El senador J.D. Vance (R-Ohio) propuso que se ponga en marcha un Programa de Protección del Salario, también conocido como PPP, para los residentes de East Palestine, Ohio, tras el reciente descarrilamiento de un tren y la ola de desindustrialización.
En un artículo de opinión para The Washington Post publicado el 26 de febrero, el senador republicano señala que East Palestine es una pequeña ciudad de unos 5000 habitantes con una renta media de 44,498 dólares.
«Como muchos pueblos cercanos a Youngstown, Ohio, ha sufrido sustancialmente la ola de desindustrialización que vio partir millones de empleos a China, México y otros países», escribió Vance.
«Debido a ello, durante los últimos años, las preocupaciones de los residentes se han centrado en cuestiones de desarrollo económico», escribió Vance. «Cada uno de esos retos se ha vuelto mucho más difícil».
Vance señaló el reciente descarrilamiento de un tren de mercancías operado por Norfolk Southern el 3 de febrero, que provocó un vertido de productos químicos tóxicos y una quema de sustancias químicas que dejó un penacho de humo negro sobre la zona. Esto ha suscitado preocupación por las consecuencias a largo plazo para la salud de los residentes.
Según el senador, esto se ha sumado a una economía local ya de por sí estresada que «aleja a la gente y al capital» de la ciudad, lo que repercute en los negocios locales.
Por eso propuso introducir un programa al estilo del PPP de la época de la pandemia, que concedería a las empresas los recursos necesarios para mantenerse a flote, permitiéndoles pagar a los empleados y el alquiler.
«La ciudad de la buena gente sufrirá mucho».
Vance también señaló que la pequeña comunidad necesita inversiones a largo plazo tanto del gobierno federal como de Norfolk Southern Railway.
«Sin una refinanciación especial, los propietarios de viviendas quedarán bajo el agua a medida que la huida de la comunidad haga bajar los precios de la vivienda, diezmando la base impositiva de la que dependen las escuelas locales y los servicios públicos. Las granjas necesitarán ayuda directa», escribió el senador. «Las escuelas con escasos fondos necesitarán ayuda. East Palestine necesitará su propia versión del Programa de Protección de Pago para proteger a los trabajadores y las empresas que perdieron sus medios de subsistencia por las decisiones de otros».
«De lo contrario, todo un pueblo de buena gente sufrirá enormemente sin tener culpa alguna», concluyó Vance.
El programa PPP se creó en virtud de la Ley CARES en marzo de 2020, en plena pandemia de COVID-19, para ayudar a mantener a flote a los estadounidenses durante la pandemia y los posteriores cierres patronales.
Sin embargo, aunque el programa salvó unos 3 millones de empleos en su punto álgido en el segundo trimestre de 2020, según investigadores del Banco de la Reserva Federal de San Luis, también estuvo plagado de fraudes.
Unos 45,600 millones de dólares en prestaciones por desempleo concedidas por el Gobierno fueron robados fraudulentamente por delincuentes entre marzo de 2020 y abril de 2022, de acuerdo a un informe de septiembre de 2022 (pdf) de la Oficina del Inspector General (OIG) del Departamento de Trabajo.
Además, algunos expertos creen que el programa PPP junto con los miles de millones de dólares en cheques de estímulo pueden haber contribuido a la actual economía de alta inflación.
Los residentes de East Palestina demandan al Estado
El artículo de opinión de Vance se publicó después de que los residentes de East Palestine presentaran una demanda colectiva contra Norfolk Southern, alegando que las «acciones negligentes» del operador ferroviario tras el descarrilamiento de principios de este mes crearon una «catástrofe medioambiental».
En una declaración del 24 de febrero, el bufete de abogados Johnson and Johnson, que presentó la demanda ante el Tribunal de Distrito de EE. UU. para el Distrito Norte de Ohio, División Este en Youngstown, en nombre de los residentes, dijo que las acciones de Norfolk Southern tras el descarrilamiento equivalen a «negligencia e indiferencia temeraria».
La demanda pretende obtener una indemnización por daños y perjuicios en nombre de todas las empresas y residentes/individuos perjudicados situados en un radio de 30 millas del descarrilamiento, establece protocolos de pruebas y limpieza, crea un fondo de seguimiento médico y solicita medidas cautelares de supervisión de los programas de seguridad y cumplimiento de Norfolk Southern.
«El equivocado esfuerzo de limpieza de Norfolk Southern descargó un agente químico de guerra sobre los residentes de East Palestine», dijo el abogado Nils Johnson, Jr. «La negligencia de la empresa no solo condujo a este trágico desastre, sino que amplificó considerablemente las consecuencias, y la respuesta tardía y las acciones eventuales de Norfolk Southern solo echaron más leña al fuego».
«La magnitud de la destrucción es asombrosa. Es posible que el verdadero alcance de los daños no se conozca hasta dentro de unos años. Norfolk Southern tiene que asumir su responsabilidad ahora y proporcionar a la gente de East Palestine y del condado de Columbiana los recursos que necesitan para un futuro saludable», añadió Johnson.
Norfolk Southern no respondió a la petición de The Epoch Times de hacer comentarios sobre la demanda.
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