El senador demócrata del estado de Illinois, Martin Sandoval, involucrado en una investigación sobre soborno y corrupción federal, comunicó su próxima renuncia.
Sandoval envió una carta a la Junta de Elecciones del Estado de Illinois anunciando que renunciaba a partir del 1 de enero de 2020.
«Desde 2003, ha sido un honor de por vida servir al Estado de Illinois y luchar en nombre de la buena gente del lado suroeste de Chicago/Suburban West Cook», escribió Sandoval.
«El respeto por mis electores y el Senado me ha convencido de que esta acción es necesaria para proceder sin distracciones en la importante labor que debe realizarse en el futuro para las familias trabajadoras de todo el estado de Illinois».
Sandoval además señaló que renunciaba «con el corazón apesadumbrado».
Según The Southern Illinoisan, al retrasar la renuncia hasta el próximo año, el senador podría recibir el pago completo de diciembre y enero.
Sandoval, de 55 años, había renunciado el mes pasado como presidente del Comité de Transporte, después de que su oficina fuera allanada.
Según una orden de registro del FBI (pdf), los agentes le confiscaron varios iPhones, computadoras y unidades USB, junto con otros artículos.
«La orden de arresto no redactada proporciona otro vistazo a la vasta red de actores involucrados en la corrupta máquina demócrata de Chicago, que dirige este estado», dijo el presidente del Partido Republicano de Illinois, Tim Schneider, en una declaración en ese momento.
«Desde otro aliado cercano de Madigan hasta la persona designada por Pritzker’s Tollway, no hay prácticamente ningún nivel en el gobierno estatal y local del Condado de Cook que no esté repleto de Demócratas que busquen fastidiar a los contribuyentes. El Partido Demócrata de Illinois es una banda criminal que se hace pasar por un partido político», añadió.
Sandoval no ha sido acusado de ningún delito. Es uno de los aliados del presidente de la Cámara de Representantes del Estado, el demócrata Mike Madigan, que será investigado por agentes federales.
En cambio el representante estatal demócrata Luis Arroyo renunció el 1 de noviembre, sólo unas horas antes de que se programara un comité para decidir si lo expulsaba de la Asamblea General. En el mismo caso, el senador estatal Terry Link ayudó al FBI como un informante, según la prensa local, y el exconcejal Daniel Solís también trabajó como informante después de que los agentes construyeron un caso en su contra.
El senador demócrata estatal Tom Cullerton, otro funcionario involucrado en la investigación, fue acusado de malversación de fondos federales el 2 de agosto y ha permanecido en el cargo a pesar de los llamamientos de los Republicanos para que renuncie.
Además fue acusado de extorsión el concejal demócrata Ed Burke, mientras que la oficina de la concejal Carrie Austin, quien todavía no ha sido acusada, fue allanada. El ex concejal Michael Zalewski también está siendo investigado y contrató abogados para que lo representen.
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