Un grupo de 21 senadores republicanos estatales de Pensilvania pidió a los líderes republicanos de la Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos que retrasen la certificación de los votos del Colegio Electoral hasta que se resuelva en los tribunales la batalla legal del presidente Donald Trump contra la secretaria de Estado de Pensilvania.
En una carta dirigida al líder republicano del Senado, Mitch McConnell ( R-Ky.) y al líder republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy ( R-Calif.), los senadores republicanos dijeron que, en su opinión, los resultados de las elecciones en Pensilvania no deberían haber sido certificados por la secretaria de Estado de Pensilvania, Kathy Boockvar.
«Miembros, nosotros pedimos más tiempo dado el hecho de que la Corte Suprema de Estados Unidos va a escuchar en los próximos días el caso Trump vs. Boockvar. Pedimos que demoren la certificación del Colegio Electoral para permitir el debido proceso mientras buscamos la integridad de las elecciones en nuestra Mancomunidad», dijeron los legisladores en la carta.
Ellos escribieron que «el balance del poder fue arrebatado a la legislatura estatal, la que por las Constituciones de Estados Unidos y Pensilvania, establece el tiempo, el lugar y la manera de celebrar las elecciones».
Los senadores alegaron que Boockvar, junto con el gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, y la Corte Suprema de Pensilvania, cometieron «numerosas violaciones ilegales» que le quitaron poder a la legislatura estatal.
La Corte Suprema de Pensilvania se «sobrepasó», dijeron los senadores, cuando resolvió aprobar una prórroga de tres días para los votos por correo de las elecciones generales de noviembre de 2020. Al hacerlo, la corte también aprobó un arreglo en el que serían contadas las boletas enviadas por correo sin sello postal.
A pesar de una petición de los senadores republicanos del estado, la Corte Suprema de Estados Unidos confirmó la extensión.
En su carta, los senadores también tomaron nota de otro fallo de la Corte Suprema del estado sobre las firmas en las papeletas de voto por correo, que prohíbe a los condados rechazar las boletas de voto por correo porque una firma no coincide con la que figura en el formulario de inscripción del votante.
En la carta se acusa a Boockvar de haber «usurpado la autoridad legislativa» al «permitir la proliferación de buzones no seguros en zonas demócratas clave» y «el día anterior a las elecciones, alentó a algunos condados (no todos) a que notificaran a los representantes de los partidos y candidatos los votantes por correo cuyas boletas contenían defectos de descalificación y les permitieran ‘remediar’ esos defectos».
Los legisladores también escribieron que a los observadores electorales republicanos se les prohibió observar el escrutinio de los votos de Filadelfia. Incluso después de una orden judicial, los observadores electorales fueron trasladados a un lugar tal que no podían supervisar eficazmente el escrutinio.
«Las solicitudes de los legisladores para que se realicen investigaciones independientes fueron ignoradas por la administración» de Pensilvania, escribieron los legisladores.
Trump escribió el martes en Twitter sobre «¡GRANDES NOTICIAS EN PENSILVANIA!» refiriéndose a la carta.
Las oficinas de Wolf y Boockvar no respondieron de inmediato a los pedidos de comentarios de The Epoch Times.
La demanda de la campaña Trump, citada en la carta de los senadores de Pensilvania, fue presentada el 21 de diciembre, desafiando tres fallos de la Corte Suprema de Pensilvania que «cambiaron ilegalmente» las leyes de voto por correo «inmediatamente antes y después de las elecciones presidenciales de 2020», dijo el equipo legal.
El equipo argumentó que esas decisiones judiciales se emitieron en violación del Artículo II de la Constitución y del fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos en el caso Bush vs. Gore, el que resolvió una disputa de recuento de votos de Florida en el 2000. La demanda busca «todos los remedios apropiados», lo que incluye la anulación de los electores que se comprometieron con Joe Biden y el permiso para que la Legislatura de Pensilvania convoque a sus propios electores.
El 30 de diciembre de 2020, 27 legisladores republicanos de Pensilvania escribieron a McConnell y a McCarthy, pidiéndoles que impugnen los resultados de las elecciones de Pensilvania en espera de una investigación sobre las denuncias de fraude electoral.
Con información de Janita Kan.
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