El Partido Comunista Chino (PCCh) continúa con su persecución a nivel nacional contra los seguidores de Falun Gong, una práctica espiritual tradicional que el régimen ha reprimido fuertemente desde 1999.
Según las estadísticas de octubre dadas a conocer el 12 de noviembre por Minghui.org, un sitio web con sede en EE.UU. que rastrea la persecución a Falun Gong en China, la policía arrestó y acosó ilegalmente a 1077 practicantes de Falun Gong en octubre, en 139 ciudades de 27 provincias y regiones. Los tribunales de todo el país condenaron a 65 practicantes de Falun Gong a la cárcel por su fe. Los abogados chinos de derechos humanos han dicho que tales enjuiciamientos son ilegales, ya que violan la constitución de China que garantiza la libertad de creencia.
Mientras China celebró el tradicional Festival llamado Doble Novena en octubre, el cual enfatiza el respeto por las personas mayores, 92 practicantes de Falun Gong mayores de 65 años fueron secuestrados y acosados, incluidos dos practicantes de 90 años. Otros 19 practicantes de Falun Gong mayores, que también tenían más de 65 años, fueron condenados ilegalmente a prisión, el mayor de los cuales tenía 80 años.
El informe también detalla la persecución financiera del régimen chino. En octubre, la policía y los tribunales del PCCh exigieron un total de 417,840 yuanes (USD 62,300) en efectivo a practicantes de Falun Gong secuestrados. Mientras tanto, las pensiones de 34 practicantes fueron suspendidas sin fundamento.
El informe Minghui también registró un arresto masivo reciente de practicantes de Falun Gong.
En la noche del 27 de octubre, el Equipo de Seguridad Nacional de la provincia de Hunan y la ciudad de Changsha, junto con la policía del distrito local (conocida como oficinas de seguridad pública en China), secuestraron a 14 practicantes de Falun Gong y allanaron ilegalmente sus hogares.
Se dieron a conocer detalles de casos representativos de persecución a practicantes de Falun Gong en octubre.
El caso de Ma Zhenyu
Zhang Yuhua, la esposa del practicante de Falun Gong detenido, Ma Zhenyu, explicó la difícil situación de su esposo al presidente Donald Trump durante un evento sobre libertad religiosa celebrado en Washington, el 17 de julio. Ma ha sobrevivido a torturas que ha soportado en campos de trabajo forzado.
El 20 de julio, el secretario de Estado, Mike Pompeo, emitió una declaración condenando la persecución del PCCh a Falun Gong. Citando el caso de Zhang y su esposo como ejemplo, exigió que el PCCh detenga de inmediato la tortura y el abuso a los practicantes de Falun Gong y libere a los que han sido encarcelados por sus creencias.
Aunque este caso ha recibido una gran atención por parte de la comunidad internacional, Ma no ha recuperado la libertad a pesar de haber cumplido plenamente su condena.
Ma era un exingeniero de radar del 14º Instituto de Investigación de Nanjing, del Ministerio de Industria de la Información de China. Fue sentenciado a tres años de prisión por enviar cartas a los líderes del PCCh sobre Falun Gong, pidiendo el fin de la persecución que lleva el estado comunista contra los practicantes. Su sentencia terminó el 19 de septiembre. La prisión de Suzhou, en la provincia de Jiangsu declaró que Ma fue entregado a la oficina de policía de Nanjing ese día. Zhang dijo que hasta ahora no ha podido comunicarse con su esposo.
Según los informes, Ma está ahora encarcelado en una comisaría de policía en la aldea de Suojin, distrito de Xuanwu de la ciudad de Nanjing, según Minghui.org. Está confinado en una habitación contigua a la sala de correo de la comisaría. Los agentes también han presionado a la familia de Ma, incluida su madre de 80 años, exigiendo que no se comuniquen con su esposa en Estados Unidos.
Ingeniero senior de Shanghai encarcelado por demandar al Ministerio de Seguridad Pública
El informe de Minghui también detalló el caso del experto en ingeniería de Shanghai, Xu Yongqing, quien también es practicante de Falun Gong. Después de su encarcelamiento de dos años en la prisión de Hongze Lake, que terminó el 28 de noviembre de 2019, Xu ha sido continuamente acosado, monitoreado y perseguido por las autoridades locales.
En diciembre de 2016, Xu Yongqing presentó una solicitud de «divulgación de información» del Ministerio de Seguridad Pública de China, preguntando si su documento «Aviso sobre ciertas cuestiones relativas a la identificación y prohibición de organizaciones herejes» seguía siendo válido.
El documento enumeraba 14 «organizaciones heréticas» etiquetadas por el PCCh, que no incluían a Falun Gong.
A falta de una respuesta del Ministerio de Seguridad Pública, Xu presentó una demanda ante el Segundo Tribunal Intermedio de Beijing, en mayo de 2017, demandando al ministerio por «inacción administrativa».
Luego, el ministerio ordenó a la oficina de policía de Shanghai que presionara a Xu para que retirara la demanda, pero él se negó.
El 29 de noviembre de 2017, Xu fue secuestrado por agentes de la policía local y nacional en el distrito de Hanjiang, de la ciudad de Yangzhou. Fue sentenciado a dos años de prisión y multado con 5000 yuanes (USD 740) por un tribunal local.
Fue golpeado y herido en prisión. Después de su liberación, quedó desempleado debido a problemas de salud. Xu y su esposa alquilaron una casa en el campo, pero las autoridades locales los vigilaban y acosaban continuamente, según un informe de Minghui.
Durante el Festival del Medio Otoño, a principios de octubre, Xu regresó a su ciudad natal en la provincia de Zhejiang para visitar a su madre. El 11 de octubre, recibió un mensaje informándole que todas las pertenencias de su casa de Shanghai habían sido trasladadas a un almacén que pertenecía al comité del PCCh de Yanxing Village, aunque ya había pagado el alquiler al propietario para octubre y su contrato de alquiler no expiraba hasta el 31 de octubre. Xu regresó inmediatamente a la casa alquilada en Shanghai y descubrió que habían reemplazado la cerradura de la puerta. Tuvo que pasar la noche en un pequeño hotel cercano.
En la actualidad, Xu sigue sin hogar.
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