WASHINGTON—La nominación del presidente electo Donald Trump para dirigir el FBI causó conmoción en la capital, pero es en el Capitolio donde se decidirá su destino.
Varios senadores republicanos aún no se han comprometido, pero el nominado, Kash Patel, ya ha tenido una acogida más cálida que los anteriores nominados.
Al igual que otros nombramientos ejecutivos de alto nivel, el nombramiento de Patel tendrá que ser aprobado por el Senado, donde los republicanos entran en el próximo Congreso con una relativamente cómoda ventaja de 53 escaños frente a los 47 de los demócratas.
Para que la nominación de Patel sea confirmada, necesitaría ganar a todos los republicanos menos a tres en la cámara alta, en cuyo caso el entonces vicepresidente JD Vance presumiblemente emitiría un voto de desempate para impulsar la nominación.
Pero Patel, un viejo aliado de Trump que ha prometido reformas radicales en el FBI, necesitará el apoyo de varios republicanos cruciales para superar la línea de meta.
Un puñado de nombres —los senadores Lisa Murkowski (R-Alaska), Susan Collins (R-Maine), y John Cornyn (R-Texas), entre otros— han surgido una y otra vez durante las discusiones sobre los nominados de Trump, ya que cada uno ha sido conocido por romper con su partido en votos clave relacionados con temas sociales, derechos de armas y nominados.
Inicialmente, no estaba claro si la oposición a Patel rivalizaría con la experiencia del excongresista Matt Gaetz (R-Fla.), la elección original de Trump para fiscal general. Gaetz abandonó la carrera debido a lo que él percibía como una oposición insuperable entre los republicanos del Senado.
Sin embargo, aunque muchos legisladores aún no se han comprometido, Patel ya ha recibido una bienvenida más cálida que Gaetz en la cámara alta, y muchos dicen que planean investigar los antecedentes de Patel.
Cornyn no respondió directamente cuando The Epoch Times le preguntó si apoyaba la nominación de Patel.
«Me reuniré con él la semana que viene», dijo Cornyn, añadiendo que estaba «deseando hacerlo».
Ése era un sentimiento común entre muchos republicanos del Senado.
Collins le dijo a The Epoch Times que también estaba esperando más información antes de tomar una decisión sobre Patel.
«No sé mucho sobre él, así que tengo muchos deberes que hacer», dijo Collins.
El 2 de diciembre, Murkowski también se negó a opinar sobre Patel u otros nominados mientras hablaba con los periodistas, diciendo que no había dormido mucho la noche anterior debido a un vuelo.
Sin embargo, Patel recibió un espaldarazo del senador republicano Thom Tillis, otro legislador que se ha unido a los demócratas en algunas votaciones clave.
Tillis dijo que es «un presunto sí».
«Resulta que él y yo tenemos varios conocidos comunes que dicen cosas positivas», dijo Tillis. «Voy con una predisposición positiva».
Pero incluso algunos de los republicanos del Senado más partidistas dicen que están esperando saber más.
El senador John Boozman (R-Ark.) declinó responder cuando se le preguntó si apoyaría al nominado, pero dijo que «visitaría a [Patel] personalmente».
«Estoy deseando escuchar cuáles son sus objetivos», dijo Boozman.
El senador Chuck Grassley (R-Iowa) parecía favorable a la nominación, pero aún quiere comprobar la buena fe de Patel.
En un post en X, Grassley criticó al actual director del FBI, Christopher Wray (que probablemente será despedido por Trump si no dimite voluntariamente tras la toma de posesión de Trump) por haber «incumplido deberes fundamentales», entre ellos el cumplimiento de la supervisión del Congreso.
«Kash Patel debe demostrarle al Congreso que reformará y restaurará la confianza pública en el FBI», escribió Grassley.
Algunos de los republicanos conservadores más abiertos de la cámara, por su parte, ya se han mostrado entusiastas en su apoyo a Patel.
«No hay una buena razón para que ningún senador, demócrata o republicano, se oponga a @Kash_Patel», dijo el senador Mike Lee (R-Utah) en un post en X.
El senador Rand Paul (R-Ky.) le dijo simplemente a The Epoch Times: «Me gusta».
El senador Bill Hagerty (R-Tenn.) también es un partidario, diciendo durante una aparición el 1 de diciembre en «Meet the Press» que había animado a Trump a respaldar a Patel para el cargo.
Vinculó su apoyo a las reformas prometidas por Patel y a su trabajo en el pasado para contrarrestar las narrativas que afirmaban que Trump se confabuló con Rusia durante las elecciones de 2016.
Investigaciones posteriores desacreditaron esa narrativa, un escándalo del FBI que ahora se conoce con el nombre de «Rusiagate» entre los críticos.
«Kash Patel destapó la corrupción del FBI en el Rusiagate y tiene la experiencia adecuada para arreglar el FBI», dijo Hagerty en un post en X. “No es de extrañar que el establishment de Washington se alinee para oponerse a alguien que quiere cambiar Washington”.
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