacientes que padecen colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn presentan niveles séricos reducidos de selenio.
Tanto la colitis ulcerosa como la enfermedad de Crohn son tipos de enfermedades del intestino irritable. Mientras que la colitis ulcerosa se limita característicamente a la inflamación del colon, la enfermedad de Crohn afecta a todo el tracto digestivo, incluidas las vías gastrointestinales superiores.
Un estudio piloto enfatizó la importancia de la suplementación dietética con selenio para aliviar la colitis. Los modelos animales relacionaron la deficiencia de selenio con la pérdida de capas epiteliales y una inflamación grave del colon.
Los investigadores señalaron estudios adicionales in vitro e in vivo que encuentran que el selenio podría ser un «fármaco terapéutico potencial» para pacientes que padecen la enfermedad de Crohn, ya que la evidencia clínica reveló que estos individuos muestran niveles bajos de selenio en la sangre.
Cualidades anticancerígenas del selenio
El selenio se estudia durante décadas. Ya en 1997, un ensayo clínico con 41 pacientes con cáncer demostró que el elemento podía proteger sus riñones de los efectos secundarios del fármaco quimioterapéutico cisplatino y, al mismo tiempo, reducir la supresión de la médula ósea.
En un estudio realizado en animales en 2023, los investigadores observaron los efectos anticancerígenos del selenito de sodio en dosis altas, que es la forma inorgánica de selenio producida en laboratorio, con respecto al cáncer de ovario. En este caso, el selenito de sodio se administró por vía intravenosa. Los resultados indicaron que el tratamiento indujo «muerte celular en células de cáncer de ovario».
También se descubrió que el selenio y las variantes genéticas de las selenoproteínas influyen en el riesgo de cáncer colorrectal. Un artículo de revista de 2012 destaca el papel clave del elemento en la salud epitelial del colon y, en consecuencia, la capacidad de combatir el estrés microbiano y oxidativo intestinal.
Los investigadores llegan incluso a afirmar que una ingesta baja de selenio podría «conducir a un mayor riesgo de lesiones preneoplásicas».
Advertencias sobre selenio y educación nutricional
Ya sea que se trate de la cualidad antioxidante, antiinflamatoria, anticancerígena o productora de hormona tiroidea del selenio, todos podríamos beneficiarnos al controlar nuestros niveles de selenio. Sobre todo porque demasiado selenio puede provocar reacciones adversas.
Los investigadores que elogian el elemento en su publicación en la revista Advances in Clinical and Experimental Medicine también hacen una advertencia: «El estrecho rango entre las dosis terapéuticas y tóxicas de selenio, así como la dependencia de su efecto de la forma aplicada, la dosis y el método de tratamiento, hacen que la elección del suplemento más eficaz sea una cuestión muy compleja».
Riesgo de diabetes II
Un artículo de The Lancet enfatizó que aquellas personas con niveles de selenio altos o adecuados no deben tomar suplementos de este micronutriente. Sólo las personas con niveles bajos de selenio se benefician de la ingesta suplementaria.
Aunque estudios anteriores a menudo relacionaron los niveles altos de selenio con un aumento potencial en el riesgo de diabetes, una revisión de 2022 afirma que «estudios clínicos y en animales recientes indicaron que tanto la ingesta insuficiente como excesiva de Selenio puede aumentar el riesgo de diabetes tipo 2…»
Elija su opción.
Personalmente, sigo con el enfoque de «todo con moderación». Una dieta equilibrada incluye selenio en la dieta, que es importante para la salud humana en muchos sentidos, como se describe en detalle en otra revisión.
Es posible que desee pedirle a su médico que controle sus niveles de selenio la próxima vez que se haga un análisis de sangre. También puede consultar las dosis diarias recomendadas en el sitio web de los Institutos Nacionales de Salud.
Fuentes de selenio dietético
Es imperativo tener en cuenta que el selenio no se puede sintetizar en nuestro cuerpo, sino que debe absorberse en el tracto gastrointestinal a través de procesos digestivos, ya sea a través de los alimentos o de suplementos. Según un artículo del American Journal of Physiology, el hígado desempeña un factor crucial, «debido a [su] alta capacidad de extracción y al hecho de que es el primer órgano por el que pasa la sangre del intestino».
Por lo tanto, infórmese sobre cómo comer de manera saludable o pregúntele a su médico si un suplemento de selenio sería beneficioso para usted.
El selenio se encuentra en los cereales y los productos lácteos, la carne y los huevos, así como en los mariscos.
Una sola nuez de Brasil puede satisfacer la dosis diaria recomendada. Otras fuentes nutricionales de selenio incluyen la remolacha, una variedad de nueces, calabazas, brotes, pimienta negra y hongos shitake.
Hierbas ricas en selenio
En un análisis de 26 hierbas y plantas aromáticas por su contenido de selenio, un equipo de científicos turcos destacó la albahaca dulce como la ganadora en su publicación en la revista Natural Product Communications.
La hierba tradicional china dong quai, también conocida por su nombre botánico Angelica sinensis, y comúnmente llamada ginseng femenino, fue el tema de un estudio de 2024. Se extrajeron nanopartículas de selenio modificadas de los polisacáridos de la planta y confirmaron las cualidades antioxidantes del selenio mencionadas anteriormente y también sus efectos sobre «los niveles de estrés oxidativo y la inhibición de la producción de inflamación», lo que lo hace protector para el hígado.
Otras hierbas y especias que muestran cualidades medicinales del selenio son la verdolaga, las semillas de hinojo, el romero, la cúrcuma y la eucommia.
Tomar decisiones culinarias inteligentes y deliciosas, como agregar albahaca dulce a su próxima ensalada, romero a un plato de pollo o cúrcuma a su café con leche matutino, ayudará con la ingesta adicional de selenio si es necesario.
Hechos históricos del Selenio
El Selenio fue descubierto por primera vez por el «padre de la química sueca» Jöns Jacob Berzelius en 1817. Nombró al elemento semimetálico en honor a Selènè, el nombre griego de la luna.
Aunque rara vez se encuentra en su forma elemental, los investigadores descubrieron que el selenio era un compuesto activo en el forraje y los cereales de los animales en la década de 1930.
Los estudios realizados en animales de laboratorio indicaron en 1936 que los altos niveles dietéticos del elemento inhibían el crecimiento, provocaban vómitos y espasmos, disnea y posible muerte. Los agricultores recibieron una respuesta sobre por qué su ganado sufría niveles elevados de selenio; los animales comían demasiadas plantas del género Astragalus.
En 1937, se llevó a cabo un estudio de campo en la población rural de Wyoming, Dakota del Sur y Nebraska, investigando lo que el título llama un «Problema del selenio en relación con la salud pública». Las conclusiones fueron indefinibles y los investigadores no descubrieron ninguna relación causal entre la orina enriquecida con selenio y la mala salud de los participantes.
Sin embargo, se mantuvo la narrativa de que el selenio no solo causaba enfermedades alcalinas en el ganado sino también síntomas de envenenamiento en humanos.
Hasta 1958, cuando el científico Klaus Schwarz y su colega Calvin Foltz investigaron los efectos del selenio en la salud de ratas y observaron en su publicación que el elemento prevenía la necrosis hepática. Estos hallazgos positivos fueron confirmados posteriormente en otro estudio con animales.
A partir de entonces, la investigación sobre el selenio y sus efectos en la salud humana fue más concertada y aún continúa.
Nota: Este artículo no pretende diagnosticar ni tratar. Siempre consulte a su médico antes de comenzar un programa de suplementos.
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