El senador Ron Johnson (R-Wis.) dijo esta semana que quizás no sea el mejor candidato republicano para el actual ciclo electoral, indicando cómo está siendo objeto de críticas.
«Quiero asegurarme de que este escaño del Senado de Estados Unidos se mantenga en manos republicanas», dijo Johnson a la presentadora de radio, Lisa Boothe.
«Usted ve lo que los medios de comunicación están haciendo conmigo. Quizás yo no sea el mejor candidato. Yo no me presentaría si no creyera que puedo ganar, si no creyera que soy la mejor persona para poder ganar», añadió.
Johnson, de 66 años, entró en el Senado en 2011 y ganó la reelección en 2016.
No obstante ha aplazado la declaración de una candidatura para otro mandato, congelando de hecho el panorama republicano, a pesar de que recibió un respaldo del expresidente Donald Trump.
«Aunque todavía él no ha anunciado que se presenta y ciertamente espero que lo haga, estoy dando mi completo y total respaldo al senador Ron Johnson, de Wisconsin. Él es valiente, es audaz, ama a nuestro país, a nuestros militares y a nuestros veteranos. Protegerá nuestra Segunda Enmienda y todo lo que representamos. Este es el tipo de valor que necesitamos en el Senado de Estados Unidos. No tiene ni idea de lo popular que es. ¡Ve, Ron, corre!», dijo Trump en abril.
Los medios de comunicación y las empresas tecnológicas atacan con frecuencia a Johnson por posturas que van en contra de sus narrativas, como la promoción de ciertos tratamientos para COVID-19.
Johnson dijo que está perplejo por los ataques, pero cree que provienen de colegas que no quieren tocar temas potencialmente polarizantes porque ellos están centrados en parte en conseguir la reelección.
«Así que cuando mis colegas ven lo maltrecho que probablemente me veo después que los medios se mantienen tirandome basura sin descanso, puedo entender por qué alguien no querría tocar algunos de estos temas o decir algunas de las cosas que digo, decir algunas [de] las verdades que digo, ¿por qué alguien querría tocar eso con un palo de diez pies?», dijo.
Johnson ya había manifestado su renuencia a presentarse de nuevo, citando su promesa de que solo cumpliría dos mandatos en el cargo.
Ningún republicano se ha presentado todavía para esa elección, ya que los posibles candidatos esperan ver qué hace Johnson.
Siete demócratas ya lanzaron sus campañas, entre ellos la tesorera de Wisconsin, Sarah Godlewski, el senador de Wisconsin, Chris Larson y el ejecutivo de The Milwaukee Bucks, Marc Lasry.
Lasry describió a Johnson como el «lacayo de mayor confianza de Trump en el Senado de Estados Unidos».
El ejecutivo del condado de Outagamie, Tom Nelson, otro candidato demócrata, afirmó que Johnson «pasó cuatro años mendigando la aprobación de Trump”.
Cada carrera para el Senado en las elecciones de medio mandato es de gran importancia debido a que la cámara está actualmente dividida al 50 por ciento entre republicanos y demócratas o independientes nominales que regularmente votan con los demócratas.
Los demócratas ganan en el desempate porque también ostentan la presidencia, un estrecho margen de control que podrían perder si los republicanos obtienen un escaño en 2022.
El Partido Republicano perdió dos escaños en 2020.
Treinta y cuatro escaños del Senado están en juego, y 20 de ellos están en manos de los republicanos.
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