Senadores reintroducen proyecto de Ley Gene para proteger del PCCh los datos genéticos estadounidenses

Por Shawn Lin
12 de junio de 2023 4:43 PM Actualizado: 12 de junio de 2023 4:43 PM

Dos senadores republicanos volvieron a presentar un proyecto de ley destinado a proteger datos genéticos de los estadounidenses en respuesta a la amenaza que supone la recopilación de estos datos por parte del Partido Comunista Chino (PCCh). La empresa líder en la industria genómica china, BGI Group (BGI), fue acusada en repetidas ocasiones de recopilar extensivamente datos genéticos de estadounidenses.

A la vanguardia de este esfuerzo están los senadores Marco Rubio (R-Fla.) y John Cornyn (R-Texas), quienes reintrodujeron la Ley de Gastos Genómicos y Mejora de la Seguridad Nacional, también conocida como «GENE Act (Ley GENE)».

«Los datos genómicos de los ciudadanos estadounidenses han sido agresivamente perseguidos por el Partido Comunista Chino (PCCh) a través de medios tanto legales como ilegales», afirma una declaración hecha pública por la oficina de Rubio el 6 de junio. «Estados Unidos debe avanzar en su seguridad para evitar el riesgo de que cualquier dato sea vulnerable a la influencia internacional».

La declaración explica además que Rubio y Cornyn reintrodujeron esta legislación para «contrarrestar la creciente amenaza causada por el PCCh».

«Durante demasiado tiempo, la República Popular China ha recopilado los datos sanitarios de los estadounidenses sin el suficiente escrutinio», dijo Cornyn en la declaración. «Esta legislación haría frente a esta creciente amenaza para la seguridad nacional y garantizaría que la información genética privada no caiga en las manos equivocadas».

El contenido de este proyecto de ley incluye «exigir al Comité de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos (CFIUS) que incluya al Comité Selecto del Senado sobre Inteligencia y al Comité del Senado sobre Relaciones Exteriores en sus sesiones informativas» para mejorar la supervisión del Congreso; Ordena al CFIUS que revise la normativa para exigir la notificación obligatoria de cualquier acuerdo comercial que implique a empresas dedicadas al negocio genético; Exige la consulta con el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Estados Unidos para cualquier acuerdo comercial que implique transacciones de datos genéticos para facilitar un mejor conocimiento interinstitucional de tales transacciones.

Rubio y Cornyn presentaron anteriormente el proyecto de ley con el mismo nombre en mayo de 2021, pero no superó el examen legislativo, por lo que se vuelve a presentar este año.

BGI es acusado de utilizar la pandemia para adquirir datos

La aparente amenaza del PCCh está estrechamente relacionada con el grupo BGI, antes llamado Instituto de Genómica de Beijing. En febrero de 2021, el Centro Nacional de Contrainteligencia y Seguridad de Estados Unidos (NCSC) publicó un informe en el que ya advertía de la recopilación de datos genómicos estadounidenses por parte del PCCh y afirmaba que tales actividades suponían graves amenazas para la privacidad de las personas, la economía estadounidense y la seguridad nacional. BGI aparecía mencionada varias veces en el informe.

El informe de contrainteligencia del NCSC señala que, a medida que la pandemia de COVID-19 se extendía por todo el mundo, el PCCh comercializaba agresivamente reactivos de las pruebas de virus y laboratorios fabricados en China. El grupo BGI habría afirmado de haber vendido herramientas de análisis de virus a 180 países y establecido laboratorios de análisis de virus en 18 países hasta agosto de 2020. El documento sostiene que estas actividades ayudarían al PCCh a recopilar los datos genéticos de los extranjeros.

De acuerdo a un artículo de The Wall Street Journal de enero del mismo año, al menos 11 departamentos de salud de estados de EE. UU. informaron de que habían recibido del grupo BGI material de marketing para kits de pruebas de detección o servicios de laboratorio. BGI intentaba promocionar sus productos para su uso en laboratorios gestionados por el gobierno o para la creación de laboratorios completos.

Un alto funcionario estadounidense que ha supervisado las actividades de BGI declaró que «la expansión de la cuota de mercado de BGI no busca el beneficio económico, sino la obtención de datos».

El Grupo BGI, fundado en 1999 y con sede en Shenzhen, China, es conocido a menudo como el «Huawei» de la industria china de la tecnología genética. Según su informe anual para 2022, publicado a finales de marzo de este año, BGI tiene influencia en más de 100 países del mundo. Colabora con más de 3000 instituciones médicas y de investigación extranjeras en regiones como Europa, América y Asia-Pacífico. En China, colabora con más de 2000 instituciones de investigación y más de 2300 instituciones médicas.

El BGI apunta a datos genómicos de estadounidenses

Antes de la pandemia, el BGI ya había mostrado un gran interés por secuenciar los genomas de los estadounidenses. Según un informe de la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad de Estados Unidos y China (USCC), de febrero de 2019, a través de BGI, el PCCh se ha había estado infiltrando en los datos biométricos de los estadounidenses, incluida la recopilación de información genética de los estadounidenses.

El informe ofrece ejemplos, como uno de noviembre de 2011, cuando el grupo BGI y el Hospital Infantil de Filadelfia (CHOP) anunciaron una relación de colaboración para llevar a cabo investigaciones genómicas utilizando la tecnología de secuenciación del BGI y el biobanco pediátrico del CHOP. En octubre de 2011, el BGI también firmó un acuerdo con la Universidad de California, Davis, para establecer un centro de secuenciación genómica en el campus y llevar a cabo investigaciones utilizando el biobanco de la universidad. Ese mismo año, el BGI colaboró con instituciones médicas estadounidenses como Autism Speaks, en investigaciones genéticas.

