Médicos chinos encontraron en lo profundo de la pierna de una mujer una aguja que le estuvo causando dolor durante aproximadamente medio mes.
Una radiografía a fines de abril demostró que estaba incrustada en el muslo por lo que los médicos utilizaron medios quirúrgicos para extraerla.
La señora Li, de 55 años, relató que pudo habérsela clavado accidentalmente un mes antes, mientras estaba cosiendo. según un informe publicado el 6 de mayo en la prensa china continental ThePaper.cn.
El jefe ortopédico responsable de la operación, el Dr. Lian Xiao, dijo que la aguja medía entre 1 y 1.5 pulgadas (3 a 4 centímetros), y que era tan delgada que era difícil encontrarla después de que se le incrustó, reportó Beijing News.
Li manifestó que sintió dolor en su pierna desde marzo, según ThePaper.cn. En ese momento estaba cosiendo unos botones para su sobrino. Ella recordó que tuvo que tomarse un descanso en su trabajo. La mujer explicó que tenía la costumbre de dejar una aguja dentro de la ropa, pero cuando reanudó la costura no prestó atención y pudo pasar que accidentalmente la aguja la penetrara.
«Esta aguja es muy delgada, así que cuando perforó la piel, el dolor podría haber sido momentáneo», sugirió el Dr. Lian a Beijing News. «Después de que perforó su piel, ya que era delgada, pudo moverse».
El médico dijo a Beijing News que la paciente ni siquiera podía encontrar la lesión después de que esta penetró al interior.
La paciente relató que sentía mucho dolor en su pierna desde principios de abril después que pasaba sentaba por un largo período de tiempo o caminaba.
«Compré muchas cremas médicas para poner en [mi pierna], pero ninguna de ellas hizo nada», dijo Li a ThePaper.cn. «También recibí antibióticos de los hospitales locales, lo que ayudó a la parte inflamada en la parte posterior de mi pierna, pero aún me duele».
«También me di un golpe, y me dolió cuando lo toqué».
La paciente llegó al departamento de ortopedia del hospital local, y la radiografía reveló la aguja en lo profundo de su muslo. Se había movido tanto que ahora estaba mirando hacia arriba en su pierna.
«Estuvo caminando por alrededor de medio mes con la aguja clavada en su pierna y eso podría haberla movido«, dijo el Dr. Lian al Beijing News.
«Ella estaba realmente sorprendida», agregó el médico. «En ese momento, ni siquiera se le ocurrió en cómo la aguja había penetrado».
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