El brote de COVID-19 está fuera de control en China continental y el número de casos notificados sigue aumentando. Las cifras de infecciones diarias en Shanghai siguen batiendo récords, y el sistema médico de la ciudad está al borde del colapso. Los residentes locales revelan que Shanghai se encuentra en confinamiento a pesar de no haber sido anunciado, y las cifras reales de infecciones podrían ser diez veces mayores que las de los informes oficiales.
El 23 de marzo, el régimen comunista chino informó de un total de 4937 nuevos contagios de COVID-19 en China continental. Entre ellos, el número en Shanghai volvió a alcanzar nuevas cifras, con 981 casos locales, 977 asintomáticos.
Muchas comunidades de Shanghai han sido cerradas, y los hospitales generales fueron cambiados temporalmente a hospitales designados para pacientes de COVID-19, aceptando solo a pacientes críticos, mientras que los principales hospitales de las ciudades suspendieron los servicios médicos debido al empeoramiento del brote.
Desde el 22 de marzo, un mensaje de «Shanghai estará bajo confinamiento durante 7 días» circuló ampliamente en las redes sociales chinas, haciendo que los residentes estuvieran aún más ansiosos. Muchos residentes corrieron a los principales supermercados para comprar alimentos y suministros, vaciando los estantes de las tiendas, durante las horas en que se les permitió salir de sus comunidades residenciales cerradas para conseguir alimentos.
El 23 de marzo, la Oficina de Seguridad Pública de Shanghai desmintió los reportes, calificándolos de noticias falsas. La policía dijo que había empezado a investigar a las personas que habían difundido esas noticias.
Sin embargo, los residentes locales revelaron a la edición en chino de The Epoch Times que muchas zonas de Shanghai han sido cerradas, que la ciudad está realmente bajo confinamiento y que el número real de infecciones es mucho mayor que el anunciado oficialmente.
El 22 de marzo, apareció en las redes sociales chinas un posteo en el que se afirmaba que el 21 de marzo se habían diagnosticado más de 8000 casos en la zona de Beicai del distrito de Pudong, en Shanghai. La cuenta oficial de Weibo de la Oficina de Información del Gobierno Municipal de Shanghai respondió rápidamente diciendo que se trataba de una noticia falsa.
Un miembro del personal de una empresa textil de Shanghai dijo a The Epoch Times el 23 de marzo que los reportes sobre los más de 8000 casos encontrados en Beicai Pudong eran ciertos. «Nuestro grupo [de redes sociales] envió la noticia de que se habían encontrado más de 8000 casos allí en un día. El marido de una compañera del grupo trabaja en la comisaría. Dijo que esto es real y que los funcionarios decidieron y han estado informando de los 8000 casos por separado en tandas, informando de 800 a 900 casos cada día».
Un residente apellidado Zhu en el distrito de Jing’an, Shanghai, dijo a The Epoch Times el 23 de marzo que la pandemia en Shanghai es realmente grave. Ahora, el Parque Deportivo del Distrito de Minhang y el Gimnasio del Distrito de Jiading se han convertido en hospitales de cabina móviles, aislando a los infectados asintomáticos y a los pacientes leves. En cuanto a las condiciones de aislamiento, dijo que es un poco como un «campo de concentración».
Otra residente en Shanghai apellidada Li dijo que su colega estaba en el distrito de Jiading, donde se acababa de levantar el confinamiento, y que ahora se ha vuelto a cerrar porque se han encontrado muchas infecciones asintomáticas allí. Muchos hoteles de Shanghai han sido confiscados para convertirse en lugares de cuarentena.
Li dijo que todos los lugares de trabajo en Shanghai ahora animan a la gente a trabajar desde casa. Algunas empresas siguen exigiendo a los empleados que trabajen en persona, pero necesitan obtener una aprobación, tener sus pases de entrada y salida sellados por sus oficinas comunitarias, y tener un certificado de prueba de ácido nucleico de 48 horas para poder salir de casa para trabajar.
Según los reportes de los medios de comunicación de China continental, el 22 de marzo, el alcalde de Shanghai celebró una sesión de «debate» con el Quinto Equipo de Inspección del Consejo de Estado del régimen chino enviado para inspeccionar el control de la pandemia en Shanghai.
Un ciudadano de Shanghai apellidado Zheng dijo a The Epoch Times el 22 de marzo que la llegada del equipo de inspección a Shanghai significa que el gobierno central no está satisfecho con el manejo de la pandemia en Shanghai, pero que no puede hacer mucho ahora.
Zheng dijo que, aunque Shanghai no diga oficialmente que la ciudad está bloqueada, de hecho, no es diferente de estar bajo encierro. La gente de otras zonas no se atreve a entrar en Shanghai y los residentes de Shanghai tampoco se atreven a salir de ella, debido a la pandemia.
Otro residente apellidado Ren dijo a The Epoch Times el 23 de marzo que los cierres en Shanghai eran excesivos e innecesarios, y no controlan la pandemia en absoluto. En su comunidad no se han encontrado casos confirmados, pero la comunidad está cerrada durante cinco días. La gente no puede ir a trabajar ni buscar tratamiento médico, lo que les está causando muchas molestias. «Mi hermana está gravemente enferma y quiero verla, pero no me dejan salir», dijo.
«También se han cerrado muchos hospitales en Shanghai, como el Hospital Xinhua. Cuando la pandemia es grave, ¿deben cerrarse los hospitales que tratan a los enfermos y salvan a la gente?», preguntó.
Con información de Fang Xiao, Gu Xiaohua, Luo Ya y Hong Ning.
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