TAIPEI, Taiwán— China no está mostrando ninguna señal de que vaya a disminuir su agresión contra Taiwán en 2022, después de que el ejército chino enviara 39 aviones militares a la zona de identificación de defensa aérea de la isla el 23 de enero, un récord en un solo día este año.
En la última incursión participaron 34 cazas J-16 y J-10, un bombardero H-6 y cuatro aviones con capacidad de guerra electrónica, según el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán. En respuesta, los militares taiwaneses pusieron en marcha sus cazas, emitieron avisos por radio y desplegaron sistemas de misiles de defensa aérea para vigilar las actividades.
Los aviones de guerra chinos han estado haciendo incursiones periódicas en la zona de identificación de defensa aérea (ADIZ) de la isla desde septiembre de 2020, fecha en que el Ministerio de Defensa de Taiwán comenzó a publicar información sobre la incursión tras un aumento significativo en el número de tales vuelos.
En 2020 se registraron unas 380 salidas, según el ministerio. El número se duplicó con creces hasta llegar a unas 961 salidas en 2021. El año pasado, la mayor demostración de fuerza del régimen chino se produjo el 4 de octubre, cuando 56 aviones militares incursionaron en la zona ADIZ de la isla.
En lo que va del mes, solo ha habido cinco días en los que el ministerio no informó de ninguna incidencia de la incursión china.
El Partido Comunista Chino está tratando de desgastar a la Fuerza Aérea de Taiwán con sus repetidas incursiones aéreas. Lo que es más importante, el régimen comunista espera intimidar a la isla para que se someta, de modo que Beijing pueda tomar Taiwán sin necesidad de recurrir a conflictos militares.
Pero la guerra siempre ha sido una opción para el régimen chino, ya que nunca ha renunciado al uso de la fuerza contra Taiwán, un país autónomo. En octubre del año pasado, el ministro de Defensa de Taiwán advirtió que Beijing sería capaz de organizar una invasión a gran escala de la isla en 2025.
Lin Ying-yu, profesor asociado de asuntos de Asia-Pacífico en la Universidad Nacional Sun Yat-sen de Taiwán, dijo al medio de comunicación local Central News Agency que la incursión del domingo podría ser una forma de Beijing de mostrar su poderío militar, en respuesta a las actividades militares conjuntas de Estados Unidos y Japón en aguas cercanas a Japón.
Durante seis días, hasta el 22 de enero, 10 buques militares estadounidenses —entre ellos los portaaviones USS Carl Vinson y USS Abraham Lincoln, un destructor y un buque de asalto anfibio— participaron en un ejercicio conjunto con la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón, según el medio de comunicación japonés NHK. El ejercicio tuvo lugar en aguas al sur de la prefectura japonesa de Okinawa.
El ejercicio conjunto es para «fortalecer la capacidad de la Alianza Japón-Estados Unidos para una disuasión y respuesta efectivas», escribió en Twitter el 24 de enero la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón.
Otro portaaviones estadounidense, el USS Reagan, regresó a la ciudad japonesa de Yokosuka, tras meses de despliegue, de acuerdo al Comando de Sistemas Navales de Estados Unidos.
A principios de enero, en una reunión de defensa en línea entre altos funcionarios japoneses y estadounidenses, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, mencionó a China como una amenaza para el Indo-Pacífico, según el Pentágono.
«Nos reunimos en un contexto de crecientes tensiones y desafíos para la región Indo-Pacífica libre, estable y segura que ambos buscamos (…) desafíos planteados por las ambiciones nucleares de Corea del Norte y por el comportamiento coercitivo y agresivo de la República Popular China», dijo Austin.
La incursión aérea de China del 4 de octubre del año pasado también coincidió con actividades similares de la Marina estadounidense. Según el Instituto Naval de Estados Unidos y seis naciones —Canadá, Japón, Países Bajos, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Gran Bretaña— participaron en un ejercicio naval conjunto en aguas cercanas a Okinawa durante los días 2 y 3 de octubre de 2021.
En el ejercicio participaron 17 buques de superficie, incluidos cuatro portaaviones: el USS Ronald Reagan, el USS Carl Vinson, el HMS Queen Elizabeth británico y el portahelicópteros japonés JS Ise.
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