Al menos cuatro personas fallecieron, entre ellas una bebé de tres meses, tres fueron rescatadas con vida y seis permanecían atrapadas hasta el mediodía de este domingo tras el deslave de un cerro en el municipio Jilotzingo, Estado de México, vecino a la capital, ocurrido durante la noche del viernes y madrugada del sábado.
En un comunicado, la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) del gobierno mexicano informó que hasta el momento «se reporta el lamentable fallecimiento de cuatro personas, además de seis habitantes que permanecen atrapados y el rescate de tres con vida».
Las autoridades locales de Protección Civil indicaron que existen al menos otros cuatro puntos en el municipio donde ocurrieron deslaves y que los propios habitantes indicaron que no hay personas en riesgo, ni atrapadas.
La CNPC señaló que se han habilitado cuatro refugios temporales, donde se atiende a 152 personas.
Además de que agentes de las secretarías de la Defensa Nacional (SEDENA) y de Marina (SEMAR) mantienen activos los planes emergencia DN-III-E y Marina, es decir, planes de auxilio a la población en casos de desastres naturales o humanos, junto con agentes de la Guardia Nacional (GN).
En las labores dentro de la zona de emergencia, Protección Civil de México precisó que se ha desplegado 736 agentes de las citadas instituciones, en conjunto con personal de la CNPC, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el Instituto de Geología de la UNAM, además de autoridades estatales y municipales.
En el lugar trabajan seis máquinas de excavación que removieron decenas de toneladas de lodo y escombros tras el deslave del cerro al tiempo que casas y negocios del lugar fueron evacuados como medida de prevención.
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