A lo largo de los años, el BGI ha establecido estrechas relaciones con instituciones de investigación, hospitales y fundaciones influyentes de Estados Unidos, obteniendo acceso a los datos genéticos de los estadounidenses dedicados a la investigación. Los laboratorios de BGI en Hong Kong han obtenido incluso certificados para la investigación del Colegio de Patólogos Americanos (CAP) en 2015 y 2017, así como licencias de Enmiendas de Mejora de Laboratorio Clínico (CLIA) de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

CLIA es una licencia obligatoria para prestar servicios clínicos a los estadounidenses, mientras que CAP es una certificación opcional y acreditada estándar de la industria. El informe del USCC indica que las certificaciones CLIA/CAP abren la puerta al acceso a los datos sanitarios de los estadounidenses, incluida la información genética.

La USCC cree que el grupo BGI podría estar construyendo una base de datos genéticos de estadounidenses.

Lazos del BGI con militares chinos

En enero de 2021, Reuters llevó a cabo una investigación de más de 40 documentos públicos y reveló que el BGI ha colaborado estrechamente con el ejército chino.

Según Reuters, la implicación de BGI con el ejército chino incluye desde proyectos como la reducción del mal de altura en los chinos Han hasta ayudar a los soldados fronterizos y la colaboración con expertos militares chinos en supercomputación. En 2015, el BGI y la Academia de Ciencias Médicas Militares, una institución militar china, obtuvieron una patente para realizar pruebas de coronavirus de bajo costo. El inventor de la patente fue el Jefe Científico de Enfermedades Infecciosas del BGI, Chen Weijun, que tiene conexiones con la Academia de Ciencias Médicas Militares. El BGI también colabora con al Universidad Nacional de Tecnología de Defensa de China.

En julio de 2021, Reuters volvió a informar de que una tecnología de pruebas genéticas prenatales utilizada por millones de futuras madres en todo el mundo se desarrolló en cooperación entre BGI y el ejército chino, y la empresa la utilizó para recopilar datos genéticos. El artículo afirma que las pruebas prenatales del BGI son la fuente de los datos genéticos de la empresa. Más de 8 millones de mujeres de todo el mundo han hecho uso de las pruebas genéticas prenatales de la empresa. Desde 2010, la empresa ha publicado sobre estas pruebas más de una docena de trabajos de investigación en conjunto con el ejército chino.

El grupo BGI ha negado todas estas acusaciones. La empresa ha manifestado su negativa a aceptar cualquier acusación que la vincule con el ejército chino. El BGI también niega las acusaciones de las agencias gubernamentales estadounidenses, afirmando que no recopila datos de pacientes.

Motivos para recopilar información genética

Aunque el BGI ha sido acreditado para recopilar información genética de personas de todo el mundo, no se comprenden del todo sus motivos. El sitio web oficial de BGI indica que la empresa puede proporcionar varios servicios de síntesis de genoma completo, incluidas secuencias de ADN diseñadas artificialmente y cualquier gen de interés.

El 27 de diciembre de 2017, Wang Jian, cofundador y presidente de BGI, afirmó durante un discurso en la Convención de Empresarios de Shenzhen de 2017 que BGI «podrá sintetizar químicamente cualquier vida» en los próximos cinco a diez años. La síntesis genética ha alcanzado un nivel industrial, y el BGI ya ha sintetizado virus, bacterias e incluso organismos más grandes como la levadura.

Wang Jian, fundador de la empresa china líder en tecnología genética BGI Group, dijo en la Convención de Emprendedores de Shenzhen de 2017 que en los próximos cinco a diez años sus científicos podrán «sintetizar químicamente cualquier vida», (Captura de vídeo)

Wang Jian predijo que para el año 2020, el BGI podría sintetizar una bacteria en solo dos días, «creando o una bacteria beneficiosa o una aterradora». “La humanidad ha pasado de las armas frías a las calientes a las bombas atómicas y definitivamente hará la transición a las armas vivientes”.

Justo antes del discurso de Wang Jian, el 10 de noviembre de 2017, el Liberation Army Daily del ejército chino publicó un artículo titulado “Cómo afectarán las armas genéticas a las guerras futuras”. El artículo sugirió que las armas genéticas se refieren a una nueva generación de armas biológicas creadas mediante el uso de tecnología de edición de genes para modificar la codificación de microorganismos patógenos, lo que tendría un efecto disuasorio estratégico.

Además, el BGI también ha ayudado a la policía del PCCh a establecer una base de datos genética. Un informe titulado “Vigilancia genética” publicado por el Instituto de Política Estratégica de Australia en junio de 2020 reveló que el régimen chino está recolectando muestras de ADN a gran escala para crear la base de datos de ADN forense más grande del mundo, que incluye decenas de millones de personas sin antecedentes penales. El BGI firmó acuerdos con las autoridades chinas para recolectar muestras biológicas y establecer bases de datos genéticas para el ministerio de Seguridad Pública.

El informe también menciona que en 2013 y 2016, el gobierno chino realizó una recolección de ADN entre grupos étnicos minoritarios en el Tíbet y en Xinjiang, bajo el pretexto de controles de salud anuales. Desde finales del año 2017, este programa se ha expandido a otras regiones de China.

Un mes después de la publicación del informe, Estados Unidos impuso sanciones a dos subsidiarias del BGI, citando que están ayudando al régimen chino en su vigilancia y persecución de los uigures en Xinjiang.

The Epoch Times pidió comentarios al BGI, pero no recibió una respuesta al momento de la publicación.


Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí


Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.