El senador demócrata Bob Menéndez declaró el 9 de enero que no ha recibido «absolutamente nada» de Qatar.
«No he recibido nada, absolutamente nada, del gobierno de Qatar o en nombre del gobierno de Qatar para promover su imagen o sus asuntos», dijo en el pleno del Senado.
«La principal acusación del Gobierno sobre lo que supuestamente hice por Qatar fue apoyar una resolución del Senado».
La resolución, señaló Menéndez, agradecía a Qatar su ayuda en la evacuación de estadounidenses y refugiados afganos durante la retirada de Afganistán en 2021, tras casi 20 años de guerra en ese país.
«La sugerencia de que la presentación de un constituyente a una empresa de inversiones qatarí es ilegal no solo es errónea desde el punto de vista jurídico, sino que es peligrosa para la importante labor que realizamos todos nosotros como senadores», afirmó el Sr. Menéndez.
«Según la teoría del Gobierno, puede ser un delito que los miembros del Senado hagan presentaciones a empresas y electores de su propio estado para fomentar la inversión en su estado», añadió.
No obstante, denunció el historial de explotación laboral de Qatar en la construcción de estadios para la Copa del Mundo y su alianza con Irán.
En general, Menéndez arremetió contra las acusaciones de soborno.
Dijo que las acusaciones de septiembre, octubre y enero contra él «permiten al gobierno mantener la historia sensacionalista en la prensa, envenenan al jurado y pretenden condenarme en la corte de la opinión pública.»
Una ‘persecución
Dijo que lo que está haciendo el Departamento de Justicia es «una persecución» en lugar de un procesamiento.
El discurso de Menéndez en el pleno del Senado se produce exactamente una semana después de que se le imputara una nueva acusación, según la cual Menéndez, miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, de la que era presidente hasta su acusación inicial en septiembre, «utilizó su influencia y poder» e incumplió sus obligaciones para presentar al promotor inmobiliario Fred Daibes a un posible inversor qatarí.
La acusación no aclara cómo se benefició Qatar del acuerdo.
Menéndez obtuvo entradas para el Gran Premio de Fórmula Uno de 2022 y otros regalos de Qatar, según la acusación.
Se le imputan cargos de conspiración y soborno.
La acusación anterior de Menéndez alega que el senador y su esposa, Nadine Menéndez, aceptaron sobornos de tres partidarios -el Sr. Daibes, Wael Hana y José Uribe- a cambio de un trato favorable en torno al gobierno de Egipto, cuyo historial en materia de derechos humanos, al igual que el de Qatar, ha sido objeto de críticas. Los regalos incluían lingotes de oro, pagos de hipotecas y un coche de lujo.
Menéndez también habría presionado a la fiscalía general de Nueva Jersey en relación con un proceso contra Uribe, quien se declaró culpable en 2011 de un delito de robo con engaño en tercer grado y fue condenado a tres años de libertad condicional.
Además, Menéndez supuestamente prometió pedir al entonces presidente Donald Trump que nombrara a un fiscal federal para el distrito de Nueva Jersey que interfiriera en el enjuiciamiento del Sr. Daibes por fraude y otros cargos relacionados con las finanzas. Se declaró culpable de los cargos en 2018, pero retiró la declaración, y su juicio ha sido pospuesto.
La última vez que el senador fue acusado fue en 2015, pero el juicio resultó en un jurado en desacuerdo, y los fiscales declinaron volver a plantear el caso.
Menéndez se ha resistido a los llamamientos a dimitir y ha dicho que «seguirá luchando por el pueblo de Nueva Jersey con el mismo éxito que he tenido en las últimas cinco décadas» y que la gente «se apresura a juzgar a un latino y empujarlo fuera de su escaño.»
Menéndez, que no ha decidido si se presentará a la reelección en noviembre, cuenta con destacados oponentes demócratas en las primarias -entre ellos la primera dama de Nueva Jersey, Tammy Murphy, y el representante demócrata Andy Kim- en caso de que se presentara.
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